Andar 3.800 kil¨®metros por la independencia (de la mujer) en India
La publicista Srishtri Bakshi emula a Gandhi con una marcha por todo el pa¨ªs para identificar los factores que determinan la violencia machista y promocionar la emancipaci¨®n de la poblaci¨®n femenina
En la primavera de 1930, Gandhi camin¨® 390 kil¨®metros hasta las orillas del ?ndico y de ella tom¨® un pu?ado de sal para "sacudir los cimientos del Raj Brit¨¢nico". La marcha a Dandi, o marcha de la sal, fue su ataque a la opresi¨®n extranjera basada en el expolio de los recursos locales. Medio mill¨®n de personas caminaron junto al Mahatma? ¡ªotros muchos le imitaron despu¨¦s¡ª en la primera manifestaci¨®n anticolonialista y germen de los movimientos de masas del siglo XX.
Despojada del yugo invasor, hoy India se enfrenta a una represi¨®n tan sangrante como el colonialismo. Pero el machismo, cuyas diferentes formas de violencia han hecho desaparecer a 63 millones de indias, no es un enemigo extra?o, y sacudir las bases del patriarcado es un reto aun mayor. De ah¨ª que la desconocida Srishtri Bakshi multiplicase los esfuerzos caminando 3.800 kil¨®metros para visibilizar el principal desaf¨ªo de la india emancipada: la independencia de sus mujeres.
¡°El problema es la falta de participaci¨®n. Y caminar es la mejor forma de llegar al ciudadano de a pie¡±, explica Bakshi, de 30 a?os, quien reuni¨® a mil personas en una marcha nocturna por las calles de Bombay en mayo de 2018, como ya hiciese en Delhi. Era la ¨²ltima de muchas realizadas por varias megal¨®polis indias y colof¨®n de un viaje por todo el subcontinente. ¡°Los recorridos de noche simbolizan que avanzamos hacia la meta de reconquistar las calles. Para que las mujeres vuelvan a casa sin miedo¡±, explica esta publicista afincada en Hong Kong desde hace un lustro. Hastiada de escuchar cr¨ªticas por la falta de seguridad de la mujer en su pa¨ªs y, sobre todo, harta de la normalizaci¨®n de la violencia machista por sus paisanos ¡ªcon una media de cuatro violaciones por hora entre 2007 y 2014¡ª Srishtri Bakshi decidi¨® dar el primer paso.
En septiembre del 2017 empez¨® el #Bill¨®nDePasosPorLaMujer desde Kanyakumari, en Tamil Nadul, estado al extremo sur, hasta Srinagar, capital de la regi¨®n septentrional de Jammu y Cachemira. Ocho meses de recorridos de 25 kil¨®metros al d¨ªa a trav¨¦s de 12 estados diferentes organizando m¨¢s de cien talleres para 800 mujeres cada uno. Un trayecto en el que interactu¨® con 85.000 personas con el objetivo de mostrar las diferencias de g¨¦nero que afectan al pa¨ªs y empoderar a la mujer. ¡°Hay que viajar para conocer la ra¨ªz de los problemas¡±, razona. Srishtri Bakshi se ayuda del ejemplo de un granjero que casaba a su hija de 12 a?os ante su incapacidad para protegerla de los j¨®venes solteros de la aldea. ¡°Este hombre reconoc¨ªa que era un error. Pero no pod¨ªa trabajar el campo para alimentar al resto de su familia por miedo a que su hija fuese asaltada¡±.
Muchas lacras que amenazan a la poblaci¨®n femenina tienen su ra¨ªz en tradiciones enquistadas en la India rural
La sociedad india se conciencia de las diferentes formas de violencia contra la mujer poco a poco. Sin embargo, junto a los obst¨¢culos que suponen el desbordamiento judicial y la falta de inversi¨®n social, muchas de las lacras que amenazan a la poblaci¨®n femenina tienen su ra¨ªz en tradiciones enquistadas en la India rural. De esa mentalidad patriarcal nacen el aborto selectivo de fetos femeninos, el matrimonio infantil, los ataques con ¨¢cido, la violencia ligada a la dote matrimonial o la mutilaci¨®n genital femenina. Males, todos ellos, vinculados a la extrema dependencia de la mujer en todos los ¨¢mbitos.
