Ocultar tus emociones negativas a los ni?os es una mala idea

"Mejor no discutamos delante de los ni?os¡±, ¡°Si te parece, resolvemos luego lo que te ha pasado en el trabajo¡± o ¡°Luego hablamos para que no se entere el ni?o que est¨¢s mal¡± son expresiones muy comunes, pero que podr¨ªan estar haciendo m¨¢s mal que bien al desarrollo normal de nuestros hijos. Seg¨²n un ¨²ltimo estudio, debemos de olvidarnos de la norma de ¡°mejor no delante de los ni?os¡± y expresar las emociones negativas cotidianas delante de nuestros hijos de una manera saludable. ¡°No hacerlo es ocultarles la verdad, hacerles creer que son tontos o no hacerles part¨ªcipes de la realidad familiar¡±. Esta es la principal conclusi¨®n de una investigaci¨®n elaborada con expertos de la Universidad de Washington (WSU, en Seattle) y la de Berkeley (California).

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Seg¨²n explica en un art¨ªculo Sara Waters, profesora auxiliar del Departamento de Desarrollo Humano de la WSU, en la revista Emotion, ¡°nuestro fin era definir las consecuencias de eliminar de forma radical las emociones negativas y c¨®mo afecta a la interacci¨®n de padres e hijos¡±. Para la experta, esto provoca una situaci¨®n muy particular en la que el ni?o sabe que le ocultan algo, mientras los padres piensan que hacerlo es algo positivo para sus reto?os.

Con un muestra de 109 madres y padres participantes con sus hijos, procedentes todos de San Francisco, el grupo fue dividido casi a partes iguales con el fin de investigar tambi¨¦n las diferencias entre sexos.? En un primer paso, los investigadores le dieron a los padres una tarea estresante: hablar en p¨²blico mientras escuchaban comentarios negativos que llegaban de la audiencia. Luego, se les dio una actividad para completar con sus hijos. Mientras que a algunos les dijeron aleatoriamente que reprimieran sus emociones mientras hac¨ªan la tarea. A los otros, se les dijo que actuaran naturalmente. La actividad fue la misma para todos: montar un proyecto de Lego. Con la peculiaridad de que a los ni?os, que ten¨ªan entre siete y 11 a?os, solo se les dio las instrucciones en papel y no pod¨ªan tocar los Legos y que los padres, por su parte, ten¨ªan que armar el juguete sin ver las instrucciones. Esto les obligaba a trabajar juntos para tener ¨¦xito.

¡°Quer¨ªamos ver c¨®mo se comportaban, haciendo hincapi¨¦ en la respuesta, cari?o y calidad de las interacciones entre ambos y observando c¨®mo los padres guiaban a sus hijos¡±, prosigue Waters en el texto. A la vez, tambi¨¦n se midieron la tensi¨®n arterial, el ritmo card¨ªaco y los niveles de estr¨¦s. ¡°Tras la recogida de datos, nos percatamos que tratar de suprimir el estr¨¦s hizo que los padres fueran peores compa?eros de equipo para montar el Lego y ofrecieron menos ayuda al menor. Pero este comportamiento no se daba solo desde el punto de vista paterno, sus hijos tambi¨¦n se mostraron menos receptivos y positivos con ellos a su vez. Fue casi como si los padres estuvieran transmitiendo esas emociones¡±, a?ade.

En cuanto a la diferencia de g¨¦nero, entre padres y madres, los autores descubrieron que los ni?os eran m¨¢s sensibles a la ocultaci¨®n de las emociones maternas que a las paternas, pero, seg¨²n incide Waters, "m¨¢s investigaci¨®n al respecto es necesaria porque no sabemos el porqu¨¦".

Esta no es la primera vez que un estudio concluye que el ni?o es capaz de percibir c¨®mo se sienten sus padres y saber que estos le est¨¢n ocultando algo, ¡°hay docenas de investigaciones al respecto¡±, prosigue la experta. Para ella, los ni?os son muy buenos a la hora de darse cuenta de qu¨¦ algo pasa: ¡°Si siente que algo negativo ha pasado y los padres act¨²an con normalidad y no se lo cuentan, este comportamiento les confunde. Es m¨¢s, manda un confuso. Expresar las emociones negativas a los ni?os de una forma saludable les ayuda a regular las suyas propias y a resolver problemas. Es mejor que tu hijo vea que est¨¢s enfadado o estresado, que se lo cuentes y, adem¨¢s, les digas qu¨¦ vas a hacer para que se te pase y la situaci¨®n mejore¡±, concluye.