Mascotas SA: una industria ¡®milmillonaria¡¯ que no para de crecer
La pandemia ha disparado la compra de animales dom¨¦sticos, generando un potente negocio pero tambi¨¦n problemas de sobrepoblaci¨®n y medioambientales
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Los gatos suelen interesarse por una planta de flores blancas llamada Nepeta cataria, tambi¨¦n conocida como hierba gatera o menta de los gatos. La olisquean, se frotan en sus hojas y la muerden para experimentar un creciente estado de placer. A veces parece que hasta intenten cazar ratones imaginarios. El mercado de productos para mascotas est¨¢ en ese mismo momento de ¨¦xtasis, con la diferencia de que no vive ninguna alucinaci¨®n. En Europa occidental, el gasto en comida y accesorios ascender¨¢ este a?o a 36.500 millones de euros, seg¨²n c¨¢lculos de Euromonitor Internacional, un proveedor de investigaciones de mercado. En sus estudios, el crecimiento acumulado en el ¨²ltimo trienio del negocio de los amigos peludos alcanza el 13%. Ven¨ªa avanzando con fuerza antes de la pandemia, pero tras los confinamientos se ha abierto un nuevo ciclo que ha sumado millones de cachorros a una poblaci¨®n ya considerable.
Fediaf, la voz de la industria de alimentaci¨®n animal en Europa, calcula (con datos de 2021) que hay 90 millones de hogares con una o m¨¢s mascotas. Son cinco millones m¨¢s que en 2019 y dan como resultado la existencia, en hogares o fuera de ellos, de 113 millones de gatos, 92 millones de perros, 48 millones de p¨¢jaros y otros 56 millones de animales entre conejos, peces y tortugas. La Sociedad Estadounidense para la Prevenci¨®n de la Crueldad hacia los Animales public¨® en mayo del a?o pasado los datos de una encuesta que reflejaba que una de cada cinco familias hab¨ªa adoptado un gato o un perro desde el comienzo de la pandemia, aproximadamente 23 millones de estadounidenses. Las estimaciones para Espa?a realizadas por Anfaac, la asociaci¨®n de fabricantes de piensos y Veterindustria, hablan de un censo (tambi¨¦n en 2021) de 29 millones de mascotas entre perros (9,3 millones), gatos (5,8) y dem¨¢s adorables amigos. Son 2,6 millones m¨¢s de perros y 2,1 millones de gatos m¨¢s que en 2019.
Las empresas nutren tal despegue con miles de ofertas, desde un inabarcable cat¨¢logo de alimentos secos y h¨²medos a gamas cada vez m¨¢s extensas de camas, arneses, transportines, juguetes, comederos, rascadores o ropa. En Espa?a hay unas 5.000 tiendas de barrio; se venden art¨ªculos en la mayor¨ªa de los 6.516 centros veterinarios existentes y los grandes almacenes siempre tienen su secci¨®n especializada, igual que las tiendas asi¨¢ticas. Las grandes cadenas tipo supermercados son cada vez m¨¢s populares (Tiendanimal y Kiwoko, del mismo grupo empresarial, o Petuluku) y se suman a las ramas desarrolladas por grupos de jardiner¨ªa (Verdecora, Jardiland) y a la creciente oferta online (Riovet, Zooplus, Animalcity, Miscota y muchas otras). Hasta Ikea tiene una gama de muebles desarrollada por dise?adores y veterinarios (Lurvig).
El mundo de los servicios no se queda atr¨¢s. Olga de Diego, presidenta de la Federaci¨®n de Peluqueros Caninos (Fepecae) cifra en miles los negocios activos, ¡°aunque realmente hay muchos ocultos por el gran intrusismo, con gente que se pone a peinar a cuatro perros del barrio en su casa¡±. Adem¨¢s, hay un nutrido grupo de empresas emergentes con servicios hasta hace poco inimaginables, desde lugares para el autolavado de los canes a aplicaciones que supuestamente ¡°traducen¡± al lenguaje humano los maullidos de los gatos. Eso, sin contar con la enorme dimensi¨®n del negocio veterinario y la cada vez m¨¢s importante rama de la formaci¨®n y las residencias caninas.

