Tanatoturismo, la siniestra moda de viajar a destinos asociados a la muerte

De la misma forma que ocurri¨® con Zumaia y San Juan de Gaztelugatxe, los enclaves del Pa¨ªs Vasco que convirtieron en el escenario de Rocadrag¨®n en Juego de Tronos, Chern¨®bil vive un auge del turismo despu¨¦s del estreno de la serie Chernobyl en HBO, que cuenta la historia del accidente nuclear ocurrido all¨ª hace m¨¢s de 30 a?os. Actualmente, hay entre un 30% y un 40% m¨¢s de viajeros que antes de la emisi¨®n del primer cap¨ªtulo y se prev¨¦ que durante este a?o la cifra de turistas llegue a los 100.000, el doble que en 2017. Esto es solo un ejemplo de un tipo de turismo que est¨¢ en auge: el tanatoturismo o, lo que es lo mismo, la moda de viajar a lugares asociados a la muerte.

La prisi¨®n de Alcatraz, los campos de concentraci¨®n de Mauthausen, la cueva Tham Luang, donde quedaron doce ni?os tailandeses atrapados, o zonas donde se han cometido genocidios como Ruanda se han convertido en lugares cada vez m¨¢s frecuentes en el itinerario tur¨ªstico internacional. "Este es un fen¨®meno extremadamente complejo y heterog¨¦neo: las motivaciones de los turistas son muy diversas, como tambi¨¦n los destinos y las actividades ofertadas", explica Daniel Liviano, profesor de los Estudios de Econom¨ªa y Empresa de la Universidad Oberta de Catalunya (UOC).

Pero, ?qu¨¦ lleva a alguien a sentirse atra¨ªdo hacia este tipo de localizaciones? Los motivos pueden ser diversos, afirma Liviano: "Hay quienes sienten el viaje como una motivaci¨®n moral o espiritual y adoptan una actitud de peregrinaci¨®n secular. Otros turistas simplemente visitan estos lugares con un deseo o una necesidad de contactar simb¨®lica y emocionalmente con la muerte. Y tambi¨¦n quienes desean aprender viajando".?

El morbo tambi¨¦n juega su papel. Algunas personas sienten fascinaci¨®n, contin¨²a Liviano, y "llegan a sentir lo que en alem¨¢n se denomina schadenfreude, que es el regodeo o el sentimiento de alegr¨ªa o satisfacci¨®n generado por el sufrimiento, la infelicidad o la humillaci¨®n de otro. En el ¨¢mbito psicol¨®gico es una emoci¨®n muy compleja, relacionada con el sadismo, y uno de sus componentes es el deseo de justicia. Esto explica la actitud de algunas personas que visitan un lugar para celebrar, in situ, que las v¨ªctimas han recibido un justo castigo por la raz¨®n que sea". Esto explica, por ejemplo, atracciones como Helter Skelter en Estados Unidos, un tour por los lugares donde la familia Manson cometi¨® sus cr¨ªmenes.

Viajes de dudosa moralidad

Existe, sin embargo, un ¨²ltimo tipo de turista que acude a estos lugares de vacaciones y es probablemente el caso de Chern¨®bil: que el sitio se pone de moda. Seg¨²n apuntan desde la UOC, "la industria tur¨ªstica ha encontrado en este tipo de turismo un pozo sin fondo de posibilidades". El problema surge cuando pensamos en cu¨¢n ¨¦ticos son realmente este tipo de viajes. Y la respuesta en algunas ocasiones parece ser muy poco. No son de extra?ar las duras cr¨ªticas que han recibido ciertos viajeros tras hacerse selfies en lugares como el campo de concentraci¨®n de Auschwitz.

"Este tipo de comportamiento, que va ligado a las modas y la atracci¨®n que ejercen determinados lugares porque est¨¢n de moda, no suele estar guiado por valores o c¨®digos ¨¦ticos y morales, sino por c¨¢lculo instrumental, y los intereses y las emociones personales", explica Francesc N¨²?ez, soci¨®logo y profesor de los Estudios de Humanidades de la UOC. Y concluye: "Todos, agencias de viajes, ciudades o gobiernos, todos sacan provecho aunque sea desde el horizonte del sufrimiento de muchos".