El PSOE y Sumar pactan reformar el despido, pero no detallan c¨®mo: ?qu¨¦ cambios se avecinan?
Los expertos creen que el Gobierno plantear¨¢ una indemnizaci¨®n m¨ªnima que complemente el sistema tasado actual. Los socios expresaron opiniones divergentes al respecto la pasada legislatura
El PSOE y Sumar se han comprometido a reformar el despido. Es uno de los aspectos m¨¢s relevantes del acuerdo de Gobierno, ya que abre un debate que algunos actores econ¨®micos consideraban superado ¡ªespecialmente tras la reforma laboral de 2021, en la que no se modific¨®¡ª. El compromiso pol¨ªtico de los partidos es el siguiente: ¡°Establecer garant¨ªas para las personas trabajadoras frente al despido, dando cumplimiento a la Carta Social Europea y reforzando la causalidad en los supuestos de extinci¨®n de la relaci¨®n laboral¡±.
El acuerdo no detalla medidas concretas, y el ministerio competente (el de Trabajo) no especifica la letra peque?a. Pero, dadas las ¨²ltimas declaraciones de sus responsables y el redactado del acuerdo, se puede analizar cu¨¢les pueden ser las l¨ªneas maestras de un futuro cambio. Los expertos consultados coinciden al se?alar una indemnizaci¨®n m¨ªnima como una soluci¨®n previsible.
¡°El compromiso de las dos fuerzas pol¨ªticas¡±, dijo la semana pasada el secretario de Estado de Empleo, Joaqu¨ªn P¨¦rez Rey, ¡°es cumplir fielmente la Carta Social Europea en materia de despido¡±. ?Y qu¨¦ se?ala dicho texto al respecto? Reconoce ¡°el derecho de los trabajadores despedidos sin raz¨®n v¨¢lida a una indemnizaci¨®n adecuada o a otra reparaci¨®n apropiada¡±. En opini¨®n de UGT, en cuya sede P¨¦rez Rey pronunci¨® su discurso, la normativa espa?ola actual no asegura esa compensaci¨®n, especialmente cuando la relaci¨®n laboral ha sido corta.
Por ello el sindicato interpuso en mayo de 2022 una reclamaci¨®n ante el Comit¨¦ Europeo de Derechos Sociales, cuya resoluci¨®n se espera para finales de a?o. Y este organismo ya ha fallado que el sistema franc¨¦s e italiano no indemnizaban de forma adecuada, en condiciones homologables a las de Espa?a. Durante la pasada legislatura, el Ministerio de Trabajo manifest¨® en varias ocasiones que cumplir¨ªa con lo que dicte el Comit¨¦, pero el acuerdo de gobierno va incluso m¨¢s all¨¢, ya que relaciona la reforma con el texto, y no con la interpretaci¨®n. CC OO tambi¨¦n ha interpuesto una reclamaci¨®n parecida, que adem¨¢s aborda otras derivadas como el refuerzo de los supuestos de readmisi¨®n del trabajador.
P¨¦rez Rey afirm¨® que el sistema debe caminar hacia ¡°un despido restaurativo y disuasorio; no se puede despedir caprichosamente a la gente¡±. ¡°Eliminar un puesto de trabajo de manera injustificada¡±, continu¨® el secretario de Estado de Empleo, ¡°es una atentado a su ciudadan¨ªa porque quien no trabaja no solo no tiene, en muchas ocasiones deja de ser¡±. P¨¦rez Rey justifica esta afirmaci¨®n explicando que la identidad, muy a menudo, se basa en el trabajo: ¡°Decimos yo soy alba?il, camarero o profesor. No decimos yo hago de, sino soy. Por tanto, cuando a alguien se le priva injustamente del trabajo no solo se le priva de bienestar material, tambi¨¦n de una de las identidades m¨¢s fuerte que las personas pueden tener¡±.
?Es caro el despido en Espa?a?
Con el sistema actual, la indemnizaci¨®n m¨¢xima por despido improcedente en contratos indefinidos es de 33 d¨ªas de salario por a?o trabajado. Es el tope que recoge la legislaci¨®n laboral espa?ola desde 2012, cuando el Gobierno de Rajoy recort¨® 12 d¨ªas respecto a los 45 vigentes hasta entonces (que se mantienen para los periodos anteriores al cambio). La estad¨ªstica del Ministerio de Trabajo, de 2021, indica que la indemnizaci¨®n media fue de 11.417 euros, para los 444.102 trabajadores afectados. Y aquel fue un a?o de gran creaci¨®n de empleo. Los expertos coinciden al advertir dos velocidades: el sistema protege mucho a los trabajadores con antig¨¹edad y muy poco a los que acaban de empezar.
