La batalla contra el abuso de antibi¨®ticos en los animales y plantas que comemos
Nos va la salud en ello. Urge eliminar el exceso y mal uso de estos medicamentos en personas, ganado y plantas para frenar la resistencia, una tarea compleja que exige el compromiso de Gobiernos, sector privado y sociedad civil
Como esos supervillanos que se crecen con la energ¨ªa del superh¨¦roe, los microbios aumentan su resistencia a los antibi¨®ticos y se hacen m¨¢s fuertes cuanto m¨¢s se usan. Es decir, cuantos m¨¢s se suministren a las personas, el ganado, las aves, los peces, las plantas o las mascotas, m¨¢s se ir¨¢ perdiendo el efecto deseado contra las infecciones o enfermedades, y m¨¢s vulnerable terminaremos siendo a las bacterias. Ahora, cerca de 700.000 personas mueren por ser resistentes a los antibi¨®ticos, y est¨¢ previsto que este fen¨®meno se cobre m¨¢s de 10 millones de vidas en 2050 y desbanque al c¨¢ncer como primera causa de muerte. ¡°Es un tema muy urgente en el que tenemos que actuar de la mano. Necesitamos asociarnos y necesitamos al sector privado. Y tambi¨¦n que la sociedad civil desempe?e un papel importante¡±, declar¨® Mar¨ªa Helena Semedo, directora adjunta de la Organizaci¨®n de la ONU para la Alimentaci¨®n y la Agricultura (FAO) durante el panel Recomendaciones del Grupo de Coordinaci¨®n de Resistencia Antimicrobiana (IACG) de la ONU, celebrado durante el consejo de la FAO en Roma.
¡°Hasta el momento, los antibi¨®ticos se han utilizado como cura y prevenci¨®n, pero tambi¨¦n hay que reducir su uso y abuso. Por ejemplo, con pr¨¢cticas de higiene¡±, ha planteado la directora adjunta, que ha insistido en dar con soluciones alternativas, viables y accesibles para toda la sociedad. "Tenemos que trabajar con innovaci¨®n, y en las vacunas, y en soluciones accesibles para todos. Si no, ser¨¢ una cuesti¨®n puntera para los cient¨ªficos, pero que no llegar¨¢ a todos", insisti¨®. "Hay que plantear un equilibrio entre el acceso a los antibi¨®ticos y el exceso de su uso. Y hay que invertir en ello con otras personas, con otros pa¨ªses, y que se cumplan sus planes de acci¨®n nacionales", pide Sally David, jefa de la oficina m¨¦dica en Inglaterra del IACG, que insta a retirar estimuladores de crecimiento para los animales e implantar "buenos" controles de prevenci¨®n de inyecciones.
Las palabras dif¨ªcil y complejo son las que m¨¢s se repiten en el panel. Cada acci¨®n tiene una repercusi¨®n. Por ejemplo, si se restringe el uso de antibi¨®ticos, los animales pueden enfermar, y perjudicar a la seguridad alimentaria y a los medios de vida de las familias. Y si un pa¨ªs legisla para que se limite su uso, y en cambio otro descontrola su disposici¨®n, puede a corto plazo perjudicar a unos y beneficiar a otros. Y si detr¨¢s est¨¢n las multinacionales y compa?¨ªas que venden los productos, con sus intereses econ¨®micos, y se hacen normas para regularlos, pueden disminuir sus ganancias... "No hay que dejar de usar los antibi¨®ticos, pero s¨ª hacerlo con moderaci¨®n. Y para eso hace falta formaci¨®n, educaci¨®n y ayudas", resume Phyllis Martha Klorkor Mends, representante de Ghana en la FAO.
Las recomendaciones las explican tambi¨¦n para las personas iletradas a trav¨¦s de representaciones teatrales
Cuenta que en su pa¨ªs se ha lanzado una plan nacional avalado con legislaci¨®n para alcanzar los objetivos sanitarios. Y que en el que participan distintos ministerios adem¨¢s de un equipo interministerial que trabaja en los Objetivos de Desarrollo Sostenible que supervisa que las medidas sean eficaces. "El ¨¦xito se basa en la buena gobernanza y en un liderazgo s¨®lido. Se han realizado formaciones para los miembros de una plataforma multisectorial para resistencia antimicrobiana y se ha capacitado a defensores locales que abogan por ello, con asociaciones y alianzas estrat¨¦gicas entre distintos actores", detalla. Esto significa que miembros de las comunidades de diferentes zonas del pa¨ªs han aprendido a gestionar los antibi¨®ticos y se lo explican en la lengua local a los ganaderos, pastores o granjeros.
