Por qu¨¦ las embarazadas s¨ª deber¨ªan consumir pescado

Nada m¨¢s enterarse de que est¨¢n embarazadas, las mujeres se ven abrumadas por la informaci¨®n sobre qu¨¦ pueden ¨Co m¨¢s probablemente no pueden¨C comer y beber. Adi¨®s a los quesos fabricados con leche cruda, los huevos poco cocinados, la carne cruda, los pat¨¦s, el h¨ªgado, la cafe¨ªna, el alcohol. Hay muchas cosas que recordar.

Pero el consejo sobre comer pescado durante el embarazo es con creces el m¨¢s complejo. ?Necesita ser tan complicado? ?Qu¨¦ pruebas reales hay de los riesgos y los beneficios de consumir pescado durante el embarazo?

La Agencia de Calidad Alimentaria de Reino Unido, a trav¨¦s de NHS Choices, una p¨¢gina oficial del servicio de salud, asesora a mujeres embarazadas y lactantes, as¨ª como a mujeres que planean quedarse embarazadas. Se centra en el consumo de mercurio y de unas sustancias conocidas como bifenilos policlorados (BPC) y dioxinas presentes en pescados y mariscos.

Las directrices para embarazadas y mujeres que planean un embarazo establecen tres tipos de pescados que deben evitar por completo. Se trata de tres especies depredadoras: marl¨ªn, tibur¨®n y pez espada. Aconsejan tambi¨¦n limitar la ingesta de otros pescados, como at¨²n fresco y enlatado.

Las directrices para mujeres lactantes difieren un poco. En su caso, los pescados depredadores est¨¢n permitidos una vez a la semana y no hay l¨ªmite en el at¨²n enlatado.

La gu¨ªa incluye tambi¨¦n la recomendaci¨®n de consumir al menos dos porciones de pescado a la semana, al menos una de las cuales deber¨ªa ser de pescado azul, un consejo importante que la p¨¢gina NHS Choices menciona solo de pasada.

Todo ello se convierte en una complicada lista de consejos. Para poder seguirla, las mujeres deben distinguir correctamente entre diferentes especies de pescados. Necesitan saber cu¨¢les son los pescados azules y llevar una cuenta semanal del n¨²mero de porciones que han comido de las diferentes especies.

Exposici¨®n al mercurio y desarrollo infantil

Hay cada vez m¨¢s pruebas de los beneficios que tiene para la salud y el desarrollo del beb¨¦ el consumo de pescado por parte de la madre durante el embarazo, a pesar del contenido de mercurio. Un estudio realizado en Reino Unido, en el que se efectu¨® un seguimiento durante muchos a?os a mujeres y a sus hijos desde el embarazo (el Estudio Longitudinal de Padres e Hijos de Avon, ALSPAC) demostr¨® que el consumo de pescado influye poco en los niveles de mercurio en sangre durante el embarazo.

El consumo de dos a tres porciones de pescado semanales repercut¨ªa positivamente en las medidas de desarrollo infantil, lo que da a entender que limitar su ingesta podr¨ªa ser de hecho perjudicial. Por ejemplo, el consumo de pescado no afectaba a las posibilidades de nacimiento prematuro o bajo peso al nacer. De hecho, el peso al nacer era m¨¢s bajo en los beb¨¦s de mujeres que no hab¨ªan consumido pescado durante el embarazo. Otras medidas de desarrollo infantil posterior, como conducta infantil, habilidades sociales, motoras y de comunicaci¨®n, as¨ª como CI, tampoco mostraban relaci¨®n con los niveles de mercurio en la sangre de las madres durante el embarazo.

Resultados similares se observaron en el Estudio de desarrollo de las Seychelles, donde las mujeres comen pescado a diario y es probable que tengan niveles de mercurio m¨¢s altos que en Reino Unido.

Nutrici¨®n prenatal

Los efectos beneficiosos del consumo de pescado para el desarrollo del ni?o probablemente se deban a que quiz¨¢ los nutrientes proporcionados por el pescado ¨Cen especial vitamina D, yodo, selenio y ¨¢cidos grasos omega-3¨C protejan contra cualquier efecto posiblemente perjudicial del mercurio.

Ante estas directrices confusas y complicadas, es probable que muchas mujeres simplemente dejen por completo de comer pescado. Ciertamente esto es lo que ocurre en Estados Unidos ante una informaci¨®n nacional igualmente compleja. No cabe duda de que las mujeres brit¨¢nicas en edad f¨¦rtil (16-49 a?os) consumen considerablemente menos de las dos porciones semanales de pescado recomendadas.

El mejor consejo

Claramente existe el peligro de que, en medio de unas directrices tan complejas, se pierda el mensaje de consumir al menos dos porciones de pescado a la semana durante el embarazo y la lactancia. La simplificaci¨®n ayudar¨ªa a resolver este problema.

En primer lugar, la recomendaci¨®n de consumir como m¨ªnimo dos porciones de pescado a la semana, al menos una de ellas de pescado azul, deber¨ªa ser el principal mensaje. En segundo lugar, deber¨ªa eliminarse el consejo sobre qu¨¦ pescados evitar, limitar o comer tranquilamente. Tercero, las directrices deber¨ªan ser las mismas para las embarazadas, las que planean un embarazo o las madres lactantes.

Estos cambios sencillos en las directrices ayudar¨ªan a las mujeres a obtener el m¨¢ximo beneficio del consumo de pescado, ya est¨¦n embarazadas, planeando un embarazo o amamantando. Y garantizar¨ªan un futuro mejor para sus hijos.

Caroline Taylor es investigadora de la Universidad de Bristol.

Cl¨¢usula de divulgaci¨®n: Caroline Taylor recibe financiaci¨®n del Wellcome Trust (Beca de Reincorporaci¨®n Profesional, referencia de la beca: 104077/Z/14/Z).

Este art¨ªculo fue publicado originalmente en ingl¨¦s en la web The Conversation.

Traducci¨®n de News Clips.