Los retos de los 10 ministerios econ¨®micos: financiaci¨®n auton¨®mica, reducir la jornada laboral o m¨¢s vivienda p¨²blica

Una vez resuelta la incertidumbre sobre qui¨¦n ser¨¢ el presidente del Gobierno, llega el momento de ejecutar los compromisos pol¨ªticos. Estos son algunos de los temas con los que tendr¨¢n que lidiar los nuevos ocupantes de los ministerios de ¨¢mbito econ¨®mico.

Econom¨ªa. Quienquiera que finalmente desempe?e el cargo de ministro de Econom¨ªa (la reci¨¦n nombrada Nadia Calvi?o est¨¢ a la espera de que se resuelva su candidatura al Banco Europeo de Inversiones) tendr¨¢ por delante una legislatura compleja. Y no solo por las negociaciones a m¨²ltiples bandas que har¨¢n falta para tramitar cualquier legislaci¨®n. Tras la pandemia y la crisis de precios y energ¨¦tica, a partir del a?o que viene volver¨¢n a aplicarse las reglas fiscales europeas. Conseguir que el d¨¦ficit p¨²blico pueda bajar a un ritmo muy gradual ser¨¢ uno de los principales objetivos en Bruselas.

Estas negociaciones sobre la senda fiscal ser¨¢n duras y exigentes. Otro cap¨ªtulo importante ser¨¢ la gesti¨®n del plan de recuperaci¨®n y los fondos europeos. Ha sido dif¨ªcil poner en marcha el despliegue de estos recursos. Se acumulan retrasos y cumplir con el plan en tiempo y forma ser¨¢ una tarea ingente. Incluso puede acabar siendo necesario pedir una extensi¨®n de los plazos, algo que tampoco se antoja una tarea f¨¢cil en Europa.

Hacienda. El asunto m¨¢s urgente para el ministerio liderado por Mar¨ªa Jes¨²s Montero es aprobar los Presupuestos Generales del Estado para el pr¨®ximo a?o logrando los apoyos de un arco parlamentario muy fragmentado. El m¨¢s delicado, por su trascendencia pol¨ªtica, es la renovaci¨®n de la financiaci¨®n territorial. La reforma del sistema lleva casi una d¨¦cada pendiente, era un compromiso de la anterior legislatura y ahora vuelve a estar sobre la mesa. Pero la situaci¨®n es m¨¢s complicada que hace un a?o, porque la mayor¨ªa de las comunidades est¨¢n lideradas por la oposici¨®n. Adem¨¢s, hay recelo por parte los barones regionales hacia las cesiones que el PSOE ha hecho a los independentistas catalanes, entre ellas la condonaci¨®n de parte de la deuda auton¨®mica.

Otro reto al que se enfrenta la ahora vicepresidenta cuarta es la reforma fiscal, que tampoco se abord¨® en la anterior legislatura. Pero s¨ª hay un punto de partida: el libro blanco elaborado por el comit¨¦ de expertos. Este hace particular hincapi¨¦ en el impulso de la fiscalidad medioambiental, un asunto peliagudo tanto en t¨¦rminos de negociaci¨®n pol¨ªtica como por su potencial impacto en los hogares.

Hacienda tambi¨¦n deber¨¢ decidir qu¨¦ hacer con los grav¨¢menes extraordinarios que expiran a finales del pr¨®ximo a?o ¨Ca banca, energ¨¦ticas y grandes fortunas¨C y las rebajas fiscales aprobadas para mitigar el impacto de la inflaci¨®n. Todo ello con la vista puesta en el d¨¦ficit p¨²blico: el a?o que viene volver¨¢n a funcionar las reglas fiscales comunitarias. El Ejecutivo se ha puesto como objetivo un desfase del 3% del PIB, el m¨¢ximo permitido por la legislaci¨®n europea, equivalente a un ajuste de m¨¢s de 10.000 millones de euros. Deber¨¢ lograrlo, adem¨¢s, en un contexto econ¨®mico incierto, de desaceleraci¨®n generalizada.

