¡®Hecho en Latinoam¨¦rica¡¯, una marca de innovaci¨®n propia

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Am¨¦rica Latina y el Caribe lleva tiempo siendo un atractivo destino del venture capital o capital emprendedor, pero las ¨²ltimas cifras no dejan de llamar la atenci¨®n. La industria del capital emprendedor recibi¨® el a?o pasado cerca de 2.000 millones de d¨®lares distribuidos en 463 transacciones, casi el doble del 2018 y, adem¨¢s, en poco m¨¢s de un a?o ha visto c¨®mo se multiplicaba el n¨²mero de unicornios, esas compa?¨ªas m¨ªticas que alcanzan una valoraci¨®n de mercado superior a los 1.000 millones de d¨®lares. ?Qu¨¦ est¨¢ pasando?

Est¨¢ naciendo una marca de innovacion poco convencional y diferente de productos y servicios hechos en Am¨¦rica Latina y el Caribe; un Made in LAC que se abre camino gracias a la diversidad de su gente. ?Cu¨¢les son los secretos de su ¨¦xito? En primer lugar, el esp¨ªritu joven y emprendedor de sus habitantes, con una edad promedio de menos de 30 a?os, la actitud millennial de los latinoamericanos se hace evidente y con ella su receptividad a emplear las nuevas tecnolog¨ªas. El 60% de la poblaci¨®n utiliza tel¨¦fonos inteligentes y dos de cada tres personas disponen de acceso a internet, lo que representa m¨¢s del 10% de los usuarios globales. Este uso creciente de la tecnolog¨ªa es el segundo factor de su ¨¦xito. Se trata, adem¨¢s, de una regi¨®n que presenta grandes desaf¨ªos de acceso a la educaci¨®n, a la salud, a las finanzas, a una vivienda digna, al agua potable o que necesita un renovado impulso en sectores tan vitales como la miner¨ªa, la alimentaci¨®n, la agricultura, la energ¨ªa o el transporte. Y estos desaf¨ªos, que no son vistos como problemas sino como retos para resolver, son el tercer identificador de la marca Made in LAC.

A estos tres ingredientes se les une una gran dosis de frustraci¨®n por parte de los emprendedores, que son testigos de los desaf¨ªos de sus ciudades y comunidades. Una frustraci¨®n que los lleva a crear compa?¨ªas que ofrezcan posibilidades de acceso a una mejor educaci¨®n, a sistemas de salud y a financiamiento que democraticen de manera efectiva el acceso a servicios b¨¢sicos para todos los ciudadanos. Buscan crear nuevas maneras de fertilizar los campos y predecir los desastres naturales, de cuidar la limpieza de los oc¨¦anos, de proveer el acceso a micropr¨¦stamos a trabajadoras dom¨¦sticas, de mejorar la salud para todos, de usar la telemedicina para atender poblaciones rurales. Se trata de una marca de innovaci¨®n con una clara conciencia social y medioambiental y a estos nuevos emprendedores les interesa tanto ganar dinero como mejorar la vida de los dem¨¢s. Nadie est¨¢ mejor cualificado para encontrar una soluci¨®n que quien vive los problemas.

El escenario es prometedor, pero Am¨¦rica Latina y el Caribe sigue necesitando otro ingrediente establecerse como un polo innovador: la inclusi¨®n

El escenario es prometedor, pero Am¨¦rica Latina y el Caribe sigue necesitando otro ingrediente para que los ecosistemas de emprendimiento se consoliden y se pueda establecer como un polo innovador: la inclusi¨®n. En muchos pa¨ªses desarrollados a¨²n se ve el capital emprendedor como un club de hombres blancos y privilegiados lo que hace que la inclusi¨®n no sea un componente f¨¢cil de incorporar. Latinoam¨¦rica podr¨ªa liderar un nuevo paradigma donde la industria de capital emprendedor sea realmente un canal para la financiaci¨®n de ideas y compa?¨ªas j¨®venes, creadas por equipos diversificados, donde hombres y mujeres de toda condici¨®n social y econ¨®mica, de todas las edades y de geograf¨ªas diversas, aporten distintas visiones y fortalezas.

Seg¨²n diversos estudios realizados por consultoras como McKinsey, las compa?¨ªas que tienen equipos profesionales diversificados obtienen mayores retornos financieros y las empresas co-lideradas por mujeres tienen una visi¨®n m¨¢s hol¨ªstica a la hora de buscar no solo retornos financieros, sino tambi¨¦n sociales y medioambientales. Debemos lograr un mayor n¨²mero de emprendedoras que reciban rondas de inversi¨®n, que hagan crecer y vendan sus empresas, que vuelvan a emprender, que comiencen a invertir y a servir de mentoras para otras startups devolviendo a la comunidad parte de lo que ellas han ganado. Es el ciclo virtuoso del emprendimiento, algo muy poco frecuente a¨²n entre las empresarias de Am¨¦rica Latina y el Caribe.

Ese es prop¨®sito del WeXchange, el primer foro latinoamericano enfocado en conectar a mujeres emprendedoras de alto crecimiento con mentores e inversores. Creado en el a?o 2013 por el laboratorio de innovaci¨®n del Banco Interamericano de Desarrollo (BID Lab), celebrar¨¢ su s¨¦ptima edici¨®n en Paraguay en noviembre de este a?o. El prop¨®sito es continuar liberando el potencial de crecimiento de las mujeres emprendedoras de Am¨¦rica Latina y el Caribe. Como resultado de estos esfuerzos varios de los fondos de capital emprendedor de esta regi¨®n han situado un 30% de sus inversiones en compa?¨ªas fundadas por mujeres. Made in LAC ya tiene se?as propias de identidad y la inclusi¨®n est¨¢ camino de ser una de ellas.

Susana Garcia-Robles es jefa de Inversiones y Coordinadora de Iniciativas de G¨¦nero de BID Lab.