La universidad espa?ola m¨¢s antigua y conocida en el exterior se asoma al descr¨¦dito por las malas pr¨¢cticas de su nuevo rector
Un consultor internacional alerta de que una crisis reputacional en la USAL, que representa el 4,8% del PIB de Salamanca, podr¨ªa arrastrar al conjunto de campus espa?oles
¡°Igual que los pioneros de Bolonia, Montpellier, Oxford o Salamanca creyeron en el poder del aprendizaje, el esp¨ªritu cr¨ªtico y la cultura, quiero que estemos a la altura de este gran prop¨®sito¡±. La frase la pronunci¨® en 2017 Emmanuel Macron, el impulsor en esa cumbre de Gotemburgo de la potente red de universidades europeas que est¨¢ tejiendo Bruselas. Y no es casual que el presidente franc¨¦s incluyese a la Universidad de Salamanca (USAL). Se constituy¨® como universidad en 1252 ¨Des la m¨¢s antigua de Espa?a¨D y estudiar all¨ª es el sue?o de muchos j¨®venes europeos. Por eso los erasmus no dejaron de ir en pandemia. Y por eso se asoma m¨¢s al descr¨¦dito internacional que otros campus poco conocidos, tras el nombramiento este martes como rector del catedr¨¢tico Juan Manuel Corchado, experto en inteligencia artificial, quien, como desvel¨® EL PA?S, ha hinchado artificialmente su curr¨ªculum hasta colocarse por encima de los l¨ªderes mundiales en Google Acad¨¦mico, pese a no participar en los congresos internacionales m¨¢s prestigiosos.
Sebastian Stride, uno de los fundadores de Siris Academic ¨Duna consultora sin ¨¢nimo de lucro que ha asesorado en 13 a?os a m¨¢s de 250 instituciones de 25 pa¨ªses¨D, no tiene duda de que la elecci¨®n de Corchado va a suponer una crisis reputacional para el conjunto de las universidades espa?olas, ¡°no a largo plazo pero s¨ª en los pr¨®ximos dos o tres a?os¡±. Estos d¨ªas a Stride, que est¨¢ en Francia por trabajo aunque reside en Barcelona, los presidentes de las universidades galas le est¨¢n preguntando por la USAL. ?l prefiere no opinar porque no tiene ¡°elementos¡± de juicio, no conoce al nuevo rector, aunque s¨ª los hechos. Pero lo que no entiende es c¨®mo Corchado se ha presentado al cargo, en vez de apartarse para demostrar que no ha cometido malas pr¨¢cticas. El consultor cree que una situaci¨®n as¨ª es ¡°inimaginable¡± en Francia o Alemania, pues arrastra la imagen del pa¨ªs.
Mantener el prestigio internacional es clave, no solo porque la UE sustenta gran parte de la inversi¨®n en investigaci¨®n, sino porque se est¨¢n trenzando alianzas de universidades ¨Dlas que impuls¨® Macron¨D que comparten proyectos cient¨ªficos, titulaciones y van a fomentar la movilidad de estudiantes, docentes y personal de administraci¨®n. Y en la segunda convocatoria comunitaria, la USAL logr¨® entrar en una, EC2U, junto a otras ocho universidades ¨Dentre ellas las de Linz, Coimbra, Poitiers y Pav¨ªa¨D que reciben cada a?o fondos de Bruselas. ¡°Me resulta alucinante que se elija a alguien con esta losa. Antes el rector era el primus inter pares y buscaba el equilibrio entre facultades¡±, recuerda Stride. ¡°Pero ahora su rol es muy distinto. Las relaciones internacionales ya no son puntuales sino estrat¨¦gicas. Los rectores trabajan para una estrategia com¨²n, elaboran conjuntamente c¨®digos de ¨¦tica y deontol¨®gicos... y tienen que seguir las reglas m¨ªnimas de la ¨¦tica¡±. Corchado ha dado instrucciones a sus trabajadores para que citen sus estudios y se ha beneficiado de multitud de perfiles fraudulentos de investigadores inventados, dedicados a mencionar insistentemente sus art¨ªculos.
M¨¢s all¨¢ de la reputaci¨®n internacional, la USAL es un aut¨¦ntico puntal econ¨®mico, social y cultural en la ciudad: Salamanca tiene 143.954 censados, 26.000 universitarios y 4.400 profesores y personal de administraci¨®n del campus. Por eso, el vodevil en tres actos que est¨¢ viviendo la USAL no es la mejor de las cartas de presentaci¨®n en el exterior. El rector Ricardo Rivero dimiti¨® ¡°por causas personales¡± cuando le quedaban dos a?os de mandato; su sucesora en funciones, Mar¨ªa Jos¨¦ Rodr¨ªguez Conde, se fue a la semana con id¨¦ntico motivo y al fin ahora Corchado es rector. No tuvo oponente, pues los plazos eran tan cortos, que no tuvieron tiempo de armar una candidatura con posibilidades de ganar.
