?Son m¨¢s educados los brit¨¢nicos por estar todo el d¨ªa diciendo 'sorry'?
Pedir perd¨®n por todo puede ser contraproducente. 8 situaciones en las que deber¨ªamos dejar de hacerlo
Entre pedir perd¨®n por estornudar en p¨²blico y por no contestar un correo de su jefe un domingo por la tarde hay toda una gama de razones y matices con un factor com¨²n: disculparnos. La sensatez y los valores aprendidos desde ni?os sustentan la apolog¨ªa de excusarse como una f¨®rmula educada y pol¨ªticamente correcta.
Y es que el lenguaje y la cultura son los grandes responsables de todos esos perdones. Cuando nos disculpamos por no asistir a una invitaci¨®n aburrida, o por no comprar una prenda tras ¡°haber molestado¡± al vendedor, en realidad obedecemos a los dictados de una cultura invisible, de la que habla Mar¨ªa Victoria Scandell, catedr¨¢tica de Ling¨¹¨ªstica General en la UNED y experta en Pragm¨¢tica, Sem¨¢ntica y Comunicaci¨®n. Para explicar los condicionantes sociales y cognitivos relacionados con este comportamiento, hay que reflexionar sobre las consecuencias, la responsabilidad y la culpa. ¡°?Pedimos perd¨®n porque somos causantes de lo sucedido, o porque hemos generado consecuencias negativas, aunque no seamos responsables de ello?¡±.
?La fil¨®loga Carme Valls Anguera destaca que hay una fuerte influencia cultural de cada pa¨ªs. Los espa?oles, por ejemplo, ¡°no suelen ofrecer disculpas si vienen originadas por un descuido u olvido, aunque s¨ª acostumbran a hacerlo en los contextos de incidentes o accidentes de cierta envergadura¡±, asegura en su memoria de investigaci¨®n para el Instituto Cervantes. ?Qu¨¦ hacen en otros pa¨ªses? Varios estudios contrastivos han se?alado diferencias pragm¨¢ticas entre distintos idiomas. La investigadora Kathrin Siebold concluye que las disculpas en alem¨¢n contienen m¨¢s f¨®rmulas directas (¡°perdona¡±) que las espa?olas (¡°ver¨¢s, lo que pasa es que ha habido un problema porque¡¡±). La autora ha observado que, para los hablantes de la lengua espa?ola, es m¨¢s importante guardar la propia imagen social positiva que atender a la del otro, lo cual explica el mayor uso de expresiones indirectas de la disculpa.
Y los brit¨¢nicos, ?por qu¨¦ se disculpan m¨¢s que respiran? Para ellos es algo as¨ª como una forma de cortes¨ªa. Sorry o excuse me son las expresiones m¨¢s utilizadas en Reino Unido: un estudio constat¨® que lo dec¨ªan una media de ocho veces al d¨ªa, aunque algunos llegaban a hacerlo hasta 20 veces. La antrop¨®loga Kate Fox se dedic¨® a hacer un experimento: chocar deliberadamente con distintas personas en varias localidades inglesas. Cerca del 80% se disculparon con Fox, aunque no ten¨ªan ninguna culpa.
Disculparse de forma indiscriminada es contraproducente
Los psic¨®logos establecen una clara diferencia entre perdones y pseudoperdones. Los primeros son sentidos; los segundos, ¡°buscan evitar la confrontaci¨®n o solucionar de forma r¨¢pida una situaci¨®n inc¨®moda¡±, explica la psic¨®loga Jessica Rodr¨ªguez Zappulla. ¡°Quien se disculpa por todo, de manera indiferenciada, lo hace de forma superficial¡±. Y algunos lo aprenden desde peque?os. ¡°Cuando escuchamos a los padres decir a sus hijos que pidan perd¨®n a un amigo, y el ni?o obedece, esto tiene una connotaci¨®n relacionada con la educaci¨®n social, pero a menudo carece de la profundidad que se requiere para analizar el da?o realizado y valorar la necesidad de hacernos cargo de la ofensa¡±, a?ade. En este sentido, Josu¨¦ G¨®mez Villegas, cl¨ªnico de Nova Psicolog¨ªa asegura que ¡°los actos autom¨¢ticos y protocolarios aprendidos en la infancia no pasan por el filtro de la raz¨®n, reforzando esa forma de comunicaci¨®n pasiva que evita el conflicto, a veces por inseguridad o falta de autoestima¡±.
