El PP constata que no puede hacer la misma Selectividad en las comunidades donde gobierna
El partido se enfrenta al dilema de que para unificar la prueba tendr¨ªa que simplificar los temarios, lo que choca con su discurso de que hay que aumentar la exigencia del examen
Despu¨¦s de a?os reclamando una ¡°Selectividad ¨²nica¡± ¨Drebautizada recientemente como ¡°com¨²n¡±¨D, y de meses prometiendo que los estudiantes de las 12 comunidades aut¨®nomas donde gobierna la estrenar¨ªan el pr¨®ximo mes de junio, el Partido Popular ha admitido esta semana que su propuesta resulta de momento inviable. El argumento que ha esgrimido el PP es que los curr¨ªculos de segundo de bachillerato ¨Dsimplificando, los temarios que se estudian en dicho curso¨D son distintos entre unos territorios y otros y, por tanto, no puede ponerse el mismo examen. Se trata del mismo argumento con el que ven¨ªan contestando a su propuesta el Ministerio de Educaci¨®n, ejecutivos auton¨®micos en manos de otros partidos y diversos responsables universitarios ¨De, incluso, de forma diplom¨¢tica, el Gobierno canario, del que los populares forman parte y en el que ostentan la cartera de Educaci¨®n¨D, que han defendido, en cambio, avanzar en una armonizaci¨®n que este a?o ha dado un paso importante en cuestiones como la reducci¨®n de la optatividad (habr¨¢ un solo modelo de ejercicio por cada materia) y la limitaci¨®n del alcance del nuevo enfoque competencial (solo tendr¨¢n este planteamiento m¨¢s aplicado entre un 20% y un 25% de las preguntas), como adelant¨® EL PA?S.
Hacer la misma Prueba de Acceso a la Universidad (PAU), incluso limitada a aquellas comunidades aut¨®nomas comprometidas con la causa (es decir, lo que ha intentado ahora el PP), requiere cambios normativos que llevar¨ªan a?os. Imponerla en todos los territorios, sean o no partidarios de dicha unificaci¨®n (que es el objetivo pol¨ªtico manifestado por el PP y Vox), exigir¨ªa una reforma todav¨ªa m¨¢s larga y profunda, que deber¨ªa empezar por la ley org¨¢nica de educaci¨®n, y de resultado dudoso, ya que la justicia, como hizo en 2012 el Tribunal Constitucional, podr¨ªa considerarlo una invasi¨®n de las competencias educativas de las comunidades aut¨®nomas, que comparten dicha parcela con el Gobierno. El ruido que todo ello generar¨ªa no beneficiar¨ªa a los m¨¢s de 300.000 estudiantes que anualmente se presentan a una prueba que, ya de por s¨ª, crispa los nervios de muchos de quienes se presentan. Especialmente este curso, en el que va a inaugurarse la Selectividad adaptada a la Lomloe, y las comunidades aut¨®nomas van muy retrasadas a la hora de aprobar su normativa auton¨®mica y publicar ejemplos de c¨®mo ser¨¢n los nuevos ex¨¢menes, lo que desemboc¨® el viernes en una jornada de huelga en secundaria y manifestaciones que sacaron a la calle a miles de estudiantes en medio centenar de ciudades espa?olas.
La materia de Historia de Espa?a es la m¨¢s simb¨®lica para el PP. Pero resulta tambi¨¦n, seg¨²n han acabado reconociendo los populares esta semana en un mensaje remitido a los medios, ¡°una de las asignaturas m¨¢s dif¨ªciles de homogeneizar¡±, ya que una parte de las comunidades aut¨®nomas incluyen ¡°en su curr¨ªculo el estudio de toda la Historia y otras solo de la contempor¨¢nea, los siglos XIX y XX¡±.