Vacunas y chocolates
El mayor productor mundial de medicamentos y vacunas para mascotas y ganado, Zoetis, tiene una capitalizaci¨®n cercana a los 70.000 millones de d¨®lares y sus acciones cotizan a 148 d¨®lares: se han revalorizado un 76% desde enero de 2019. Mars, el grupo familiar estadounidense de las famosas chocolatinas y la comida animal (Pedigree, Whiskas, Royal Canin) desvel¨® este verano que con todas sus marcas factura m¨¢s que Coca-Cola (45.000 millones de d¨®lares). Nestl¨¦, due?o de Purina, es otro de los gigantes del petcare: public¨® unas ventas el a?o pasado de 15.600 millones solo en la rama de mascotas. Aunque no todas las compa?¨ªas cumplen las expectativas. La norteamericana Chewy, dedicada al comercio electr¨®nico de alimentos y otros productos, sali¨® a cotizar en el verano de 2019 a 39 d¨®lares por t¨ªtulo y ahora est¨¢ pr¨¢cticamente donde comenz¨®, pese a haber alcanzado picos de casi 120 d¨®lares en 2021.
En Asia-Pac¨ªfico, la poblaci¨®n de gatos (y los v¨ªdeos) ha aumentado mucho y se espera que contin¨²e as¨ª, igual que la mayor tendencia de las personas a cuidar colonias de gatos callejeros. Muchos pa¨ªses est¨¢n abandonando la costumbre de alimentar a los mam¨ªferos con sobras del almuerzo y se pasan a las croquetas de pienso seco. La empresa Xuzhou Suchong Pet Products, por ejemplo, se est¨¢ volviendo popular en el rango de precios m¨¢s asequibles y las compras online de pienso y otros productos en muchas ciudades chinas. En Taiw¨¢n, donde tener mascota se ha convertido en un signo de riqueza, la empresa Just Kitchen cre¨® un servicio de entrega a domicilio de comida para animales reci¨¦n hecha en una cocina fantasma.
Humanizaci¨®n
El universo del mercado gira en torno a dos palabras que repite la quincena de profesionales consultados para este reportaje: el citado fen¨®meno de la pandemia y ¡°la humanizaci¨®n¡±. De lo primero se ha escrito abundantemente: el aislamiento social y el trabajo desde el hogar llevaron a muchas personas a optar por un animal de compa?¨ªa. M¨¢s tiempo en casa permiti¨® un v¨ªnculo intenso entre humanos y mascotas, reforzando el segundo de los fen¨®menos: la transmisi¨®n de valores y necesidades de los due?os a las mascotas.
Adolfo Santa-Olalla, presidente de la Asociaci¨®n Espa?ola de la Industria de animales de compa?¨ªa (Aedpac), observa que las tendencias sociales est¨¢n llevando a que gente joven, sin un salario adecuado para tener hijos, est¨¦n optando por un perro o un gato: ¡°Eso es una realidad¡±, afirma. En 2021 se cruz¨® una barrera: ya hay m¨¢s hogares con perros registrados que familias con ni?os menores de 14 a?os. Santa-Olalla a?ade que, con la mayor longevidad, muchos viudos o viudas tienden a adoptar mascotas para sentirse acompa?ados.
Los datos parecen confirmarlo. En su libro Just Like Family: How Companion Animals Joined the Household (Tal y como la familia: c¨®mo los animales de compa?¨ªa se unieron al hogar) (New York University Press: 2021), la soci¨®loga Andrea Laurent-Simpson asegura que la estructura familiar estadounidense est¨¢ cambiando para incluir especies no humanas. La Asociaci¨®n M¨¦dica Veterinaria de ese pa¨ªs calcula que el 85% de los due?os de perros y el 76% de los due?os de gatos piensan en sus mascotas como familia.
