Francisco Javier Blasco: ¡°Llevamos a?os sin mejorar la eficacia de las pol¨ªticas activas de empleo¡±

Uno de cada cinco desempleados de la Uni¨®n Europea est¨¢ en Espa?a. Tres de cada 10 si nos referimos a los parados de larga duraci¨®n. Y, sin embargo, hay puestos de trabajo que todav¨ªa quedan sin cubrir o que son de dif¨ªcil cobertura, una problem¨¢tica que no afecta a todos los sectores por igual y que crece a?o a a?o. De hecho, el 19,6 % de ellos se aglutina en el ¨¢rea de Transporte y Almacenamiento, una actividad cuya demanda ha crecido a consecuencia de la pandemia, seguido por las actividades en sedes centrales, industria, comercio y ventas y servicios t¨¦cnicos de arquitectura e ingenier¨ªa, seg¨²n se recoge en el informe Necesidades del mercado de trabajo publicado recientemente por Adecco Group Institute y basado en una encuesta a m¨¢s de 27.000 empresas del mercado laboral espa?ol.

La falta de trabajadores en un contexto donde el desempleo apenas baja de los tres millones de personas puede resultar parad¨®jica, pero es una realidad que afecta a estos y otros sectores como la sanidad y la investigaci¨®n, la agricultura o la hosteler¨ªa, una actividad donde la crisis sanitaria oblig¨® a miles de trabajadores a reubicarse y que ahora prefieren no volver a moverse: se estima, por ejemplo, que faltan hasta 50.000 camareros en todo el pa¨ªs. ?Se trata de un problema salarial? No exclusivamente, afirma Francisco Javier Blasco, director del Adecco Group Institute: ¡°Tenemos que maximizar la ocupaci¨®n y la generaci¨®n de riqueza, potenciar sectores y profesiones de valor, garantizar la formaci¨®n continua en competencias t¨¦cnicas y en habilidades, mejorar nuestras ratios de productividad y conseguir motivar a aquellos que ni estudian ni trabajan¡±, afirma.

Pregunta. De acuerdo con el informe, los perfiles profesionales m¨¢s dif¨ªciles de cubrir se encuentran, principalmente, en las ¨¢reas de Industria, Tecnolog¨ªa y Salud y Gesti¨®n. ?Por qu¨¦ estos sectores?

Respuesta. En estos d¨ªas, la dificultad de cobertura de perfiles es una noticia que est¨¢ en la boca de todos. No debemos olvidar que en algunas ramas como la industria o la tecnolog¨ªa llevamos muchos a?os sufriendo esta falta de profesionales, por la a¨²n escasa presencia de la FP en el alumnado y por la exponencial demanda de perfiles STEM [Ciencias, Tecnolog¨ªa, Ingenier¨ªa y Matem¨¢ticas, por sus siglas en ingl¨¦s]. Por otro lado, el ¨¢mbito de la gesti¨®n engloba a miles de mandos intermedios, directivos y personal de soporte administrativo que, cuantitativamente, aglutinan muchos de los puestos de dif¨ªcil cobertura. Sin olvidar que la postpandemia y el envejecimiento de la poblaci¨®n, entre otros factores, est¨¢n elevando la demanda de profesionales en el sector de la sanidad y la oferta de egresados no siempre es suficiente.

P. Pero la pandemia ha afectado a muchos sectores...

R. Podr¨ªamos decir que son muchas las ¨¢reas donde existe este problema. El crecimiento del e-commerce ha incrementado la demanda de profesionales en el almacenamiento, y las dificultades de formaci¨®n en el transporte a?aden otra complejidad. Asimismo, las ingenier¨ªas figuran ahora entre las profesiones m¨¢s demandadas y con dificultades para cubrir (incluso en mayor grado que las disciplinas STEM), ya que, mientras que para muchos profesionales TIC existen v¨ªas de formaci¨®n complementarias (como los bootcamps), en las ingenier¨ªas no hay alternativas formativas a los grados acad¨¦micos.

