Las autonom¨ªas del PP retoman la carrera de rebajar impuestos en pleno debate sobre la financiaci¨®n
Las comunidades gobernadas por la derecha aplican recortes en los tributos sobre los que tienen competencia
La ola de rebajas fiscales auton¨®micas se ha intensificado tras los comicios regionales y locales del 28 de mayo, que ti?eron de azul el mapa de Espa?a. El PP se ha hecho con seis territorios m¨¢s ¡ªen total, gobierna en 11 comunidades¡ª y, en casi todos ellos, ha anunciado bajadas de impuestos, dirigidas principalmente al tributo que grava las sucesiones y las donaciones y al IRPF, y que se suman a las ya aprobadas en la segunda mitad de 2022 por Ejecutivos de distintos colores ¡ªen ese caso, para mitigar el impacto de la inflaci¨®n¡ª. Mientras tanto, en plena negociaci¨®n para que se constituya el Gobierno central, el incombustible debate sobre la reforma de la financiaci¨®n auton¨®mica ha vuelto a estar sobre la mesa y las comunidades han relanzado sus exigencias particulares.
¡°Es urgente bajar los impuestos a las familias de las islas en un momento en el que todo sube¡±, dijo hace escasas semanas Margarita Prohens (PP), la nueva presidenta de Baleares, una de las primeras comunidades en anunciar rebajas fiscales tras las elecciones. El archipi¨¦lago ha eliminado el gravamen sobre sucesiones y donaciones entre familiares cercanos y el tributo que grava las transmisiones patrimoniales en determinados supuestos.
En el mismo sentido se mover¨¢ el flamante presidente de Arag¨®n, Jorge Azc¨®n (PP), que ha logrado un pacto con Vox para gobernar la comunidad: bajar¨¢ el tramo auton¨®mico del IRPF para las rentas medias y bajas, se ha comprometido a disminuir sucesiones y donaciones hasta su m¨ªnimo legal y a elevar el m¨ªnimo exento del impuesto de patrimonio. Tambi¨¦n el Ejecutivo c¨¢ntabro introducir¨¢ medidas de desahogo fiscal en sus presupuestos de 2024; Extremadura rebajar¨¢ el IRPF y suprimir¨¢ Patrimonio, y Madrid, donde la popular Isabel D¨ªaz Ayuso ha vuelto a confirmar su liderazgo y que tiene en los bajos impuestos una de sus banderas, ha anunciado nuevos descuentos. Canarias, donde gobiernan PP y Coalici¨®n Canaria, tambi¨¦n ha anunciado que dejar¨¢ de gravar las sucesiones y las donaciones. Igual que Valencia.
Estos movimientos se producen gracias a las amplias competencias fiscales de las que gozan las comunidades. Gestionan y recaudan los impuestos que tienen totalmente cedidos, como los que afectan a las herencias y las transmisiones patrimoniales. Tambi¨¦n pueden modificar parcialmente el tributo m¨¢s potente de todo el sistema, el impuesto sobre la renta de las personas f¨ªsicas (IRPF): controlan la mitad de su escala impositiva ¡ªel tramo auton¨®mico¡ª, y pueden modificar tanto los m¨ªnimos familiares y personales como aplicar deducciones.
¡°No tiene por qu¨¦ haber contradicci¨®n [entre bajar impuestos y pedir una reforma del modelo de financiaci¨®n]. El sistema reparte recursos a igual esfuerzo fiscal. Luego, con lo que le toca, cada uno puede construir la cesta que m¨¢s le guste de servicios e impuestos. Algunos pueden preferir bajar impuestos y apa?arse con servicios algo peores, sin que eso quiera decir que les sobra el dinero. Y a la inversa, otros preferir¨¢n subir impuestos para mejorar servicios y eso no implica necesariamente que est¨¦n mal financiados¡±, resume el economista ?ngel de la Fuente, director del centro de estudios Fedea. ¡°Asturias, por ejemplo, opta por impuestos altos para financiar m¨¢s servicios y m¨¢s redistribuci¨®n, y Madrid, por lo contrario. Tan leg¨ªtima es una cosa como la otra, y hay que dejar que los votantes decidan¡±.