"Hay quien abre una c¨¢psula de antibi¨®tico, la disuelve en el agua, la mueve un poco y ya todas las aves lo beben de ah¨ª. Pero hay que hacer ver que la que est¨¢ enferma se cura al principio, las dem¨¢s no lo necesitaban y si lo hacen as¨ª, la siguiente vez ya no funciona. Es como un abuso de drogas", se?ala Klorkor, que explica que tambi¨¦n tienen que aconsejar que los antibi¨®ticos que se compren sean de uso veterinario. "A veces compran los destinados a humanos porque pueden ser m¨¢s econ¨®micos". Cuenta que estas recomendaciones las explican tambi¨¦n para las personas iletradas a trav¨¦s de representaciones teatrales. "Para quien sabe leer puede valer un folleto, en mi pa¨ªs hay muchas lenguas locales, pero hay poblaci¨®n que no sabe leer, por eso es importante mostrarlo con gestos o dibujos", apunta como propuesta detallada la representante en Ghana.
Klorkor asegura que tambi¨¦n se han reforzado las infraestructuras de los laboratorios para aplicar las normativas, que los altos cargos de los hospitales han recibido formaci¨®n sobre antimicrobianos y que se han servido de la plataforma React ?frica para hacer talleres de sensibilizaci¨®n y para pedir asesoramiento prorfesional antes de empezar a utilizar los antibi¨®ticos. "Uno de los problemas encontrados en estos a?os han sido los procesos pol¨ªticos incompletos, por eso mantener el impulso es una cuesti¨®n necesaria. Tambi¨¦n necesitamos m¨¢s personal para formaciones", a?ade la experta, que detalla que se ha formado a los periodistas para evitar el sensacionalismo del tema en los medios de comunicaci¨®n y apunta que ha sido clave la participaci¨®n temprana de la sociedad civil.
¡°No hay que dejar de usar todos los antibi¨®ticos, pero s¨ª hacerlo con moderaci¨®n. Y para eso hace falta formaci¨®n, educaci¨®n y ayudas¡±,? resumen en la FAO
"Habr¨¢ que confiar en el poder de los consumidores, es la respuesta r¨¢pida. El camino es dif¨ªcil sin una soluci¨®n pol¨ªtica, pero es un proceso complejo. Requiere soluciones complicadas y que los pa¨ªses se respalden entre ellos, algunos lo har¨¢n, pero otros ser¨¢n m¨¢s resistentes", apunta Jens Mattson, director general del Instituto Nacional Veterinario de Suecia, un pa¨ªs que abandera esta lucha, que cuenta con una declaraci¨®n de la ONU aprobada en 2016 y con el trabajo del grupo de Grupo de Coordinaci¨®n de Resistencia Antimicrobiana (IACG), que trata los avances y desaf¨ªos de esta amenaza y que en la pr¨®xima asamblea general de la ONU deber¨¢ presentar un informe sobre el estado de la cuesti¨®n.
"Es necesaria la unidad, hay que tener una sola voz y una sola acci¨®n aunque participen distintos actores. En Indonesia contamos con un plan de acci¨®n nacional integral y multisector", insiste Gustav Daud Sirait, representante de la FAO en el pa¨ªs asi¨¢tico, que resalta tambi¨¦n la importancia de la sociedad civil. "Intentamos sensibilizar a estudiantes y profesores de facultades de Veterinaria en 11 universidades de Indonesia, que a trav¨¦s de un juramento tienen que dar protecci¨®n a los anumales y seres humanos", ejemplifica Sirait, que detalla que hay "cientos de ingredientes" como vacunas, probi¨®ticos o aceites esenciales que podr¨ªan sustituir los antibi¨®ticos como sustancias para hacer crecer a los animales. "Hay que exportar las posibilidades de progreso", concluye.
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