En septiembre de 2020, cuando las aulas volvieron a abrirse con medidas anticovid, el alcalde de Salamanca (PP) y los rectores de la USAL y la Pontificia de Salamanca se conjuraron para frenar el virus y no tener que cerrarlas de nuevo. Eran conscientes de que hab¨ªa mucho en juego. Un estudio ya desfasado de 2016 ¨Del alumnado ha crecido desde entonces¨D, La parte y el todo. El impacto econ¨®mico de la Universidad de Salamanca, elaborado por seis de sus profesores, mostraba unas cifras apabullantes: el peso estimado de la instituci¨®n era de 920 millones de euros. Eso supon¨ªa el 7% del PIB provincial y situaba a la USAL entre las 20 mayores entidades de Castilla y Le¨®n. Los datos disgregados permit¨ªan conocer el consumo de los alumnos (159 millones), el de sus familiares (19 millones) o gastos propios en servicios (43,2 millones). En 2020 la Asociaci¨®n de Hosteler¨ªa de Salamanca valor¨® estas cifras para este diario como ¡°cortas¡±.
Un an¨¢lisis m¨¢s reciente, Impacto econ¨®mico del sistema de universidades p¨²blicas espa?olas, hecho p¨²blico por el desaparecido Ministerio de Universidades en 2021, hace otros c¨¢lculos menos favorables a la USAL, pero tambi¨¦n menos pormenorizados. Tras la Universidad de Granada, es el centro acad¨¦mico espa?ol que m¨¢s aporta al PIB regional (4,8%) y la segunda en cuanto al porcentaje de poblaci¨®n ocupada gracias a la instituci¨®n acad¨¦mica, con un 5,8% del total, el equivalente a 6.840 puestos. Por eso los nexos con el Ayuntamiento de Salamanca son estrech¨ªsimos y, como patrocinador de Corchado, este puede verse salpicado por el deshonor. El Consistorio cedi¨® en 2023 durante 10 a?os un espacio de 820 metros cuadrados para que se instalase la Fundaci¨®n Instituto Internacional de Investigaci¨®n en Inteligencia Artificial y Ciencias de la Computaci¨®n (AIR Institute), del hoy rector.
A diferencia de las vecinas universidades de Valladolid y Le¨®n, que han perdido 2.000 alumnos de grado desde 2015, la USAL se mantiene estable. Es m¨¢s, ha duplicado sus alumnos de doctorando, pues leer la tesis en Salamanca no es cualquier cosa. Es un polo de atracci¨®n de for¨¢neos ¨Del 8,1% de sus alumnos con matr¨ªcula ordinaria (no de movilidad) son extranjeros, el doble que la media nacional¨D, en especial de Latinoam¨¦rica (1.427) y europeos (360). ¡°Hay preocupaci¨®n fuera. Escriben preguntando qu¨¦ est¨¢ pasando, sobre todo latinoamericanos que estudiaron aqu¨ª y piensan en mandar a sus hijos¡±, cuenta un empleado. Si existiese una crisis de desdoro puede, adem¨¢s, frenar la llegada de m¨¢s profesorado extranjero. Las cifra nacionales son p¨ªrricas (2,7% del total de docentes), pero en la USAL son algo mejores (3,09%) por su tir¨®n.
Antes de la USAL, la Universidad Rey Juan Carlos (URJC) se enfrent¨® a una crisis de prestigio provocada por un rector y tambi¨¦n por sus malas pr¨¢cticas acad¨¦micas. Nadie dud¨® de la gesti¨®n de Fernando Su¨¢rez, pero en 2017 adelant¨® las elecciones (no dimiti¨®) cercado por las acusaciones de plagio. EL PA?S pudo contrastar 15 plagios de Su¨¢rez a una veintena de autores, incluido su padre. Entonces, investigadores de la URJC se lamentaban del deshonor internacional en este diario. El caso salt¨® la frontera cuando la Universidad de California-Santa B¨¢rbara anunci¨® la retirada de un art¨ªculo publicado en su editorial y en proyectos codirigidos internacionalmente, los cient¨ªficos de URJC tuvieron que responder a preguntas de sus compa?eros sobre su rector. Una escena que se puede revivir ahora con los de la USAL.
La conferencia de rectores (CRUE) no tiene previsto entrar a valorar el nombramiento de Corchado, pues salvo en casos extremos no interviene nunca en crisis internas, por eso resulta ilustrativo que a preguntas de este peri¨®dico fuentes de la instituci¨®n (sin citar a la USAL) resaltasen la necesidad de defender y preservar ¡°la honestidad acad¨¦mica y cient¨ªfica¡± para mantener el ¡°prestigio¡± y la ¡°confianza de la sociedad¡±. En opini¨®n de Stride, se juega la reputaci¨®n de dos o tres a?os, no una, sino todo el conjunto de universidades espa?olas.
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