Para contribuir a su emancipaci¨®n, el proyecto de Srishtri Bakshi apost¨® por la educaci¨®n digital y financiera con el patrocinio de Empower Women. El programa de ayudas de la agencia de Naciones Unidas para la Mujer tiene como objetivo que las mujeres consigan su mayor potencial econ¨®mico transformando a los propios ciudadanos en defensores, agentes de cambio y l¨ªderes dentro de sus comunidades. ¡°El acceso a Internet en los pueblos es reducido. Pero no es tanto ese el problema, sino c¨®mo dedican el tiempo¡±, explica Bakshi, que sienta su idea en un estudio que demuestra que la poblaci¨®n rural de India pasa una media de cuatro horas en la Red, duplicando la media en las ciudades. ¡°La mejor educaci¨®n digital, unida a nociones financieras para que se conviertan en emprendedoras, es su camino a la independencia¡±, resume.
A Bakshi no le faltan ejemplos del beneficio econ¨®mico de la educaci¨®n digital tras ocho meses pate¨¢ndose la geograf¨ªa india e impartiendo talleres sobre salud, higiene, liderazgo, derechos de la mujer e igualdad. Cuenta el caso de Suchitra, quien consum¨ªa miles de v¨ªdeos de cocina por YouTube. Tras a?os de violencia dom¨¦stica, abandon¨® su Bengal Occidental natal para montar un exitoso restaurante en su nueva residencia, desde donde incluso env¨ªa dinero a su familia. O el de la joven que no pod¨ªa salir de casa en Tamil Nadul. Aprovechando su aislamiento y algunas nociones de costura, Sheeba Rishi enviaba fotos de sus telas a sus amigas por WhatsApp. En pocos meses, el grupo lleg¨® a tener unos 1.500 miembros y las ventas le han permitido abrir su propio negocio con un capital que alcanza hoy los 4.000 euros.
¡°Ante un centenar de mujeres en Cachemira, una joven musulmana dijo que ya no ten¨ªa miedo de que su padre la casase porque ahora sab¨ªa hacer negocios por Internet y quer¨ªa ser independiente¡±, explica Bakshi sobre uno de los ¨²ltimos talleres que hizo antes de acabar su viaje por el subcontinente. En cierta forma, nunca camin¨® sola. Adem¨¢s de los cientos de personas que la acompa?aron en algunos trayectos, la publicista y su equipo crearon una aplicaci¨®n m¨®vil para fomentar la imprescindible participaci¨®n. ¡°Aunque s¨¦ que mucha gente quer¨ªa contribuir, no pod¨ªa esperar que dejasen sus rutinas de lado para caminar conmigo durante 230 d¨ªas. As¨ª que buscamos una soluci¨®n millenial para involucrar a todos¡±.
CrossBow Miles ofrece acceso virtual a diferentes proyectos que ayudan a la emancipaci¨®n de la mujer. La aplicaci¨®n digital permite a los usuarios promocionarlos caminando para ellos. ¡°Por ejemplo, cada 50.000 pasos ayudan a la educaci¨®n de una ni?a. Es un apadrinamiento virtual orientado a la sensibilizaci¨®n. Cuando los particulares completan sus retos, les enviamos un resumen visualmente atractivo en vez de los tradicionales y largos informes anuales que, normalmente, nadie lee¡±, explica Srishtri Bakshi.
Acabado su periplo por el pa¨ªs en un viaje en el que, seg¨²n ella, ha ¡°aprendido m¨¢s de lo que ha podido ense?ar¡±, la publicista vuelve a su trabajo en Hong Kong, pero no da por terminada su andadura. Su organizaci¨®n ayudar¨¢ a los proyectos y reforzar¨¢ la participaci¨®n gubernamental. ¡°Vamos a presentar al Gobierno una propuesta de soluciones locales a los problemas existentes porque hay muchos funcionarios de las zonas rurales que quieren ayudar en la medida sus posibilidades. A¨²n queda mucho camino por recorrer¡±.
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