Y esto tiene enormes implicaciones econ¨®micas, ya que los mam¨ªferos se han hecho un hueco importante en los presupuestos familiares. Esto, seg¨²n los expertos, ha convertido una parte de la demanda en inel¨¢stica a los cambios en los precios, porque los due?os prefieren privarse de otros art¨ªculos antes que hurtar a sus peque?os amigos de tal o cual tratamiento veterinario o diet¨¦tico, lo que a su vez lleva a unas vidas m¨¢s largas (y caras) de los animales. De hecho, a medida que envejecen y su metabolismo se ralentiza, las empresas crean m¨¢s y m¨¢s alimentos que incorporan suplementos nutricionales con vitaminas, manganeso o ¨¢cido hialur¨®nico.
Paco Minguela, que vive en Nigr¨¢n (Pontevedra) adora a Margarita (10 a?os), Bruno (4 a?os) y Hugo (2 a?os), sus setter irlandeses rojos. No le import¨® pagar dos operaciones cuando a Bruno, con ocho meses, le dio por comer piedras. ¡°Creo que desde entonces tiene alg¨²n problema con las digestiones, adem¨¢s de su intolerancia al gluten, que descubrimos cuando se comi¨® el borde de una pizza y se puso fatal. Por eso optamos por la dieta Barf (con ingredientes de origen animal sin cocinar)¡±. Todo ello se traduce en montones de gastos: ¡°Cerca de 100 euros por perro al mes en el ¨²ltimo a?o entre veterinarios, dietas, vacunas, desparasitaci¨®n¡¡±, calcula. Pero est¨¢ dispuesto a emplear ese dinero (adem¨¢s de mucho tiempo en paseos y cepillados) porque, asegura, los perros siempre han sido parte de su vida.
Como ¨¦l, muchas otras familias hacen n¨²meros cada mes. Los datos de Nielsen para el mercado espa?ol en este primer semestre del a?o apoyan el hecho de que el gasto en comida en Espa?a ha crecido un 16%, por encima de la inflaci¨®n. Es una tendencia global: a medida en que los due?os se obsesionan por comprar alimentos de calidad, se acent¨²a la polarizaci¨®n de precios: el mercado se llena de productos premium que prometen mejores digestiones o mejores cuidados, pero que son considerablemente m¨¢s caros, sobre todo para los gatos y los perros peque?os, que necesitan menos cantidades.
Jaime D¨ªaz, veterinario y responsable de marketing en Unavets, una cadena de 83 cl¨ªnicas en Espa?a y Portugal, constata el desarrollo de los cuidados que en otros lugares, como el Reino Unido, Alemania o Suecia, lleva a?os consolidado. Y eso, dice, ha despertado el inter¨¦s del gran capital. ¡°En Espa?a se ha dado el fen¨®meno de la concentraci¨®n. Han entrado varios grupos inversores, sobre todo extranjeros, y han adquirido cl¨ªnicas y hospitales¡±. Con los laboratorios farmac¨¦uticos ha pasado lo mismo, con nuevos actores con m¨¢s poder: Bayer, por ejemplo, vendi¨® en 2019 su negocio de salud animal a Elanco (antes de la farmac¨¦utica Lilly) que ya est¨¢ entre las mayores empresas de Europa en salud animal. Los distribuidores de medicamentos tambi¨¦n est¨¢n en proceso de fusi¨®n y crecimiento. La multinacional americana Covertrus, por ejemplo, adquiri¨® en 2020 la mayor¨ªa de Distrivet, la mayor distribuidora del ramo en la pen¨ªnsula.
El c¨¢lculo es sencillo: si las camadas crecen, los gastos de los propietarios aumentan durante los 10 o 15 a?os siguientes en que viven esos animales. Por eso se han invertido las tendencias. ¡°Antes, los veterinarios espa?oles se iban a trabajar a mataderos fuera del pa¨ªs o hac¨ªan oposiciones. Se cobraba muy poco. Hace a?os se aprob¨® el convenio colectivo de cl¨ªnicas con unos salarios m¨ªnimos y ahora a veces es dif¨ªcil encontrar profesionales en el mercado¡±, se?ala D¨ªaz, aunque reconoce que los sueldos todav¨ªa no est¨¢n al nivel de sus pares europeos. En su empresa ya cuentan con varios hospitales y acaban de construir uno nuevo en Madrid de 1.700 metros cuadrados que dar¨¢ servicio de urgencias en las 24 horas con equipos de diagn¨®stico de ¨²ltima generaci¨®n.