P. ?Qu¨¦ razones explican tantas dificultades a la hora de cubrir estas vacantes?

R. Hay causas diversas, pero podemos destacar los desajustes entre la oferta formativa y la demanda de las empresas, la falta de relevo generacional en algunos sectores menos atractivos para los j¨®venes (ya sea por salarios bajos, penosidad u otros motivos), las lagunas en las pol¨ªticas activas de empleo (insuficiente inversi¨®n en formaci¨®n para el empleo, escasa colaboraci¨®n p¨²blico-privada, errores en el diagn¨®stico de profesiones y sectores diana, falta de orientaci¨®n y promoci¨®n de la b¨²squeda activa de empleo...) y las rigideces en la pol¨ªtica migratoria o las tradicionales reticencias a la movilidad geogr¨¢fica interna.

P. ?Se trata de una carencia que va en aumento?

R. Las dificultades de cobertura empiezan a generalizarse tanto en nuestro entorno como en el resto de la Uni¨®n Europea, debido al crecimiento econ¨®mico y a factores demogr¨¢ficos ya mencionados como el envejecimiento de la poblaci¨®n y la falta de relevo generacional. Asimismo, algunos pa¨ªses que antes de la crisis de 2009 eran caladeros para buscar muchos profesionales tienen ya niveles de vida que reducen esta oferta. Si a ello unimos que en nuestro pa¨ªs llevamos a?os sin mejorar la eficacia de las pol¨ªticas activas de empleo y muchas rigideces para la viabilidad de la formaci¨®n dual y la oferta formativa (nueva Ley de Universidades, ca¨ªda de los contratos de formaci¨®n tras la reforma laboral o disponibilidad de los fondos de formaci¨®n para el empleo, entre otros), el horizonte que se nos presenta es preocupante.

P. ?Qu¨¦ soluciones pueden proponerse?

R. Hace falta abrir un di¨¢logo social orientado a la eficacia y los resultados, sin prejuicios, donde est¨¦n involucrados los agentes sociales y todas las administraciones. Esto es un reto para el pa¨ªs. El resultado debe pasar por contar con todos los recursos disponibles y no minusvalorar la colaboraci¨®n p¨²blico-privada. Hay que marcar objetivos concretos y que se mida su consecuci¨®n, porque llevamos d¨¦cadas con estrategias y planes de escasos resultados. La oferta formativa de grado debe actualizarse, flexibilizarse, agilizarse y ampliarse territorialmente, as¨ª como la oferta de FP y formaci¨®n por el empleo en las familias profesionales m¨¢s demandadas (industriales, TIC y sanidad).

Hay que garantizar la disponibilidad de personal docente, fomentar el acercamiento entre empresas y entidades formativas, y eliminar rigideces en los contratos formativos para que la formaci¨®n dual no sea un nuevo fracaso.? Y hay que reforzar, y en algunos casos redefinir, las pol¨ªticas activas en materia de asesoramiento a estudiantes, desempleados y trabajadores que quieran mejorar su carrera profesional hacia aquellos estudios, sectores y ocupaciones donde puedan desarrollar sus vocaciones personales, encontrar empleo de calidad y, gracias a la formaci¨®n continua y la recualificaci¨®n, obtener mejores salarios y vidas laborales m¨¢s sostenibles.

P. Usted ha afirmado que los bajos salarios ¡°no son siempre los culpables de las vacantes¡±. ?Qu¨¦ otros factores intervienen? ?Qu¨¦ buscan hoy los demandantes de empleo?

R. Las motivaciones de las personas hoy han cambiado mucho. El salario emocional (espacios de trabajo, preocupaci¨®n por la salud laboral, flexibilidad y oportunidades de conciliaci¨®n, posibilidades de promoci¨®n y recualificaci¨®n, marca de la empresa...) est¨¢ cobrando protagonismo frente al salario monetario. Pero no podemos negar que hay profesiones con salarios muy vulnerables a escenarios inflacionistas como el actual, y en algunos sectores de salarios m¨¢s bajos las posibilidades de movilidad geogr¨¢fica y sostenibilidad econ¨®mica son escasas. La soluci¨®n en estos casos pasa por, v¨ªa negociaci¨®n colectiva, fomentar el enriquecimiento de los puestos v¨ªa recualificaci¨®n, lo que redundar¨¢ en mejoras de productividad y salarios.