Trabajo. De la extensa agenda incluida en el acuerdo de investidura, la primera tarea en la que previsiblemente se embarcar¨¢ Yolanda Diaz es la negociaci¨®n con empresarios y sindicatos de una nueva subida del salario m¨ªnimo interprofesional, situado en 1.080 euros al mes en 14 pagas tras haber aumentado un 47% en la legislatura pasada. Esta negociaci¨®n no ser¨¢ f¨¢cil. Entre otras cosas, porque su intenci¨®n no es solo aplicar un nuevo incremento, sino blindar en el Estatuto de los trabajadores que esta renta crezca siempre acompasada con el 60% del salario medio para garantizar su poder adquisitivo.

Acto seguido, probablemente D¨ªaz no tardar¨¢ en poner en marcha la medida estrella en materia laboral: la reducci¨®n de la jornada de trabajo de las actuales 40 horas semanales a 37,5 horas. Su aplicaci¨®n se producir¨¢ de forma progresiva, hasta las 38,5 horas en 2024, culminando el recorte en 2025. Pero probablemente su proyecto m¨¢s complicado ser¨¢ el de reescribir el Estatuto de los Trabajadores para adaptarlo al siglo XXI, incluyendo todas las formas de trabajo (aut¨®nomos y cooperativistas) e incorporando en esta norma la transici¨®n digital, incluido el gobierno de los algoritmos y la transici¨®n verde.

Las normas laborales que quiere reformar D¨ªaz dentro de este nuevo redactado del Estatuto de los Trabajadores no son de menor importancia. La m¨¢s pol¨¦mica ser¨¢, sin duda, la esperada reforma de la indemnizaci¨®n por despido, para que esta se fije no solo en funci¨®n de la antig¨¹edad del trabajador despedido sino tambi¨¦n con otros par¨¢metros.

Hay otras dos iniciativas que D¨ªaz quiere desarrollar aunque no le resulte sencillo: el desarrollo del art¨ªculo 129 de la Constituci¨®n para que los sindicatos se sienten en los consejos de administraci¨®n de las empresas, y una reforma de las reglas de representatividad empresarial, especialmente de las pymes. Para ambas cuestiones se encontrar¨¢ con la resistencia patronal.

Transportes. Oscar Puente asumir¨¢ la cartera de Transportes y Movilidad Sostenible, despojada ya del ¨¢rea de Vivienda, con un gran reto: asegurar el traspaso de todo el servicio de Cercan¨ªas a la Generalitat de Catalu?a. No ser¨¢ f¨¢cil porque, por primera vez, esa transferencia implica no solo la gesti¨®n, sino tambi¨¦n los activos tanto de Renfe (trenes) como de Adif (v¨ªas y estaciones), as¨ª como el personal que ahora depende de ambas empresas estatales, y que puede rondar los 3.500 empleados, que no ven claro su futuro laboral. Tambi¨¦n tendr¨¢ que hacer frente al proyecto de cobro de peajes de las autov¨ªas hasta ahora gratuitas. El anterior Gobierno paraliz¨® la propuesta ante Bruselas en plena campa?a electoral y se garantiz¨® que no entrara en vigor en 2024, pero el creciente d¨¦ficit puede acabar resucitando la impopular medida. Fuera del ¨¢mbito catal¨¢n, completar el mapa del AVE, sobre todo en Extremadura y el noroeste, y el Corredor Mediterr¨¢neo, le ocupar¨¢ una buena parte de su tiempo.

Vivienda. La vivienda recupera un ministerio propio, como el que el que ya existi¨® entre 2004 y 2010. Isabel Rodr¨ªguez, hasta ahora portavoz del Ejecutivo, ser¨¢ la cuarta ministra socialista del ramo en lo que va de siglo. Su radio de acci¨®n es limitado porque se trata de una competencia transferida a las comunidades aut¨®nomas, pero s¨ª se encarga de la asignaci¨®n y distribuci¨®n de los recursos que recogen los planes estatales (el actual est¨¢ vigente hasta 2025). Y ah¨ª hay que tener en cuenta el extraordinario impulso que han supuesto los fondos europeos: representan unos 2.500 millones del total de 3.472 millones que los Presupuestos de 2023 destinaron a Vivienda.