Jos¨¦ Miguel Doval, presidente de la Real Sociedad Canina, describe que ¡°la conciencia sobre lo que supone tener un perro ha aumentado¡±, y apunta que durante la pandemia se observ¨® un fen¨®meno generalizado de crecimiento de demanda y precios de los animales de raza parecido al bum que se vivi¨® en los a?os noventa. ¡°Ahora estamos en unos 70.000 nacimientos al a?o de perros de raza con pedigr¨ª. Son menos del 10% de todos los que nacen, porque debemos andar en Espa?a por el mill¨®n de cachorros anuales en total¡±. A finales del siglo pasado se llegaron a registrar hasta 100.000 perros de raza al a?o, pero muchos se exportaban.
Los precios han ido en consonancia a la demanda: 1.000 euros de media cuesta un can de raza hoy en d¨ªa, aunque var¨ªa considerablemente dependiendo de factores como el n¨²mero de cachorros por camada o las dificultades de la cr¨ªa.
Pepe Bola?o, criador de golden retrievers de Madrid, sol¨ªa recibir dos o tres llamadas a la semana de personas interesadas por cachorros: ¡°Pasamos a cinco o seis al d¨ªa, y as¨ª durante todo el 2020¡å. No hay leyes que digan cu¨¢ntas camadas puede tener una perra, de modo que las normas sobre la explotaci¨®n de las hembras, ahora mismo, las ponen los criadores. ¡°Quiz¨¢ lo nuestro sea un caso extremo, porque criamos poco, seleccionamos y formamos a las familias durante el primer a?o y tenemos un club de acompa?amiento. Pero puedo decir que el 80% de la cr¨ªa que conozco es familiar, tiene a los perros en buenas condiciones. El mercado tiende a eso. El cliente se acerca a ti y ahora no pregunta primero por el precio, sino por las condiciones en las que est¨¢n los animales¡±. Bola?o reconoce que hay un submundo de explotaci¨®n y maltrato, de perros que se venden con cartillas falsas, que se cr¨ªan en naves de forma intensiva sin ver la luz del d¨ªa. Y de clientes que prefieren comprar un cachorro, por unos pocos cientos de euros, a una persona cualquiera que se lo entrega en un cruce de carretera y a quien no volver¨¢n a ver m¨¢s. Por eso cree que la ley de protecci¨®n, derechos y bienestar de los animales en tramitaci¨®n ¡°sin ser perfecta, es necesaria¡± combinada con una mayor concienciaci¨®n sobre la tenencia y cuidados.
Las leyes son, precisamente, impulsoras del mercado de mascotas por esa humanizaci¨®n de la que hablan las empresas de marketing. Espa?a, muy atrasada hasta ahora, se va a poner al d¨ªa este a?o con los cambios ya aprobados en enero para que los animales sean considerados seres sintientes y con la norma en tramitaci¨®n, que incluye medidas como la prohibici¨®n de sacrificar sin causa justificada. Quiz¨¢ tambi¨¦n sea un freno a la sangr¨ªa de abandonos y al hecho de que seis de cada 10 perros y gatos dom¨¦sticos no est¨¦n identificados.
Lola Gonz¨¢lez, directora de la feria Iberzoo+Propet que se celebra cada a?o en Madrid, recuerda que tras el abandono estaban, hasta ahora, las motivaciones econ¨®micas como el problema n¨²mero uno. Durante 2021, seg¨²n la Fundaci¨®n Affinity, las 1.591 protectoras espa?olas recogieron 285.000 perros y gatos, casi los mismos que un a?o antes y un 7% menos que en 2019. Un dato muy llamativo es que los problemas econ¨®micos argumentados para desprenderse del animal han ca¨ªdo por primera vez hasta la sexta posici¨®n, por debajo de las camadas no deseadas, el fin de la temporada de caza y los problemas de comportamiento animal. Algo que vendr¨ªa a demostrar que, si bien es cierto que las circunstancias de las familias pueden empeorar hasta verse imposibilitadas a atender a sus animales, tambi¨¦n lo es que demasiadas personas traen a casa un animal sin pensar en las consecuencias.