Crist¨®bal Molina, catedr¨¢tico de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la Universidad de Ja¨¦n, cree que estas cifras son la mejor prueba de que el despido en Espa?a es barato: ¡°Es impensable que hubiera ese volumen tan alto de despidos si fuera caro. Para las relaciones laborales cortas el despido es muy barato¡±. Adem¨¢s, la gran mayor¨ªa de las regulaciones de empleo (al menos el 68%) se resuelve con un acuerdo, que suele estar en un lugar a medio camino entre la exigencia del trabajador (lo m¨¢ximo que permite la ley) y el punto m¨ªnimo que originalmente propone la empresa.
En julio de 2022, el Comit¨¦ Europeo de Derechos Sociales dio la raz¨®n al sindicato denunciante franc¨¦s porque el sistema de este pa¨ªs de indemnizaci¨®n por despido sin causa justificada ¡°establece tramos indemnizatorios obligatorios, seg¨²n la antig¨¹edad del trabajador y el tama?o de la empresa (lo mismo que Espa?a), considerando que contraven¨ªa el derecho a la protecci¨®n en caso de terminaci¨®n del empleo, tanto en lo que respecta a la indemnizaci¨®n adecuada en caso de despido improcedente como al derecho a la readmisi¨®n obligatoria¡±. El Comit¨¦ tambi¨¦n ha fallado a favor de las reclamaciones sindicales en Italia o Finlandia.
Los empresarios suelen argumentar que el sistema tasado espa?ol fija horquillas m¨¢s altas que las de otros vecinos europeos. Y no les falta raz¨®n, pero los expertos siempre recuerdan que el sistema no se puede analizar solo en base a esta variable, que hay otros factores clave como cu¨¢nto protege, la fortaleza del desempleo, el tiempo de preaviso, si hay salarios de tramitaci¨®n... Tomando todo en cuenta, como hace la estad¨ªstica de la OCDE que mide la rigidez de la protecci¨®n del empleo, Espa?a (2,43 puntos) est¨¢ por debajo de Rep¨²blica Checa (el dato m¨¢s alto, 3,03), Portugal (2,87) o Francia (2,68), pero por encima de Alemania (2,33) o el Reino Unido (1,9).
Qu¨¦ cambios se avecinan
¡°Una modificaci¨®n bastante obvia¡±, opina Ana G¨®mez, presidenta de la Asociaci¨®n Nacional de Laboralistas en Espa?a (ASNALA), ¡°ser¨ªa establecer una indemnizaci¨®n m¨ªnima¡±. Esta experta cree que las indemnizaciones por antig¨¹edades largas son ¡°elevadas¡± y cumplen con una funci¨®n ¡°reparadora¡±, pero ¡°el tema est¨¢ en el par¨¢metro m¨ªnimo, ya que algunas personas reciben cantidades exiguas¡±. Fijar un m¨ªnimo ¡°podr¨ªa ser una soluci¨®n¡±.
Coincide Antonio ?lvarez, profesor del Departamento de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la Universidad de C¨¢diz: ¡°La reforma m¨¢s conservadora que quiera cumplir con lo que dice la Carta Social Europea al menos deber¨ªa establecer una indemnizaci¨®n m¨ªnima. Igual que hay un tope m¨¢ximo, un tope m¨ªnimo¡±. Molina considera que este nuevo elemento ¡°es el cambio m¨¢s sencillo para el legislador; mantener el sistema actual y a?adir una indemnizaci¨®n adicional que resulte disuasoria, que el empresario se lo tenga que pensar dos veces¡±. CC OO defiende la instauraci¨®n de una indemnizaci¨®n m¨ªnima, al igual que UGT, que la cifrar¨ªa en seis meses de salario por despido improcedente.
?lvarez cree que el cambio no se debe limitar a un m¨ªnimo que act¨²e como suelo. ¡°Mi propuesta partir¨ªa de una indemnizaci¨®n por despido m¨ªnima, pero aparte hay que contemplar un extra que no dependa de la antig¨¹edad, sino de la antijuricidad de la conducta¡±. En esa l¨ªnea, defiende que se contemple una reparaci¨®n en funci¨®n de las circunstancias del trabajador, cuando no haya justificaci¨®n para el despido. Esto ya se dio en una pionera sentencia conocida principios de a?o, que otorg¨® una indemnizaci¨®n superior a la tasada a una trabajadora despedida justo antes de la pandemia. El juez tom¨® en consideraci¨®n el da?o que le supon¨ªa perder su empleo justo entonces.