Llevar a buen puerto esa inyecci¨®n econ¨®mica, mayoritariamente pensada para rehabilitaci¨®n y mejoras de eficiencia energ¨¦tica de los edificios, es el primero de los retos del nuevo departamento. El segundo desaf¨ªo es contribuir al desarrollo de un parque de viviendas accesibles a medio plazo, una idea en torno a la que gir¨® buena parte de la campa?a socialista en las ¨²ltimas elecciones auton¨®micas (se prometieron cerca de 200.000 pisos). Y deber¨¢ hacerlo en consonancia con un poder auton¨®mico y local, que en gran parte reside en el PP.

Aunque seguramente la mayor patata caliente que tiene la nueva ministra sobre la mesa es la nueva ley de Vivienda, aprobada el pasado mayo tras grandes tensiones en el Ejecutivo de coalici¨®n. Lo m¨¢s inmediato es la definici¨®n de un ¨ªndice que permita poner en marcha los controles de precios de alquiler que prev¨¦ la norma en las zonas tensionadas. Solo Catalu?a se ha interesado en hacerlo, pero el retraso del Gobierno en aprobarlo ya ha provocado alg¨²n roce con la Generalitat en los ¨²ltimos meses.

Energ¨ªa. El siempre amplio abanico de temas energ¨¦ticos pendientes empieza con dos decisiones: la pr¨®rroga (o no) del paquete de medidas anticrisis ¡ªsobre todo, la bajada de la presi¨®n fiscal sobre los suministros y la subvenci¨®n a los consumidores de gas a trav¨¦s de la TUR¡ª y la pr¨®rroga (o no) del tributo extraordinario sobre las empresas energ¨¦ticas. La siguiente parada ser¨¢ la concreci¨®n de los llamados mecanismos de capacidad, un sistema que busca, ante todo, dar certidumbre a los due?os de las centrales clave para la garant¨ªa de suministro. Y que es, adem¨¢s, clave de b¨®veda de la reciente reforma del mercado el¨¦ctrico europeo. Tambi¨¦n queda por aterrizar una medida estrella en el citado pacto PSOE y Sumar, y que el propio Pedro S¨¢nchez mencion¨® en su discurso de investidura: la divisi¨®n del actual superregulador, la CNMC, para volver al esquema anterior a 2013, en el que la Comisi¨®n Nacional de la Energ¨ªa (CNE) recupere su entidad propia.

Agricultura. Un vistazo a la lista de productos que m¨¢s han subido de precio entre enero y octubre permite hacerse una idea del se¨ªsmo que vive el campo. En primer lugar aparece el aceite de oliva, en el tercero las frutas, y del top 10 forma parte tambi¨¦n la carne de porcino. La acumulaci¨®n de problemas del sector en los ¨²ltimos tiempos, sobre todo la sequ¨ªa y los incrementos de costes por la subida de los combustibles y los fertilizantes, seguir¨¢n sobre la mesa de Luis Planas en su segunda etapa como ministro de Agricultura. Junto a ellos habr¨¢ otros asuntos m¨¢s estructurales, como la falta de mano de obra, la carencia de nuevos agricultores y ganaderos que asuman el relevo generacional, la expansi¨®n internacional o la digitalizaci¨®n.

Tambi¨¦n otras cuestiones, como la cuant¨ªa de las ayudas al sector, la ejecuci¨®n del PERTE agroalimentario, la duraci¨®n de las rebajas del IVA a los alimentos, la competencia desleal de terceros pa¨ªses (en septiembre las organizaciones agrarias protestaron por la llegada de aceitunas de Marruecos con un alto contenido en pesticidas), la adaptaci¨®n del sector a los cada vez m¨¢s estrictos requisitos medioambientales que marca la Uni¨®n Europea o el cumplimiento de la Ley de Cadena Alimentaria que obliga a las cadenas a pagar precios superiores a los costes para evitar que los agricultores y ganaderos tengan que vender a p¨¦rdidas.

Transformaci¨®n digital. La tarea m¨¢s inmediata de Jos¨¦ Luis Escriv¨¢ al frente del ministerio ser¨¢ llevar a buen puerto las negociaciones finales del reglamento europeo de inteligencia artificial. La norma, que ordenar¨¢ los usos y restricciones de esta tecnolog¨ªa, est¨¢ ahora mismo en fase de negociaci¨®n entre el Parlamento Europeo, la Comisi¨®n y el Consejo. La Presidencia espa?ola del Consejo de la UE se propuso que estuviera lista antes de agotar el mandato en diciembre.

