¡®Rosetta¡¯ cumple su destino y muere en su cometa
Concluye la hist¨®rica misi¨®n europea tras m¨¢s de 12 a?os desde que despeg¨® de la Tierra
La nave Rosetta ha aterrizado con ¨¦xito en su cometa y se ha apagado para siempre. Es el final de una misi¨®n espacial hist¨®rica, la primera en orbitar y descender a un cometa activo.
Los ¨²ltimos minutos de descenso se han seguido desde el centro de control de la Agencia Espacial Europea (ESA) en Alemania en completo silencio, hasta que han estallado los aplausos unos instantes antes que el responsable del control confirmase que la misi¨®n hab¨ªa concluido con ¨¦xito. "Esto es todo¡±, ha dicho Patrick Martin, l¨ªder de la misi¨®n. ¡°Esta es la culminaci¨®n de un ¨¦xito cient¨ªfico y t¨¦cnico tremendo¡±.
De hecho, Rosetta ha debido aterrizar unos 10 minutos pasadas las 12:30, hora peninsular espa?ola, pero la se?al tarda en llegar a la Tierra 40 minutos. Una vez toma tierra, un software detecta el impacto y autom¨¢ticamente apaga la nave sin posibilidad de volverla a encender.
Durante su descenso, la nave de la ESA ha ido enviando detalladas im¨¢genes del cometa, que se encuentra a m¨¢s de 700 millones de kil¨®metros de la Tierra. Esas im¨¢genes son hist¨®ricas: nunca un instrumento humano hab¨ªa estado tan cerca de un cometa y hab¨ªa podido retratar la superficie de estos cuerpos, imprescindibles para entender el origen del Sistema Solar y posiblemente el origen de la vida.
From #67P with love: a last image, taken 51 metres before #CometLanding #MissionComplete https://t.co/yiSnxDrnba pic.twitter.com/MNuz622tNJ
— ESA Rosetta Mission (@ESA_Rosetta) September 30, 2016
El cometa 67P es una bola de hielo y polvo que viaja a m¨¢s de 130.000 kil¨®metros por hora. Su forma, con un l¨®bulo mayor y otro menor, es parecida a un pato de goma. El cometa gira sobre s¨ª mismo constantemente lo que genera un campo gravitatorio irregular que podr¨ªa arruinar el aterrizaje de una sonda si no se tuviera en cuenta. Durante su misi¨®n, Rosetta ha caracterizado al detalle ese campo gravitatorio para poder cumplir su destino final: aterrizar en una fosa activa situada en el l¨®bulo menos, la cabeza del pato.
Esta ma?ana los ingenieros de la ESA confirmaron la hora de aterrizaje con un margen de error de dos minutos y comprobaron que su tiro hab¨ªa sido bastante certero. La sonda va a tomar tierra a solo 40 metros del punto original elegido. Se trata de una zona muy cercana a la fosa Deir-el-Medina, una de la muchas que existen en la cabeza del cometa. En el interior de estos pozos activos, que escupen gas y polvo, se encuentra el material original del que naci¨® el Sistema Solar hace unos 4.500 millones de a?os. Antes de morir, la sonda ha intentado analizar ese material en busca de compuestos org¨¢nicos que son la base de la vida tal y como la conocemos.
Los diferentes equipos que han desarrollado la misi¨®n se unieron hoy en una retransmisi¨®n en directo desde el centro de control en Darmstadt, Alemania. El director general de la ESA, Johann-Dietrich W?rner, y varios ingenieros del equipo siguieron el aterrizaje desde Guadalajara, M¨¦xico, donde se celebra el Congreso Internacional de Astron¨¢utica.
Un largo viaje
El viaje de Rosetta comenz¨® en marzo de 2004. Despeg¨® de la Tierra con un cohete Ariane 5, despu¨¦s de dos intentos fallidos y un aplazamiento. Rosetta iba acompa?ada de un m¨®dulo de descenso llamado Philae. El objetivo de la misi¨®n era alcanzar la ¨®rbita del cometa?67P/Churyumov-Gerasimenko para estudiar su composici¨®n. El viaje de la sonda hasta el cometa no fue directo, porque no existe un cohete de tal potencia. Por eso, fue tomando impulso gravitatorio al acercarse a algunos planetas como la Tierra o Marte. Rosetta tuvo que hibernar durante 31 meses porque viajaba tan lejos del Sol que no le llegaba la suficiente radiaci¨®n que la alimentase de energ¨ªa.
La misi¨®n se discuti¨® por primera vez a finales de los a?os 70, pero finalmente se aprob¨® en 1993. La sonda est¨¢ dise?ada y fabricada por un consorcio de varios pa¨ªses entre los que se encuentra Espa?a y cuesta 1.300 millones de euros. Su viaje ha recorrido 8.000 millones de kil¨®metros a trav¨¦s del espacio. De ellos, 6.400 millones para alcanzar la ¨®rbita del cometa. En agosto de 2014, despu¨¦s de una d¨¦cada de viaje, Rosetta alcanz¨® su objetivo y en noviembre de 2014 Philae aterriz¨® en ¨¦l para medir el campo magn¨¦tico del cometa y tomar muestras de los materiales de la superficie del n¨²cleo.
Rosetta y Philae han sido las primeras en acompa?ar a un cometa en su viaje hacia el Sol y posarse sobre ¨¦l. Entre los aparatos cient¨ªficos de la misi¨®n est¨¢ la c¨¢mara Osiris, que hizo las primeras fotograf¨ªas de un asteroride, el Stein, a 360 millones de kil¨®metros de la Tierra.
Los cometas tienen especial importancia para comprender el Sistema Solar puesto que en su interior conservan el material intacto que exist¨ªa en sus or¨ªgenes, hace 4.500 millones de a?os. Al contrario que la Tierra, que ha ido cambiando por el movimiento de las placas tect¨®nicas y los volcanes. Uno de los hallazgos m¨¢s relevantes que ha realizado Rosetta es el descubrimiento de mol¨¦culas de ox¨ªgeno en el cometa 67/P, algo que no hubiese sido posible con los telescopios terrestres. Otro de los descubrimientos es la presencia de 16 compuestos org¨¢nicos como mol¨¦culas precursoras de prote¨ªnas, de az¨²cares e incluso de ADN.
Desde hoy, el cometa 67P transportar¨¢ un mensaje para civilizaciones alien¨ªgenas, pues Rosetta lleva a bordo una placa de n¨ªquel con mensajes en 1.000 idiomas.
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