Dior saca a la moda de excursi¨®n

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A la moda le gusta proclamar que sus dise?os responden al estado del mundo. En consecuencia, los pron¨®sticos apuntaban a un ¨¦nfasis particular por las cuestiones medioambientales de cara a la semana dedicada a la presentaci¨®n de las colecciones de pr¨ºt-¨¤-porter para la pr¨®xima primavera-verano que arranc¨® ayer en Par¨ªs. Que Dior hiciera construir un jard¨ªn bot¨¢nico a medida en las afueras de la capital francesa para presentar su nueva propuesta no hizo m¨¢s que confirmarlo. La dise?adora de la firma, Maria Grazia Chiuri, hizo circular a varias decenas de modelos que representaban modelos de feminidad muy distintos, aunque todos en perfecta comuni¨®n con la naturaleza. Hab¨ªa excursionistas salidas de Sonrisas y l¨¢grimas, turistas ecorresponsables que parec¨ªan dirigirse a una playa salvaje y damas l¨¢nguidas a las que cab¨ªa imaginar paseando por una exclusiva duna.?

Chiuri propuso un uniforme distinto para cada una de ellas. Empez¨® con prendas inspiradas en el lederhosen de b¨¢varos y austriacos, ese pantal¨®n corto con tirante cruzado posterior que present¨® en versi¨®n estilizada, mezclada con azules cer¨²leos y un uso abundante de materiales naturales como la fibra de rafia. Sus mujeres ba?istas vest¨ªan, en cambio, tops de croch¨¦ y t¨²nicas manchadas de un tie-dye m¨¢s bien discreto, adem¨¢s de sombreros de estilo bob como los que populariz¨® el fundador de la marca en tiempos del New Look. Hacia el final, Chiuri introdujo t¨²nicas bordadas con motivos que parec¨ªan salidos de un manual de bot¨¢nica o de la vitrina de un museo de historia natural. Desde la primera fila, las observaban actrices susceptibles de lucirlas, como Jennifer Lawrence, Julianne Moore o Isabelle Huppert.?

Su m¨¢xima inspiraci¨®n para la colecci¨®n fue Catherine Dior, hermana del fundador de la hist¨®rica firma francesa, detenida durante la Segunda Guerra Mundial por haber formado parte de la Resistencia. Al regresar del campo femenino de Ravensbr¨¹ck en 1945, la hermana de Dior dedic¨® el resto de su vida a su aut¨¦ntica pasi¨®n, la jardiner¨ªa. Chiuri la adopt¨® este martes como ejemplo a seguir. Cuidar su jard¨ªn es cuidarse a uno mismo. Y a nadie se le escap¨® que este bosque provisional, dise?ado por el colectivo de paisajistas Coloco, a quienes Chiuri descubri¨® en una bienal de arte contempor¨¢neo en Sicilia, era una met¨¢fora del propio planeta, Todav¨ªa m¨¢s trat¨¢ndose de una presentaci¨®n que hizo referencias expl¨ªcitas a la noci¨®n de antropoceno, tan en boga en el debate cultural.?

Como es habitual, el m¨¦todo de trabajo de Chiuri consiste en acumular, con mayor o menor suerte, un sinf¨ªn de referencias te¨®ricas, de las que parece emanar su creaci¨®n textil. En este caso, la dise?adora no se perdi¨® en laberintos conceptuales y us¨® referencias m¨¢s inteligibles. Por ejemplo, la experiencia del Monte Verit¨¤, una comunidad de artistas y pensadores que, a comienzos del siglo XX, se reunieron en una colina sobre el Lago Mayor con la misi¨®n de alternar pensamiento y contacto con la naturaleza. Entre ellos figuraban nombres como el psicoanalista Carl Jung, el pintor Paul Klee o la bailarina Isadora Duncan.?

La colecci¨®n marc¨® una ruptura relativa respecto a la l¨ªnea adoptada por Chiuri desde que fue nombrada para estar al frente de la marca francesa en 2016. Se despoj¨® de sus referencias a la silueta de bailarina, procedentes de su etapa en Valentino. Y no hubo camisetas con esl¨®ganes feministas, propuesta repetida hasta la saciedad. Pese a todo, una frase presid¨ªa las notas del desfile: ¡°Debemos pensar. Pensar debemos¡±. La escribi¨® Virginia Woolf en Tres guineas, destin¨¢ndola a las mujeres de su tiempo. ¡°Todas las ideas modernas del feminismo hablan de los humanos y de la naturaleza. Y re¨²nen, de nuevo, esos dos mundos¡±, precis¨® la dise?adora a la revista Vogue. La era del feminismo en Dior ha terminado. La del ecofeminismo acaba de comenzar.

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J¨®venes talentos y estrenos ilustres

La otra protagonista de la jornada fue la prometedora Marine Serre, que tambi¨¦n centr¨® su propuesta en la cuesti¨®n medioambiental. La dise?adora francesa, de 27 a?os, present¨® una colecci¨®n, bautizada Marea negra, formada por prendas pensadas para el final de los tiempos, que parec¨ªan salidas del armario de un survivalista. La present¨® en un hip¨®dromo parisino, bajo la lluvia y con los invitados resguard¨¢ndose bajo grandes paraguas de un negro estricto, en un dram¨¢tico vaticinio de lo que parece avecinarse. A Serre se le sumaron ayer otras marcas ascendentes como Rokh, Y/Project o Koch¨¦.
La Semana de la Moda parisina tambi¨¦n estar¨¢ marcada por el debut en el pr¨ºt-¨¤-porter de Virginie Viard, nueva dise?adora de Chanel tras la muerte de Karl Lagerfeld en febrero. Stella McCartney se estrenar¨¢ bajo el paraguas del grupo LVMH, tras haber roto con su eterno rival, Kering, el otro gran conglomerado del lujo franc¨¦s, igual que Guillaume Henry, que dej¨® Nina Ricci para resucitar la marca hist¨®rica Poiret. En cambio, no desfilar¨¢ Kenzo, en plena transici¨®n de liderazgo tras la despedida de Carol Lim y Humberto Leon, ni tampoco Sonia Rykiel, cuya marca se ha declarado en quiebra.?Tampoco estar¨¢ la influyente Vetements ni otro joven prodigio como Jacquemus, que adelant¨® su desfile al mes de junio en la Provenza para celebrar el 10? aniversario de su marca.