Una vez se apruebe, Escriv¨¢ deber¨¢ asegurarse de que Espa?a cumple la norma. Para ello ser¨¢ capital que eche a andar la Agencia Espa?ola de Supervisi¨®n de la Inteligencia Artificial (Aesia). Ubicada en A Coru?a, actualmente se encuentra en una fase embrionaria: cuenta ya con dotaci¨®n presupuestaria, pero la sede que ocupar¨¢ todav¨ªa no est¨¢ lista ni se ha contratado al personal que deber¨¢ analizar los algoritmos para asegurarse de que cumplen con la ley.

Deber¨¢ tambi¨¦n seguir implementando la Agenda Espa?a Digital 2026, que pretende impulsar las infraestructuras digitales en todo el pa¨ªs, as¨ª como las competencias y la formaci¨®n en nuevas tecnolog¨ªas, y canalizando parte de los fondos europeos Next Generation enfocados en la digitalizaci¨®n de la sociedad.

Seguridad Social. El ministerio que dirigir¨¢ Elma Saiz afronta un cuatrienio lleno de compromisos. Entre ellos, el m¨¢s urgente (y delicado) tiene que ver con la transferencia, en el plazo de dos a?os, de la gesti¨®n econ¨®mica de la Seguridad Social al Pa¨ªs Vasco, una hist¨®rica demanda del PNV que el presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, satisfizo para obtener el apoyo de los jeltzales. El nombramiento de Saiz, reconocida fiscalista navarra, se entiende, entre otras razones, por su conocimiento del marco econ¨®mico vasco.

La ministra deber¨¢ revisar tambi¨¦n la proyecci¨®n del gasto de las pensiones en 2025, y tomar medidas de ajuste si se consolida el desv¨ªo del que alertan algunos organismos. Ese mismo a?o tambi¨¦n deber¨¢ volver a negociar los tramos y las cuotas del sistema de cotizaci¨®n por ingresos reales de los aut¨®nomos. Y todo ello sin olvidar la vigilancia en la expansi¨®n y el control de los planes de pensiones de empleo simplificados de gesti¨®n p¨²blica; y la implementaci¨®n del ingreso m¨ªnimo vital, que sigue sin impactar sobre todas las familias para las que fue originalmente dise?ado.

Saiz deber¨¢ tambi¨¦n colaborar con la ministra de Trabajo, Yolanda D¨ªaz, en materia de inmigraci¨®n para canalizar aquella que tenga car¨¢cter laboral, teniendo en cuenta el problema de desajuste entre la demanda de empleos por parte de las empresas y la formaci¨®n de los trabajadores.

Industria y Turismo. El ministro Jordi Hereu tiene por delante el reto de impulsar la industria para que represente el 20% del PIB, tal y como ha fijado la Comisi¨®n Europea, desde el 16% de finales de 2022. La semana pasada la gran industria ya marc¨® cu¨¢les deb¨ªan ser las prioridades del nuevo ministro para lograrlo. La primera es reconocer al secretario general de Industria como secretario de Estado, entre otras cosas para que pueda participar en la preparaci¨®n de los consejos de ministros.

Las grandes empresas industriales, asociadas en la plataforma Alianza por la Competitividad, piden tambi¨¦n constituir la Comisi¨®n Delegada del Gobierno para la Pol¨ªtica Industrial y crear una Agencia Estatal que permita la coordinaci¨®n con las comunidades aut¨®nomas. Otros hitos importantes para el ministro tendr¨¢n que ver con lograr un turismo m¨¢s diversificado en cuanto al origen de los viajeros, impulsar la industria automovil¨ªstica con proyectos como la gigafactor¨ªa que Stellantis quiere instalar en Zaragoza o la reindustrializaci¨®n de la antigua Nissan en Barcelona, y gastar los fondos europeos que el ministerio tiene asignados ¡ªentre los que destacan los proyectos estrat¨¦gicos del coche el¨¦ctrico, de industria agroalimentaria y de descarbonizaci¨®n industrial¡ª y desarrollar la ley de Industria: el compromiso del Gobierno para actualizar la legislaci¨®n de 1992 se qued¨® en el tintero en la pasada legislatura, despu¨¦s de que solo se aprobase el anteproyecto en diciembre.

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