La moda de la bici impulsa los negocios de dos ruedas
Las ventas de art¨ªculos de ciclismo en Espa?a superan los 1.500 millones de euros al a?o por encima de cualquier otro deporte
La bicicleta ha pasado de ser solo un veh¨ªculo de ocio a un medio de transporte alternativo en ciudades como Barcelona, Sevilla, Madrid o Vitoria. Un fen¨®meno en el que aficionados y ajenos al ciclismo han encontrado una oportunidad de negocio, incluso durante la crisis. Desde 2013, el n¨²mero de tiendas de alquiler, venta y reparaci¨®n aument¨® un 23%, seg¨²n la Asociaci¨®n de Marcas de Bicicletas (AMBE). Adem¨¢s, caf¨¦s, aparcamientos privados y artesanos de las dos ruedas han proliferado al abrigo de un sector que, en 2016, factur¨® 1.549 millones de euros, m¨¢s que cualquier otro deporte.?
De vuelta a Espa?a despu¨¦s de trabajar en el Acelerador de Part¨ªculas en Suiza (CERN), Alejo Bastos, de 47 a?os, decidi¨® reinventarse. En un min¨²sculo local de Chamber¨ª, naci¨® en 2009 Biobike, la primera tienda de bicicletas el¨¦ctricas de Madrid. ¡°Hab¨ªa seis millones de potenciales clientes y nadie que vendiera el producto¡±, afirma. Bastos no se equivocaba en sus c¨¢lculos, solo entre 2014 y 2016, la venta de bicicletas de pedaleo asistido en Espa?a creci¨® un 128% y supera las 40.000 unidades.?
Bruno Fern¨¢ndez, de 41 a?os, y su socio, Javier Reguero, tambi¨¦n vieron en la opci¨®n el¨¦ctrica una oportunidad. Su empresa de ingenier¨ªa hac¨ªa aguas cuando, en 2012, desarrollaron Ebike75, un kit para transformar una bicicleta convencional en una motorizada. Entre 2013 y 2016, multiplicaron por cuatro su facturaci¨®n -que asciende a 400.000 euros-, han contratado a dos empleados y varios colaboradores y planean mudarse de su actual sede en el distrito de Ciudad Lineal, al este de Madrid.
Sin contacto previo con el mundo del ciclismo, tanto Bastos como Fern¨¢ndez apostaron por las dos ruedas atra¨ªdos por un sector que no s¨®lo no ha sufrido los efectos de la crisis, sino que se ha servido de ella para seguir creciendo. ¡°La situaci¨®n econ¨®mica, la congesti¨®n del tr¨¢fico, la poluci¨®n, el precio de los combustibles y la falta de ingresos familiares ha hecho que muchas personas hayan aprovechado para decidirse a utilizar la bicicleta como medio de transporte habitual¡±, se?ala Carlos N¨²?ez, secretario general de AMBE. M¨¢s de la mitad de las personas que usan la bicicleta a diario para ir al trabajo se desplazaban antes en coche, seg¨²n el ¨²ltimo bar¨®metro elaborado por la Red de Ciudades por la Bicicleta.?
Nuevas demandas
El desarrollo de la cultura de la bicicleta en zonas urbanas ha provocado la aparici¨®n de nuevos nichos de mercado que no han pasado desapercibidos para quienes buscaban emprender. Tiendas de alquiler, reparaci¨®n, estacionamientos e incluso caf¨¦s tem¨¢ticos han abierto sus puertas para satisfacer las necesidades de los nuevos ciclistas, en ciudades donde el negocio de la bici estaba a¨²n por explotar.?
A esa conclusi¨®n lleg¨® Carlos Amarillo, de 43 a?os y aficionado al ciclismo, antes de poner en marcha Rent a bike, en Sevilla. ¡°Me di cuenta de que hab¨ªa una carencia. Exist¨ªa un mayor uso de la bici en la ciudad, pero no hab¨ªa locales para alquilar una¡±, explica. Desde que abri¨® en 2006, Amarillo ha pasado de tener 20 bicicletas plegables a una flota de 250 veh¨ªculos, cinco empleados, tres locales y una tienda de venta. Un camino similar al de Michal Zasowski, de 40 a?os y propietario de Trixi Madrid, que en diez a?os se ha convertido en uno de los referentes del alquiler en la capital.
Cuando Alicia del R¨ªo decidi¨® tirar de ahorros e invertir en las dos ruedas tampoco exist¨ªa soluci¨®n para uno de los principales problemas de los ciclistas urbanos: los robos. Del R¨ªo, de 45 a?os, junto con otros cinco socios, dej¨® su trabajo en el mundo audiovisual y cre¨® Don Cicleto: plazas de aparcamiento vigiladas por 20 euros al mes. La red de estacionamientos, que comenz¨® con un ¨²nico local, cuenta en la actualidad con un total de nueve parkings entre Madrid y Zaragoza y est¨¢ prevista su llegada a Sevilla.
Sin embargo, a pesar de que en la mayor¨ªa de los casos el balance es positivo, muchos no esconden lo dif¨ªcil que es mantenerse, sobre todo en el caso de las tiendas de venta y reparaci¨®n. ¡°Existe mucha competencia desleal. Se han abierto negocios como setas e intentan reventar los precios¡±, afirma Carles Fern¨¢ndez, due?o de Velociutat, en Barcelona. Un comentario que se repite con frecuencia entre los comerciantes. Despu¨¦s de tres a?os, este exproductor de televisi¨®n tiene claro su balance: ¡°Vivimos de ello, pero nadie se hace rico con la bicicleta¡±.?
El fil¨®n de la bici el¨¦ctrica
La presencia de la bicicleta el¨¦ctrica en Espa?a era casi anecd¨®tica hasta hace unos a?os. Sin embargo, entre 2014 y 2016, las ventas de este tipo de veh¨ªculo se han incrementado en un 128%, pasando de las 17.656 a las 40.268 unidades, seg¨²n el ¨²ltimo informe de AMBE.
De cara al futuro, el sector prev¨¦ un aumento de las ventas, pero en el caso de las el¨¦ctricas la progresi¨®n que auguran es a¨²n mejor. ¡°Seguir¨¢n creciendo a un ritmo muy alto las bicicletas de pedaleo asistido, porque a¨²n tenemos mucho margen de crecimiento¡±, vaticina Carlos N¨²?ez, secretario general de la patronal. En Espa?a, a¨²n se venden 0,8 bicis de este tipo por cada 100.000 habitantes, frente a las 6 que se compran en pa¨ªses como Alemania.
Fabricantes espa?oles como Orbea no han dudado en subirse al tren. Desde 2014, la factor¨ªa vasca produce 29 modelos de bicicletas el¨¦ctricas de ciudad, monta?a y mixtas, a los que se sumar¨¢n otros 13 en septiembre. Una apuesta por la que este a?o espera facturar 10 millones de euros, m¨¢s del doble que el pasado, cuando ingres¨® 4,7 millones.
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