Las renovables y la menor demanda hunden el peso del gas y carb¨®n en el ¡®mix¡¯ el¨¦ctrico europeo
El estir¨®n de la producci¨®n f¨®sil por la crisis energ¨¦tica queda atr¨¢s: la e¨®lica y la solar ya generan m¨¢s de la cuarta parte de la electricidad y laminan las emisiones
La crisis energ¨¦tica queda atr¨¢s. Tras el fuerte aumento en el uso de combustibles f¨®siles para generar electricidad en la UE en 2021 y, sobre todo, 2022, la matriz el¨¦ctrica se instala en una nueva normalidad marcada por las menores emisiones de gases de efecto invernadero. El peso del carb¨®n en la matriz el¨¦ctrica europea cay¨® el a?o pasado hasta su nivel m¨¢s bajo desde que hay registros, menor a¨²n que en el 2020 marcado de principio a fin por el coronavirus. El gas, por su parte, se situ¨® en su nivel m¨¢s bajo desde 2016. La suma de ambas ya est¨¢ por debajo del 30%, un nuevo m¨ªnimo hist¨®rico, seg¨²n los datos publicados este mi¨¦rcoles por el think tank ambientalista Ember.
Este achicamiento responde, sobre todo, a dos factores: uno de car¨¢cter estructural (el empuje de la e¨®lica y la solar fotovoltaica) y dos coyunturales (la acusada ca¨ªda de la demanda el¨¦ctrica, sobre todo en el sector industrial, por la crisis de precios; y la vuelta a la vida de la hidroel¨¦ctrica, tras la sequ¨ªa que golpe¨® a varios pa¨ªses del continente).
Los datos son n¨ªtidos. La e¨®lica, con especial arraigo en la mitad septentrional del continente, ya aporta casi el 18% de la electricidad que se consume en Europa. Es el doble que en 2015 y seis veces m¨¢s que hace 15 a?os. La solar, por su parte, ha pasado de representar cifras marginales (por debajo del 1%) en los primeros a?os de la d¨¦cada pasada, a superar el 9%. Y esto es solo el principio: su potencial en el sur y ¡ªmuy particularmente, en la pen¨ªnsula Ib¨¦rica¡ª es sencillamente enorme.
¡°El sector el¨¦ctrico europeo est¨¢ inmerso en un monumental proceso de cambio¡±, apunta la directora de Ember para Europa, Sarah Brown, en una nota publicada a primera hora de la ma?ana de este mi¨¦rcoles. ¡°Los combustibles f¨®siles est¨¢n jugando un papel m¨¢s peque?o que nunca, a medida que el viento y el sol pasan a ser columna vertebral¡±. El a?o pasado, la producci¨®n conjunta de aerogeneradores y paneles fotovoltaicos fue de 475 teravatios hora (TWh), pr¨¢cticamente lo mismo que la demanda francesa y el doble que la espa?ola.
La generaci¨®n f¨®sil total se redujo un 19% el a?o pasado, con el carb¨®n ¡ªpor mucho el combustible m¨¢s contaminante¡ª como factor de arrastre: los 333 TWh generados con lignito fueron un cuarto menos que en 2022 y la cifra m¨¢s baja desde que hay registros. Su actual peso en la matriz el¨¦ctrica ¡ªpoco m¨¢s del 12%¡ª es menos de la mitad que hace una d¨¦cada y casi la tercera parte que en el a?o 2000, cuando Ember empez¨® a recopilar datos.
¡°En 2023, la merma del carb¨®n no ha resultado en un aumento del gas, que ha ca¨ªdo un 15%¡±, ponen en valor los analistas del centro de estudios londinense. Este descenso del gas natural es el mayor ¡°desde, al menos, 1990¡å y consolida cuatro a?os consecutivos a la baja¡±.
A diferencia del gas, el carb¨®n llevaba tiempo perdiendo fuelle en el mix europeo ¡ªentre 2016 y 2020 ya registr¨® tasas negativas todos y cada uno de los a?os¡ª y seguir¨¢ haci¨¦ndolo en los pr¨®ximos tiempos: la previsi¨®n del centro de estudios londinense apunta al cierre del 20% de las centrales de lignito de aqu¨ª a finales de 2025. Un camino de no retorno solo truncado por los dos a?os m¨¢s severa de crisis energ¨¦tica, que obligaron a reactivar plantas para hacer preservar las reservas de gas, y que ahora vuelve a reemprender.
Sigue toda la informaci¨®n de Econom¨ªa y Negocios en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.