Si un territorio decide bajar impuestos, nadie le compensa, ya que cada autonom¨ªa debe aportar al sistema de financiaci¨®n el 75% de su recaudaci¨®n normativa, es decir lo que ingresar¨ªa por los tributos cedidos tradicionales y los compartidos ¡ªel 50% del IVA, el 50% del IRPF y el 58% de los impuestos especiales¡ª antes de aplicar subidas o bajadas fiscales. Despu¨¦s, esa bolsa com¨²n de recursos ¡ªen la que tambi¨¦n hay aportaciones del Estado¡ª se reparte entre las comunidades en funci¨®n de una serie de criterios dirigidos a nivelar la calidad de los servicios p¨²blicos entre regiones ricas y pobres.
¡°El sistema penaliza las bajadas de impuestos, aunque no se vea con claridad, porque evita que las comunidades que aplican rebajas fiscales reciban despu¨¦s una compensaci¨®n por la nivelaci¨®n¡±, aclara Diego Mart¨ªnez L¨®pez, profesor de Econom¨ªa en la Universidad Pablo de Olavide e investigador de Fedea. Es decir: cada autonom¨ªa aporta a la cesta com¨²n lo que le corresponde por su recaudaci¨®n normativa, sin importar si ha bajado o no las tarifas.
Ricos y pobres
El sistema de financiaci¨®n auton¨®mico lleva desde 2014 a la espera de ser renovado y, de vez en cuando, como ha ocurrido recientemente, enciende la arena pol¨ªtica provocando choques entre los barones regionales y el Ejecutivo central. De momento, los encontronazos no han llevado a ninguna parte. Los territorios est¨¢n enrocados en sus posiciones, que responden m¨¢s a su situaci¨®n demogr¨¢fica, geogr¨¢fica y financiera que al partido que manda. Solo coinciden en que es necesario un cambio y muchos de ellos exigen m¨¢s recursos, sobre todo aquellos territorios que reciben del sistema una financiaci¨®n inferior a la media.
Entre ellos est¨¢ la Comunidad Valenciana. Es una de las autonom¨ªas peor tratadas por el sistema de financiaci¨®n y la m¨¢s endeudada en relaci¨®n con su PIB. Aun as¨ª, la coalici¨®n de derechas que ha llegado al poder ha iniciado su propia retah¨ªla de rebajas: ha bonificado al 100% el impuesto de sucesiones y donaciones, un gravamen que en la pasada d¨¦cada fue v¨ªctima de una carrera a la baja entre comunidades y que vuelve a ser protagonista en esta nueva etapa de recortes tributarios. En el futuro, prev¨¦ suprimir el impuesto de patrimonio y reducir de manera dr¨¢stica el IRPF.
¡°No es incoherente que una comunidad mal financiada baje impuestos: es una decisi¨®n pol¨ªtica. Lo que no se puede hacer es que la rebaja la pague el sistema¡±, insiste Mart¨ªnez L¨®pez. ¡°Aunque es cierto que los territorios ricos y bien financiados tienen m¨¢s margen. La Comunidad de Madrid, por ejemplo, tiene una financiaci¨®n en la media y es rica¡±. Y los ciudadanos con rentas altas suelen hacer un menor uso de los servicios p¨²blicos, lo que reduce la presi¨®n sobre las cuentas auton¨®micas.
¡°Hay dos cuestiones que habr¨ªa que separar con claridad. Una es la bondad del reparto que hace el sistema y otra qu¨¦ uso hace cada comunidad de su autonom¨ªa. El sistema reparte recursos calculados como si nadie subiera o bajara impuestos (¡±a igual esfuerzo fiscal¡±), y la cuesti¨®n de si una comunidad est¨¢ bien o mal financiada ha de valorarse en estos t¨¦rminos¡±, incide De la Fuente. ¡°Luego cada comunidad es libre de decidir qu¨¦ hace con lo que le toca, pero tiene que apechugar con las consecuencias, sin pedir que le compensen por ello. Si un territorio est¨¢ bien financiado a igual esfuerzo fiscal, no deber¨ªa pedir m¨¢s recursos, pero eso es independiente de su cesta preferida¡±. Otra cosa es querer gastar m¨¢s a costa del Estado sin asumir el coste pol¨ªtico de subir impuestos. ¡°Las autonom¨ªas deben asumir su mayor¨ªa de edad fiscal, dejando de pedir dinero a pap¨¢ Estado¡±, zanja el director de Fedea.
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