El punto de partida del razonamiento de ?lvarez, y de Molina, es que el coste del despido no puede resultar tan previsible, hasta el punto en que la empresa pueda establecer un coste-beneficio. ¡°Esto genera una perversi¨®n, convierte el despido en una forma normal de gestionar plantillas. Esa previsibilidad absoluta es rara si comparamos con otros pa¨ªses. En un delito ecol¨®gico no nos parecer¨ªa razonable anticipar cu¨¢nto tendr¨¢ que pagar la empresa, ya que entonces sabr¨ªa cu¨¢nto le compensa infringir y la sanci¨®n no ser¨ªa disuasoria¡±, indica el experto de la Universidad de C¨¢diz.
G¨®mez difiere: ¡°Una de las figuras m¨¢s certeras del derecho es la indemnizaci¨®n por despido. Que sea algo conocido es algo positivo, ya que aporta una gran seguridad jur¨ªdica. No se despide arbitrariamente, en la gran mayor¨ªa hay una justificaci¨®n, y cuando no la hay se repara¡±. Molina contrapone reclamando seguridad jur¨ªdica ¡°para el trabajador: ahora el empresario sabe cu¨¢nto le va a costar despedir, ?pero d¨®nde queda el derecho a la protecci¨®n del empleado, al que le pueden echar sin motivo por 800 o 1.500 euros?¡±.
Otro elemento que mencionan los expertos consultados es el salario de tramitaci¨®n (aquel que percibe un trabajador si impugna el despido y acaba siendo declarado nulo o sin causa justa), figura venida a menos con la reforma de 2012. ¡°No se puede cumplir con la Carta si no recuperamos los salarios de tramitaci¨®n. Son inexorables, un da?o inequ¨ªvoco porque corresponde a la retribuci¨®n que el trabajador ha dejado de recibir injustamente¡±, indica Molina. G¨®mez cree que una reforma con el esp¨ªritu del redactado en el pacto del PSOE y Sumar tambi¨¦n podr¨ªa abordar la causalidad: ¡°En 2012, de alguna manera, se simplific¨® la justificaci¨®n del despido. Creo probable que se intente una mayor exigencia en la justificaci¨®n¡±. ¡°Hay margen para una mayor precisi¨®n¡±, a?ade ?lvarez.
Rechazo empresarial
La patronal ni siquiera observa este tema como un objeto de debate. ¡°Llegamos a un acuerdo de reforma laboral donde hay temas que se acuerdan y otros que no se hablan porque est¨¢n dentro del acuerdo. Por tanto, no tenemos m¨¢s que decir¡±, coment¨® el presidente de la patronal, Antonio Garamendi, a principios de octubre. Lo dijo en un coloquio en el que tambi¨¦n participaron los l¨ªderes sindicales. ¡°Lo no tratado no lo hemos acordado, pero no significa que no lo trataremos. En el debate de la reforma laboral hab¨ªa temas que no se quer¨ªa que fueran objeto de la negociaci¨®n y por eso no lo fueron¡±, contest¨® el secretario general de UGT, Pepe ?lvarez. Su hom¨®logo de CC OO, Unai Sordo, dijo que Espa?a ¡°se debe replantear su modelo de despido, de forma que sea la ¨²ltima opci¨®n para la empresa¡±.
Tampoco es un asunto que entusiasme al PSOE, que ni lo mencionaba en su programa electoral. El ministro de Seguridad Social, Jos¨¦ Luis Escriv¨¢, dijo en abril que est¨¢ ¡°muy c¨®modo¡± con el sistema ¡°en los t¨¦rminos en los que est¨¢ en este momento¡±. Indic¨® que ¡°siempre hay que buscar un equilibrio entre distintos elementos¡±, y que, cuando se dise?an las indemnizaciones por despido, tienen que ¡°interiorizarse¡± tambi¨¦n elementos de incentivos al empleo. Cualquier cambio en la normativa exigir¨ªa el voto afirmativo de los partidos nacionalistas de derechas.
Es previsible que, a medio plazo una vez arrancada la legislatura, el Ministerio de Trabajo forme un grupo de expertos que proponga c¨®mo reformar el despido, como ya ha hecho el departamento de Yolanda D¨ªaz para otros cambios normativos. Fuentes del ministerio se?alan que esta iniciativa a¨²n no ha echado andar. ¡°Ser¨ªa importante que cuente con opiniones diversas, que si se hace fuera con un equipo plural¡±, finaliza G¨®mez.
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