Y hay una situaci¨®n peor. Los que piden perd¨®n como si no hubiera un ma?ana. ¡°Las disculpas por sumisi¨®n est¨¢n basadas en la b¨²squeda de aprobaci¨®n social, por encima de nuestro propio criterio, para tratar que el otro tenga una buena imagen de nosotros¡±, sentencia Vanessa Abrines, psic¨®loga del equipo de Psicoterapeutas. Esto es un h¨¢bito peligroso, puesto que ¡°cuando el objetivo de pedir perd¨®n es ¨²nicamente caer bien o mostrarse obediente, perdemos el respeto por nuestros propios derechos, renunciando a una relaci¨®n de igualdad¡±, a?ade la experta. ?Es posible ser educado sin dejar que nos pisen? Por supuesto. A trav¨¦s de la asertividad, aconseja Javier Arza Magra, psic¨®logo cognitivo-conductual de?PsyBilbo. No es no. ¡°Hay que aprender a expresar los propios sentimientos, necesidades y opiniones, respetando los derechos de los dem¨¢s desde la honestidad¡±. Cuando se empieza a poner en pr¨¢ctica, ¡°la persona pierde el miedo y act¨²a sin sentimientos de ansiedad ni culpa¡±, asegura el experto.
Por qu¨¦ ellas se disculpan m¨¢s que ellos
Es cuesti¨®n de percepci¨®n: los hombres no piensan que hayan cometido errores tan a menudo como las mujeres, o que sus comportamientos sean tan ofensivos como para tener que pedir perd¨®n. Unos y otros se disculpan igual si piensan que han hecho algo malo, pero ellos simplemente no se sienten culpables tan a menudo. As¨ª lo asegura un estudio de la psic¨®loga Karina Schumann, de la Universidad de Waterloo (Ontario, Canad¨¢).
As¨ª pues, se acab¨® lo de disculparse por estornudar (siempre que no sea en la cara de alguien), por no saber algo o por no detenernos cuando nos para el voluntario de una ONG por la calle. Josu¨¦ G¨®mez Villegas recomienda ser m¨¢s asertivos en estas 8 situaciones comunes:
1. ¡°Siento ped¨ªrtelo, pero ?podr¨ªas devolverme mis 60 euros?¡±
En casos peliagudos como este, hemos de ser muy espec¨ªficos, hablar de c¨®mo nos hace sentir esa situaci¨®n y hacer valer nuestro derecho.
2. ¡°Perdona, que al final no pude llamarte¡±
Cada uno gestiona su tiempo como cree conveniente y tiene derecho a ello. Si no ha devuelto una llamada, el otro deber¨ªa entender que estaba ocupado o simplemente no le interesaba.
3. ¡°?Disculpa, cuando tengas un momento, me podr¨ªas atender?¡±
No debemos excusarnos por pedir a alguien que cumpla con su obligaci¨®n (en una tienda de ropa, por ejemplo). Basta con decirlo de una forma respetuosa.
4. ¡°Lo siento mucho, me voy a marchar ya, que tengo a los ni?os solos¡±
Una situaci¨®n com¨²n en la oficina, pero que no deber¨ªa serlo si ya hemos cumplido nuestro horario, ya que una cosa es superar el l¨ªmite de nuestras obligaciones porque queremos, y otra, que debamos hacerlo.
5. ¡°No te contest¨¦ el WhatsApp, ?perdona!¡±
Aunque no es necesario disculparse ni dar explicaciones, si nos reprochan que hemos tardado responder, la soluci¨®n est¨¢ en ser honestos, no en pedir disculpas: "Estaba ocupado".
6. ¡°Disculpa, es que el ni?o es muy revoltoso¡±
Si su hijo no se comporta como deber¨ªa en colegio, plant¨¦ese si debe disculparse por ¨¦l. Probablemente, el interlocutor comprende la situaci¨®n.
7. ¡°Me sabe fatal, lo siento. No podr¨¦ ir a la boda¡±
Cada uno gestiona su tiempo y esfuerzos como cree oportuno. Se puede ser asertivo sin tener que recorrer al perd¨®n constante.
8. ¡°Perdone, pero creo que iba yo, es que tengo un poco de prisa¡±
Que le atiendan en la cola del supermercado (por ejemplo) cuando es su turno, no es un favor. Es un derecho.
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