?Es septiembre el mejor momento para cambiar de h¨¢bitos?
?Por qu¨¦ no marzo o noviembre? Investigamos los or¨ªgenes de esta costumbre, as¨ª como su idoneidad
Hay dos meses del a?o que parecen darnos la oportunidad de empezar de nuevo: enero y septiembre. El primero, porque comienza un nuevo ciclo en el calendario. El segundo, en el que nos encontramos, porque acaba el per¨ªodo vacacional, unas semanas en las que hemos tenido tiempo para pensar y reflexionar sobre qui¨¦nes somos y qu¨¦ estamos haciendo con nuestra vida. As¨ª que llegamos a casa, deshacemos las maletas y comenzamos a alimentar la idea de que es el momento perfecto para hacer algunos cambios en nuestros h¨¢bitos que nos ayudar¨¢n a estar m¨¢s cerca de lo que deseamos ser: esos ¨¢lter ego que no fuman, hacen deporte, comen sin sal, controlan los nervios y devuelven las llamadas a su madre
Pautas de conducta
1. Plant¨¦ese retos accesibles. A medida que los vaya alcanzando, su motivaci¨®n ir¨¢ aumentando y la confianza en s¨ª mismo se ver¨¢ fortalecida. De este modo, y poco a poco, se ir¨¢ acercando a la gran meta definitiva.
2. No tire la toalla. Es importante que sea paciente consigo mismo y que no se desespere, ni al principio ni durante el proceso, aunque las cosas no salgan como espera.
3. Elija el momento adecuado. Alcanzar el ¨¦xito de nuestro prop¨®sito depende en gran medida del factor oportunidad. Si inicia el proceso de cambio en una etapa de su vida en que se encuentra tranquilo y con la confianza suficiente para acometer esta empresa, sin duda, habr¨¢ m¨¢s posibilidades de que consiga aquello que se propone.
4. Crea en lo que quiere conseguir. Estar plenamente convencido de lo que quiere hacer y recordar cada d¨ªa los motivos por los que realiza dicho esfuerzo es una poderosa garant¨ªa de ¨¦xito.
Pero, ?por qu¨¦ septiembre? ?Por qu¨¦ no marzo o noviembre? Una de las principales razones tiene su origen en la infancia y m¨¢s concretamente en los a?os de colegio, cuando la vida empezaba el primer d¨ªa de clase. El noveno mes del calendario tiene una fuerte connotaci¨®n de regreso a la rutina. ¡°Precisamente, esta vuelta al orden permite que los padres tengan m¨¢s tiempo para s¨ª mismos, y muchos de ellos deciden retomar esas actividades que consideran una asignatura pendiente. Es el momento de quitarse las espinitas que tenemos clavadas desde hace tiempo¡±, explica la psic¨®loga Carmen Torrado.
Pero, no solo los recuerdos enraizados en el pasado nos empujan a preparar nuestra to do list (¡°lista de cosas para hacer¡±) particular, otro de los motivos lo encontramos en el sentimiento de culpa que nace tras los excesos cometidos durante el verano. ¡°Del mismo modo que tras la tempestad llega la calma, despu¨¦s de las vacaciones, llega septiembre; y con ¨¦l, el momento de tranquilizarse y vivir de forma sana y ordenada¡±, afirma la especialista.
La sensaci¨®n de que con septiembre se inicia un per¨ªodo destinado a enmendar errores o de que comienza un nuevo ¡°curso¡± son algunas de las razones que explican por qu¨¦ elegimos de forma casi inconsciente este mes para intentar ser mejores. Sin embargo, lo cierto es que, seg¨²n la psic¨®loga Carmen Torrado, ¡°cualquier momento es bueno para plantearse este objetivo. Puede ser tu cumplea?os o el d¨ªa del aniversario de tu boda, lo importante es escoger nuestro momento, aquel en el que sintamos que el cambio que queremos conseguir es necesario¡±.
Y es que tan importante es el objetivo que queremos alcanzar como el momento que elegimos para llevarlo a cabo. Al menos, as¨ª lo cree Torrado, quien describe de esta forma ese momento ideal: ¡°Es aquel en el que tenemos verdaderas ganas de acometer el cambio. Si hacemos las cosas solo porque ¡®tocan¡¯, ser¨¢ mucho m¨¢s complicado lograr nuestra meta¡±.
Parece claro que las garant¨ªas de ¨¦xito en el cumplimiento de nuestros prop¨®sitos postvacacionales no van asociadas al calendario, sino a ¡°las fuerzas con las que contemos y al bienestar y la paz interior que estemos viviendo en ese momento¡±.
La motivaci¨®n es el verdadero motor que convertir¨¢ su prop¨®sito en una realidad. Olv¨ªdese del calendario. Porque si consigue dejar de fumar o aprender alem¨¢n, no ser¨¢ porque lo haya decidido en septiembre, sino porque estaba absolutamente convencido de que no quer¨ªa encender ni un cigarrillo m¨¢s.
El tiempo que tardemos en incorporar o eliminar un h¨¢bito depender¨¢ de varios factores, entre ellos, del car¨¢cter y del tipo de conducta que queramos cambiar. ¡°Pero no debemos olvidar que m¨¢s importante que el tiempo que empleemos en el proceso de transformaci¨®n es que valoremos la consecuci¨®n de las peque?as metas que nos llevan hacia el logro del objetivo final¡±, insiste Torrado.
Para lograrlo, debemos ser pacientes con nosotros mismos. Sobre todo, si nuestro objetivo no es sencillo. Seg¨²n la psic¨®loga, no es lo mismo incorporar una nueva rutina que eliminar una mala costumbre. ¡°Las dos cosas son dif¨ªciles. Pero considero que eliminar un h¨¢bito, ¡®desaprender¡¯, podr¨ªa ser m¨¢s complicado que adquirir nuevas costumbres, y m¨¢s cuando estas nos acompa?an desde hace a?os¡±, opina la experta.
Otro consejo: no se proponga demasiadas metas a la vez. ¡°Podr¨ªa hacer que tiremos la toalla con m¨¢s facilidad¡±, explica la psic¨®loga. ?Qu¨¦ tal un nuevo objetivo cada mes?
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