El partido a?adi¨® que ha empezado a trabajar con la Real Academia de la Historia en la definici¨®n de unos nuevos curr¨ªculos de la asignatura. Pero, por r¨¢pido que pretendan ir, las comunidades aut¨®nomas no podr¨¢n aplicar nuevos contenidos de dicha materia en la Selectividad hasta dentro de varios a?os. Y parece adem¨¢s complicado que el resultado sea que haya temarios id¨¦nticos en todos los territorios donde gobierna el PP. La ley de educaci¨®n establece que el Ministerio de Educaci¨®n fija la mitad del curr¨ªculo y las autonom¨ªas, la otra mitad, en cada asignatura. Y cuesta imaginar que comunidades como Andaluc¨ªa, Canarias, Galicia, Arag¨®n y Cantabria, por citar solo cinco donde gobierna el Partido Popular, vayan a renunciar a incluir en sus curr¨ªculos cap¨ªtulos dedicados a la historia espec¨ªfica de sus territorios.
El PP se halla, adem¨¢s, de cara a la Selectividad de este curso, ante un dilema. Y es que la ¨²nica manera de hacer ex¨¢menes con contenidos m¨¢s o menos parecidos en territorios que tienen curr¨ªculos distintos consiste en centrar las preguntas en aquellos temas que todos tienen en com¨²n. El partido, a la vista del comunicado que difundi¨® esta semana, parece apostar por ello a trav¨¦s de la llamada figura de las ¡°matrices¡±. El problema es que dicha soluci¨®n env¨ªa a los institutos el mensaje de que aquello que no est¨¢ incluido en las matrices no ser¨¢ preguntado y, por tanto, no es necesario estudiarlo. Y ello choca no solo con otro de los mantras educativos m¨¢s repetidos en los ¨²ltimos a?os por el Partido Popular, consistente en acusar al Ministerio de Educaci¨®n de regalar aprobados y bajar el nivel de exigencia, sino con el real decreto de la nueva Prueba de Acceso a la Universidad, aprobado en junio por el Gobierno, y con el acuerdo alcanzado hace unos d¨ªas por la Conferencia de Rectores de las Universidades Espa?olas (CRUE), que establece que los ex¨¢menes deben estar dise?ados de tal manera que para obtener la mejor calificaci¨®n sea necesario haber estudiado casi todo el temario ¨Dlos coordinadores auton¨®micos de la Selectividad lo fijaron entre el 75% y el 80%¨D.
Cuadrar horarios
Quedan opciones intermedias, como que todas las comunidades del PP incluyan algunas preguntas iguales en los ex¨¢menes, por lo dem¨¢s distintos, de cada asignatura. Pero ese objetivo tambi¨¦n est¨¢ resultando complicado, seg¨²n admite una fuente del PP, por la dificultad de cuadrar los horarios de inicio de los ejercicios ¨Den segundo de Bachillerato hay 42 ejercicios¨D en las 12 comunidades donde gobiernan. Una decisi¨®n organizativa en la que tienen mucho que decir las universidades p¨²blicas de cada territorio, que son en la pr¨¢ctica las que llevan a cabo la prueba. Si los ex¨¢menes de cada asignatura no empiezan a la misma hora, resulta arriesgado poner preguntas iguales. Basta con que un alumno salga pronto del aula y cuente en cualquier red social qu¨¦ inclu¨ªa el examen para que miles de estudiantes de otras comunidades donde el ejercicio empiece m¨¢s tarde cuenten con ventaja, con el consecuente esc¨¢ndalo. El acuerdo parece muy dif¨ªcil, aunque seg¨²n la misma fuente las comunidades no han renunciado a cuadrarlos. Lo ¨²nico seguro es que, en l¨ªnea con lo acordado con las universidades, las pruebas ser¨¢n el 3, 4 y 5 de junio.
El PP tambi¨¦n ha hecho hincapi¨¦ esta semana en que el terrorismo ser¨¢ ¡°uno de los contenidos evaluables¡± que tienen previsto incluir en las ¡°matrices¡± del examen de Historia de Espa?a. Fuentes del Ministerio de Educaci¨®n, recuerdan, sin embargo, que el terrorismo ya es una materia evaluable en la PAU en toda Espa?a, porque figura en la parte del curr¨ªculo de la asignatura que fija el Gobierno. El tema La Transici¨®n y la Constituci¨®n de 1978, incluye el cap¨ªtulo La normalizaci¨®n democr¨¢tica y la amenaza del terrorismo. Y en el tema Memoria democr¨¢tica figura el cap¨ªtulo Reconocimiento, reparaci¨®n y dignificaci¨®n de las v¨ªctimas de la violencia y del terrorismo en Espa?a.
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