¡°Que a los nazis no les gustaran nuestras escuelas es buena publicidad¡±
El maestro de la pedagog¨ªa Waldorf Klaus Esser, que ense?a en un colegio barcelon¨¦s, considera que las pantallas pueden restar m¨¢s que aportar a las capacidades de los ni?os
Klaus Esser (Hamburgo, 48 a?os) es profesor y miembro del equipo directivo de la escuela El Til.ler, el tilo, en Bellaterrra (Barcelona), uno de los m¨¢s de dos mil colegios en todo el mundo (varios en Espa?a) en los que se ense?a con el m¨¦todo Waldorf, un sistema pedag¨®gico que concede un amplio grado de libertad al alumno para que aprenda a pensar y a vivir, como sostiene el lema de la escuela. El m¨¦todo Waldorf ha sido contestado, incluso puesto bajo sospecha, pero la realidad es que se ense?a sin problema en nuestro pa¨ªs y en el extranjero, los padres est¨¢n contentos y descontentos en la misma medida que en centros convencionales, y sus alumnos se incorporan como todos a la educaci¨®n superior. Esser, que estudi¨® en una escuela Waldorf (su madre era maestra en una), se convirti¨® en profesor de m¨²sica, aprendi¨® teatro (que forma parte del curr¨ªculo Waldorf), viaj¨® a Sudam¨¦rica y realiz¨® iniciativas educativas con j¨®venes dif¨ªciles. Lleg¨® a Barcelona en 2000 y en 2005 se incorpor¨® al proyecto del centro de Bellaterra. Parece un hombre cabal, es amable y no se molesta porque le hagan preguntas inc¨®modas. Se muestra apasionado al hablar de su oficio.
Pregunta: ?Qu¨¦ es el m¨¦todo Waldorf?
Respuesta. Una metodolog¨ªa que aspira a que cada ni?o descubra y cultive su propio talento. Y a la vez que aprenda a trabajar en equipo. C¨®mo ser individuo dentro de un grupo. Dando valor al arte, que para crear criterio es un gran aliado, pero tambi¨¦n a las ciencias.
P. Lo de Waldorf suena a hotel y a cine.
R. Viene de la empresa Waldorf Astoria, una f¨¢brica de cigarrillos de Stuttgart cuyo propietario, Emil Molt, quiso crear una escuela para los hijos de los empleados. Para ello requiri¨® la ayuda del fil¨®sofo Rudolf Steiner. Hoy hay escuelas Waldorf en 60 pa¨ªses.
P. Steiner fue tambi¨¦n el fundador de la antroposof¨ªa, una corriente de pensamiento que se ha tachado de pseudocient¨ªfica y asociado con creencias esot¨¦ricas. Da un poco de yuyu.
R. Lo que nos interesa hoy de Steiner en lo pedag¨®gico es su idea de la educaci¨®n libre, libre con una estructura, evidentemente; una idea que era revolucionaria en su tiempo. Y su concepto de que la tarea m¨¢s importante del maestro es desarrollar el entusiasmo y la ilusi¨®n por aprender. No hay nada raro ni siniestro, por supuesto, en nuestra escuela. Las escuelas Waldorf son independientes, no hay un organismo central, ni una ortodoxia. La nuestra es una cooperativa mixta de maestros y padres. En la actualidad, el m¨¦todo Waldorf tiene como espec¨ªfico favorecer la creatividad transversalmente en todas las materias.
P. Parece que con los nazis no les fue bien.
R. Prohibieron las escuelas, y algunos maestros fueron a parar a campos de concentraci¨®n. Les parec¨ªan peligrosas porque daban demasiada autonom¨ªa a los alumnos e incentivaban el pensar propio. Lo contrario que el r¨¦gimen hitleriano. En Alemania solo empezaron a revivir despu¨¦s de la guerra. Que a los nazis no les gustaran es buena propaganda.
P. ?Tienen problemas de integraci¨®n los alumnos Waldorf al acabar la escuela?
R. No; es cierto que en el ¨²ltimo ciclo antes de la selectividad aceleramos, pero pasan en la misma proporci¨®n que los dem¨¢s. Lo que s¨ª que nos dicen en la universidad es que son alumnos muy motivados, con mucho criterio.
P. Les acusan de elitistas, de ser escuelas para gente bien.
R. Lamentablemente, algo de desarrollo en esa direcci¨®n ha habido, sobre todo para venir de ser una escuela para hijos de obreros; en Espa?a somos privados al 100%, mientras que en otros pa¨ªses las escuelas est¨¢n subvencionadas p¨²blicamente. Pero intentamos que nadie que quiera estudiar con nosotros no pueda hacerlo, hay f¨®rmulas. De hecho, cuando empezamos ¨¦ramos la escuela privada menos elitista de Catalu?a, cost¨¢bamos mucho menos que las dem¨¢s.
P. ?Qu¨¦ le parece que se vuelva a valorar el aprender de memoria? Suena a regresar a las listas de los reyes godos o los afluentes del Duero por la derecha.
R. La dificultad es lograr un equilibrio, no ir a los extremos, la libertad no es que todo valga.
P. ?Qu¨¦ piensa del uso de la tecnolog¨ªa en los colegios?
R. En nuestra escuela no se puede usar m¨®vil. Y cada cosa tiene que estar adecuada a la edad. Un contacto temprano con las pantallas puede restar m¨¢s que aportar a las capacidades de los ni?os. La tecnolog¨ªa es fant¨¢stica, y la usamos, es una herramienta potente de trabajo en los adolescentes, pero hay que introducirla paulatinamente para que no disminuya la concentraci¨®n y el rendimiento, y no sufran la creatividad y la fantas¨ªa.
P. El ¨¦nfasis en la naturaleza recuerda a Thoreau.
R. No hay relaci¨®n directa, pero nos aprovechamos como ¨¦l del contacto con el medio natural. La naturaleza est¨¢ llena de sabidur¨ªa.
P. ?Hay que hablarles de todo a los ni?os, en cuestiones de sexo, por ejemplo?
R. No se les debe obligar a reflexionar sobre cosas en las que no tienen criterio. Se ha de acompa?ar las dudas que nacen de ellos.
P. A nivel personal, ?qu¨¦ le gusta de su trabajo?
R. ?Es alucinante! Ver c¨®mo crece ante tus ojos la capacidad, el talento, y c¨®mo los adolescentes tienen la valent¨ªa de hacer lo que se proponen. Resulta algo ¨²nico.
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