La duda de los precios
Queda por ver si esa resiliencia que ha demostrado el sector contin¨²a ahora que los precios est¨¢n disparados. Tristan H?ver y Javier Mu?oz, analistas de Euromonitor, explican por videoconferencia desde D¨¹sseldorf que en Alemania, un mercado muy maduro, incluso en los momentos de crisis, los propietarios se resisten a comprar productos m¨¢s asequibles para sus mascotas. Y prefieren privarse de otros bienes de consumo, de modo que los periodos de ralentizaci¨®n del PIB no coincid¨ªan hasta ahora con los de retracci¨®n del gasto en animales dom¨¦sticos.
Pero sabemos que estos tiempos no son comparables a nada de lo que haya pasado antes. En el mercado del alquiler nacional, apenas un 10% de las viviendas disponibles en los portales inmobiliarios admite mascotas, y normalmente se trata de arrendamientos m¨¢s caros. El alza del precio de la luz tambi¨¦n podr¨ªa limitar la afici¨®n a los acuarios o los reptiles, cuyo mantenimiento se ayuda de l¨¢mparas o depuradoras de agua. Un n¨²mero creciente de comunidades aut¨®nomas exigen ya un seguro de responsabilidad civil, y en algunas ciudades la convivencia entre due?os de animales y los que no los tienen se tensa. Para el presidente de la sociedad canina, una mayor presi¨®n fiscal deber¨ªa conllevar m¨¢s derechos para los propietarios. ¡°Es necesario integrar a los animales en la sociedad y no al rev¨¦s, metiendo en guetos a las personas que los tienen¡±. Sea como fuere, la explosi¨®n de los animales de compa?¨ªa puede estar lejos de terminar, aunque haya correcciones en el consumo. La industria podr¨ªa seguir saboreando ese estado de ¨¦xtasis.
Supermercados llenos de marcas
Hace más de 20 años, los etólogos Raymond y Lorna Coppinger, en su libro Perros (KNS Ediciones) hicieron un análisis sobre el peso de los canes norteamericanos. Calculando distintos niveles de actividad, tamaños y etapas de los 52 millones de perros que había en aquel momento concluyeron que comían el equivalente a alimentar a 26 millones de personas. “Le doy la vuelta al paquete de pienso de mi perro de 10 kilos y encuentro que recomiendan que lo alimente con 100 kilos de comida al año. A un dólar el kilo, el coste ascendería a 1 billón en todo el país. No me extraña que el negocio de la comida para perros sea una gran idea”, ironizaba Raymond.
Seguramente piensan lo mismo los grandes fabricantes actuales y, últimamente, los fondos de capital riesgo.
En España, según Cesfag, hay 775 fábricas de piensos animales (incluidos los alimentos para ganado). Agrolimen, el holding catalán propiedad de la familia Carulla, dueños de GB Foods (antes Gallina Blanca), figura en varias clasificaciones a la cabeza entre los productores del continente. Entre sus marcas están Affinity, Brekkies, Ultima, Advance o Libra, y también controla empresas de alimentos en el Reino Unido (Natures Menu) y Nature’s Variety en Estados Unidos, una marca presente en los lineales españoles.
Como mayores productores, según los datos del Registro Mercantil, le siguen en territorio nacional el grupo Mars (que además de sus enseñas más famosas tiene César, Sheba, Catisfactions, Crave o Nutro), Nestlé (que junto a Purina cuenta con la popular Friskies o Cat Chow) y United Petfood, que produce desde El Burgo de Ebro bajo las marcas Compy (para Mercadona), Solimo y Lifelong (para Amazon).
Otra multinacional importante es Elmubas con sede en Guipúzcoa y, hasta 2019, propiedad de la familia Bastida. El fondo de capital riesgo Portobello se hizo ese año dueño del grupo, que opera con marcas como MDD, Willowy, Dream, Trophy, Jakan o Le Chef.