P. ?Qu¨¦ importancia tiene la posibilidad de reubicarse en otros sectores productivos, as¨ª como la capacidad de recualificarse? ?La nueva ley de FP ser¨¢ suficiente para superar este obst¨¢culo?

R. Es una de las claves de la mejora de la empleabilidad y de los deseables incrementos salariales, y as¨ª lo hacen en los pa¨ªses m¨¢s excelentes en pol¨ªticas activas de la Uni¨®n (Dinamarca, Suecia, Noruega y los pa¨ªses de Europa central). Con la nueva reforma laboral, es un ingrediente ideal de los trabajadores fijos discontinuos, garantiz¨¢ndoles la empleabilidad, estabilidad y mejores salarios,?y donde el sector de agencias de empleo tiene un enorme potencial de colaboraci¨®n para reducir las tasas de desempleo.

P. Uno de cada cinco parados de la Uni¨®n Europea est¨¢ en Espa?a. ?Hay alguna diferencia estructural entre nuestro pa¨ªs y el resto de pa¨ªses comunitarios, que explique esta tasa de desempleo comparativamente tan elevada?

R. Si. Nuestro mercado de trabajo es poco din¨¢mico, y las rigideces nos las muestran a?o tras a?o los informes sobre competitividad mundial. Espa?a ocupa la 12? posici¨®n en Producto Interior Bruto, pero desciende a puestos por debajo del 30 con car¨¢cter general, y por debajo del 100 cuando hablamos del marco regulador o de las oportunidades de inversi¨®n y emprendimiento. En otros pa¨ªses, adem¨¢s de tener una normativa laboral menos r¨ªgida que la nuestra, tienen pol¨ªticas m¨¢s orientadas a resultados, dando m¨¢s prioridad a las pol¨ªticas activas (orientaci¨®n y formaci¨®n) que a las pasivas (pago de prestaciones y subsidios por desempleo).

P. ?Cu¨¢les son los mayores desaf¨ªos que deben afrontarse?

R. Son aquellos que tienen que ver con una adecuada gesti¨®n de los flujos migratorios, asegurar la tasa de sustituci¨®n por el envejecimiento de la poblaci¨®n, la formaci¨®n digital para enriquecer todas las ocupaciones y c¨®mo conseguir sensibilizar a personas y familias para poner en valor muchos estudios y profesiones detr¨¢s de los cuales hay carreras profesionales con un enorme potencial y mayores salarios.

P. ?Qu¨¦ papel juegan en este conflicto la flexibilidad y el teletrabajo?

R. La flexibilidad, y una de sus manifestaciones, el teletrabajo, brindan la oportunidad de atraer talento de personas que priman esta variable frente a otros componentes del salario emocional, y, en especial, para atraer talento de otros pa¨ªses que complemente nuestras carencias. No cabe el conflicto entre talento interno y talento externo. Los pa¨ªses m¨¢s competitivos desde el punto tecnol¨®gico son pa¨ªses importadores de talento.

P. ?Es importante la movilidad geogr¨¢fica para mejorar?

R. Es de vital importancia, y no solo desde la ¨®ptica de la redistribuci¨®n de la riqueza entre territorios. Necesitamos sensibilizar a empresas y personas para que faciliten esa movilidad, ofreciendo estabilidad en el empleo y oportunidades de promoci¨®n y formaci¨®n continuas, as¨ª como mejoras salariales y beneficios sociales, si no queremos ¡°morir de ¨¦xito¡±. Espa?a tiene porcentualmente menos falta de profesionales que los pa¨ªses de nuestro entorno. El problema es que uno de cada cinco parados en la Uni¨®n es nuestro y que nuestro PIB a¨²n sigue por debajo del nivel prepandemia, luego no podemos permitirnos el lujo de tener ocupaciones vacantes.

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