¡°La exploraci¨®n de vida en otros planetas ser¨¢ la tarea de la astronom¨ªa del pr¨®ximo siglo¡±

La Uni¨®n Astron¨®mica Internacional (UAI) celebra este a?o su centenario, y la astrof¨ªsica holandesa, Ewine van Dishoeck, su nueva presidenta, se ha impuesto la tarea de acercar la ciencia que estudia los astros, sus movimientos y leyes, al p¨²blico. Tambi¨¦n la de animar a m¨¢s mujeres, que suman ahora el 18% de sus miembros, a convertirse en astr¨®nomas. Lleva apenas cinco meses en el cargo, marcados ya por la llegada a la cara oculta de la Luna de la sonda Chang?e-4, lanzada por la agencia espacial china, CNSA, y las primeras fotos de Ultima Thule, un objeto binario situado a 6.600 millones de kil¨®metros de nuestra planeta, captadas por New Horizons, la sonda de la NASA. Dos grandes acontecimientos que no solo subrayan la presencia china entre las grandes potencias de la nueva carrera espacial que se avecina. Sobre todo, marcan los retos del futuro. Desde una observaci¨®n m¨¢s ajustada de los agujeros negros, y la posibilidad de montar una estaci¨®n espacial lunar como trampol¨ªn para viajar a Marte, a la b¨²squeda de vida en otros planetas: la gran aventura c¨®smica.

Este domingo, Van Dishoeck, nacida en la localidad holandesa de Leiden hace 63 a?os, hablaba sentada junto a uno de los telescopios del Observatorio de Leiden, la ciudad holandesa en cuya universidad es profesora de Astrof¨ªsica Molecular. Durante el fin de semana, centros similares alrededor del mundo han organizado unas 750 visitas y coloquios en 87 pa¨ªses para conmemorar el siglo de vida de la UAI. El resto del a?o, habr¨¢ m¨¢s actividades en torno al lema ¡°Bajo un mismo cielo¡±, para mostrar c¨®mo ha cambiado nuestra visi¨®n y conocimientos del cosmos.

Pregunta. ?C¨®mo ha evolucionado la astronom¨ªa desde 1919, a?o de la fundaci¨®n de la UAI?

Respuesta. Hace cien a?os, ignor¨¢bamos cosas que hoy damos por hecho: c¨®mo brillan las estrellas, el tama?o o la estructura del Universo, o bien la existencia de otros planetas alrededor de estrellas como nuestro Sol. Hemos ganado en saber y tecnolog¨ªa, y ello ha repercutido en la sociedad y la ciencia en general. En 1995 encontramos el primer planeta extrasolar, o exoplaneta [bautizado 51 Pegasi b, porque orbita la estrella 51 Pegasi, en la constelaci¨®n de Pegaso, lo detectaron los astr¨®nomos suizos Michel Mayor y Didier Queloz]. Hoy sabemos que hay unos 4.000 de estos planetas, y que cada estrella tiene al menos uno en su ¨®rbita. Sabemos d¨®nde mirar, de modo que el siguiente reto es determinar la composici¨®n de sus atm¨®sferas y buscar signos de posible vida all¨ª. Esa exploraci¨®n en otros planetas ser¨¢ la tarea de la astronom¨ªa en el pr¨®ximo siglo.

P. Se ha especulado durante siglos acerca de la posibilidad de que haya vida ah¨ª fuera. ?Ha llegado por fin el momento de averiguarlo?

"Lo que esperamos no tiene nada que ver con los marcianitos verdes de la cultura popular. Pienso en formas de vida mucho m¨¢s simples, o tal vez algo m¨¢s complejo: que hayan logrado desarrollar ya inteligencia artificial en forma de robots. No sabemos"

R. Somos la primera generaci¨®n de seres humanos con la tecnolog¨ªa suficiente para abordar esta pregunta desde el punto de vista cient¨ªfico. Los astr¨®nomos, y la gente en general, han hecho muchas conjeturas sobre la existencia de vida en el Universo, y hacia esa b¨²squeda se orientan las grandes instalaciones en construcci¨®n. Por ejemplo, el Telescopio Extremadamente Grande (ELT en sus siglas en ingl¨¦s), en el desierto de Atacama, en Chile, que tendr¨¢ 39 metros de di¨¢metro. Propuesto por el Observatorio Europeo del Sur (ESO, tambi¨¦n en ingl¨¦s), nos permitir¨¢ medir el espectro de luz de los exoplanetas para deducir sus caracter¨ªsticas y buscar signos de vida.

P. ?Qu¨¦ esperan encontrar?

R. Hablamos de mol¨¦culas, otras especies, o bien una combinaci¨®n de especies que puedan se?alar la presencia de vida en otros planetas. Vida bacteriana unicelular, que es la que apareci¨® primero en la Tierra tras su formaci¨®n, aunque tard¨® millones de a?os. La multicelular cost¨® miles de millones de a?os. Desde luego, nada que ver con los marcianitos verdes de la cultura popular. Pienso en formas de vida mucho m¨¢s simples, o tal vez algo m¨¢s complejo: que hayan logrado desarrollar ya inteligencia artificial en forma de robots. No sabemos.