La gran contradicci¨®n verde
La conciencia ambiental choca con el auge de las compras que no mejoran la vida de los animales
La Universidad de Edimburgo calcula que alrededor de 49 millones de hect¨¢reas de tierra agr¨ªcola, aproximadamente el doble del tama?o del Reino Unido, se utilizan anualmente para hacer comida seca para gatos y perros, lo que representa el 95% de las ventas de alimentos para mascotas. Los consumidores empiezan a tener sentimientos encontrados frente a los residuos. Mientras que las etiquetas ¡°libres de¡± ganan popularidad, tambi¨¦n lo hacen las compras compulsivas de productos que no tienen un impacto real en la vida de los animales, pero s¨ª (y mucho) en el medio ambiente. De hecho, a medida que los fabricantes compiten entre ellos con una creciente variedad de productos, tambi¨¦n lo hacen ofreciendo dise?os de sus envases cada vez m¨¢s extravagantes para conseguir captar la atenci¨®n de quien pasa por el lineal.
Comida vegana
Algunas tendencias generan intensos debates, como la comida vegetariana para perros, a menudo criticada por los veterinarios. Y el mercado responde una y otra vez con miles de propuestas para no perderse a esos nuevos consumidores.
Purina acaba de lanzar una convocatoria de Unleashed, un programa de innovaci¨®n que recibe candidaturas de todo el mundo en el que busca productos o servicios que usen nutrici¨®n sostenible. Entre los emprendedores respaldados hasta la fecha hay dos empresas espa?olas: Moa Foodtech y Kibus. La primera combina la biotecnolog¨ªa y la inteligencia artificial para transformar subproductos de la industria agroalimentaria. ¡°El 70% de los gases de efecto invernadero que genera la alimentaci¨®n procede de los ingredientes¡±, cuenta Bosco Emparanza, su fundador. ¡°La industria de las mascotas tiene much¨ªsima prote¨ªna animal. Lo que hacemos en Moa es coger residuos y subproductos de la industria agraria y revalorizarlos a trav¨¦s de la fermentaci¨®n¡±. Angulas Aguinaga, Viscofan, Incarlopsa o Central Lechera Asturiana trabajan con ellos en alimentaci¨®n humana. Pero su producto, todav¨ªa en pruebas, no es equiparable a la prote¨ªna vegetal, aunque provenga de la agricultura: ¡°Tiene amino¨¢cidos y ¨¢cidos omega 3, 6 y 9. Es digerible por los animales¡±.
Es solo un ejemplo de lo que puede estar por llegar. En medio del creciente flexitarianismo de los due?os, en Latinoam¨¦rica y Asia se lanzan piensos y golosinas a base de insectos. E incluso hay empresas que utilizan el c¨¢?amo en sus preparaciones siguiendo la moda de la legalizaci¨®n en varios pa¨ªses.
Est¨¢ por ver si esa manida sostenibilidad provoca un cambio real. Hay miles de ejemplos sobre lo contradictorio de las tendencias. Las golosinas son, con mucho, los productos que m¨¢s crecen en ventas, lo que provoca la multiplicaci¨®n de los envases. Las heces tambi¨¦n comienzan a ser un problema. La empresa de estudios de mercado Fact.MR cifra en 1,12 millones las toneladas de bolsas de perro que se desechan anualmente en el mundo, que generan el 0,6% de los residuos, pero al mismo tiempo se espera que el mercado aumente a?o tras a?o hasta, por lo menos, 2032. La arena de los gatos suele ser de arcilla o aglomerante, mezclada con bentonita, o de perlas de s¨ªlice. Todas ellas tienen mayor o menor huella ambiental sin que por ahora hayan sido sustituidas por productos con menos impacto. Y luego est¨¢ la eutrofizaci¨®n (enriquecimiento excesivo del agua con nutrientes) que generan la orina y las heces de los animales de compa?¨ªa.
La venta de empapadores para que los animales orinen en casa tambi¨¦n ha crecido, y ya est¨¢n disponibles en el gran comercio. Quiz¨¢ esos due?os que tanto se preocupan por las compras deber¨ªan pensar m¨¢s en sacar a pasear a sus queridos compa?eros.
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