P. China ha llegado a la cara oculta de la Luna y ha revolucionado la astronom¨ªa. Tal vez se inaugure una nueva carrera espacial. ?Por qu¨¦ es tan importante haber aterrizado all¨ª, aparte del orgullo nacional de ser los primeros?

R. El a?o 2019 ha empezado a lo grande con la misi¨®n de exploraci¨®n china Chang'e 4. Sabemos poco de la parte no visible de la Luna. Por ejemplo, nunca hemos estudiado su composici¨®n, que parece ser distinta a la que s¨ª vemos, desde el punto de vista de los cr¨¢teres o sus piedras. No conozco los detalles, pero es interesante investigar, y desde la Uni¨®n Astron¨®mica Internacional hemos felicitado a China. Es bueno que desarrollen su programa espacial. Tambi¨¦n tienen el suyo Estados Unidos, Europa, con la Agencia Espacial Europea (ESA) o Jap¨®n. Por cierto, este a?o tambi¨¦n se conmemoran los 50 a?os de la llegada de la humanidad a la Luna (el Apolo 11, en 1969).

P. ?Le parece factible la construcci¨®n de una estaci¨®n espacial en la ¨®rbita de la Luna para facilitar un posible viaje a Marte?

R. Es un proyecto en consideraci¨®n. En Marte, indagamos su historia y la existencia de agua, y por ende, de vida. Puede que tuviera, como Venus, la misma cantidad de agua que la Tierra. Pero mientras el segundo planeta est¨¢ demasiado cerca del Sol, y al ser demasiado caliente, la perdi¨®, Marte es peque?o comparado con nosotros. No pudo contener su atm¨®sfera y su agua, as¨ª que se evapor¨®. Marte es importante no solo por ser los primeros en llegar.

P. Los agujeros negros son incluso m¨¢s populares que Marte. ?A qu¨¦ lo atribuye?

R. Siempre han sido un fen¨®meno estimulante. Se conoc¨ªan desde hace tiempo, pero tenemos m¨¢s datos. Sabemos que hay uno s¨²per grande en el centro de nuestra galaxia. Lo hemos visto gracias a los movimientos de las estrellas a su alrededor. Y tambi¨¦n por otros fen¨®menos energ¨¦ticos. Son importantes para estudiar la formaci¨®n de una galaxia. Hay agujeros negros supermasivos, con millones de veces la masa del Sol, y otros estelares, surgidos de la muerte o colapso de estrellas masivas. Y lo bueno es que podemos estudiar la fusi¨®n de algunos de ellos a trav¨¦s de las ondas gravitacionales [perturbaciones en el espacio-tiempo producidas por materia acelerada, transmitidas a la velocidad de la luz] que nos permiten abrir nuevos ojos hacia el Universo. NASA y ESA colaboran aqu¨ª.

"En la Uni¨®n Astron¨®mica hemos creado un grupo de trabajo para ver c¨®mo podemos atraer a m¨¢s mujeres, porque solo un 18% de nuestros miembros lo son"

P. Usted estudi¨® Qu¨ªmica, pas¨® luego a la Astronom¨ªa y ha recibido premios en Europa y Estados Unidos. ?Echa en falta una mayor presencia de mujeres astr¨®nomas?

R. En la Uni¨®n Astron¨®mica hemos creado un grupo de trabajo para ver c¨®mo podemos atraer a m¨¢s mujeres, porque solo un 18% de nuestros miembros lo son. Es verdad que para afiliarse hay que estar avanzado en la carrera, y que en la categor¨ªa junior hay m¨¢s mujeres. En la Universidad, son entre un 30 y un 40% del alumnado. Hay pa¨ªses, como Brasil y Argentina, donde hay muchas astr¨®nomas. En el sur de Europa suele haber m¨¢s que en el norte, y he o¨ªdo todo tipo de explicaciones. Incluida la tradici¨®n, antes mayor, desde luego, de los colegios segregados donde las ni?as parecen tener menos presi¨®n del grupo -con chicos- a la hora de estudiar ciencias. Lo importante es que vengan, y para finales de 2019 esperamos organizar un simposio en Jap¨®n sobre inclusi¨®n y diversidad en la astronom¨ªa.

P. Y el cine de ciencia-ficci¨®n. ?Es pura fantas¨ªa?

R. Hay pel¨ªculas, como Gravity (2013) e Interstellar (2014), que se acercan a las leyes de la f¨ªsica. Otras, como la franquicia de Star Trek, que me encanta, se toman grandes libertades. Eso del warp speed, una forma te¨®rica de propulsi¨®n a velocidades muy superiores a la de la luz, est¨¢ lejos de poderse lograr.