La leche materna regula el reloj interno del beb¨¦

Sabemos que la leche materna es mucho m¨¢s que un alimento. Nos lo han contado ¨Cla ciencia¨C o lo hemos experimentado. Porque la lactancia, adem¨¢s de satisfacer las necesidades nutricionales del beb¨¦ o ni?o (la leche materna cambia su composici¨®n para adaptarse a los requerimientos en funci¨®n de la edad), influye tambi¨¦n en el desarrollo intelectual y f¨ªsico, fortalece el v¨ªnculo entre madre e hijo o hija y es un canal extraordinario de comunicaci¨®n. Tambi¨¦n es un poderoso medio de "crononutrici¨®n", ya que la leche materna puede informar al beb¨¦ de la hora del d¨ªa en funci¨®n de su composici¨®n (ya que tambi¨¦n cambia con los ritmos circadianos de la madre). Lo que un estudio ¨Celaborado por investigadoras estadounidenses, y que fue publicado el pasado mes de marzo en Nature research¨C plantea es c¨®mo afecta esa ¡°crononutrici¨®n¡± a la salud y al desarrollo infantil. Y aparece una cuesti¨®n que hasta ahora no ha sido abordada: si la leche materna sirve como medida de tiempo, ?qu¨¦ ocurre cuando los beb¨¦s reciben en diferido leche materna que ha sido extra¨ªda en otro momento del d¨ªa?

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Seg¨²n explica Leonardo Landa-Rivera, pediatra, y cofundador de APILAM, el cambio en la composici¨®n de la leche materna durante el d¨ªa, e incluso durante la misma toma, es un hecho ampliamente conocido: ¡°Los investigadores han demostrado la existencia en la leche humana de sustancias bioactivas o moduladores, con influencia en la maduraci¨®n y funcionamiento de sistemas importantes tanto digestivo como neurol¨®gico e inmunol¨®gico¡±. Sobre la relaci¨®n que existe entre lactancia materna y sue?o infantil con relaci¨®n a dichas sustancias, Marta Moraleda-Cibri¨¢n, miembro del grupo de trabajo de Pediatr¨ªa de la Sociedad Espa?ola del Sue?o (SES) y experta en Sue?o Materno-infantil en la Cl¨ªnica Corachan (Barcelona), manifiesta que la variaci¨®n en la composici¨®n de la lactancia materna a lo largo del d¨ªa tiene efectos beneficiosos en el descanso nocturno, tanto de la madre como del beb¨¦. ¡°Durante el d¨ªa la leche materna es rica en cortisol y otros amino¨¢cidos promotores de la vigilia, durante la noche la composici¨®n cambia y pasa a ser rica en sustancias promotoras del sue?o como la melatonina¡±, explica.

Reconoce Moraleda-Cibri¨¢n que aunque existen pocos art¨ªculos publicados ¨Ca¨²n¨C al respecto, es fundamental destacar el estudio de Helena Illnerova, quien en 1993 ya demostr¨® en un peque?o estudio realizado en 10 mujeres que los niveles de melatonina, la hormona promotora del sue?o, variaban entre el d¨ªa y la noche, tanto a nivel sangu¨ªneo como en la leche materna.

Investigaciones recientes, como la se?alada m¨¢s arriba, sugieren que la composici¨®n de la leche materna tambi¨¦n cambia en sincron¨ªa con los ritmos circadianos de la madre, lo que est¨¢ relacionado con el desarrollo neurol¨®gico y el patr¨®n de sue?o de los beb¨¦s y ni?os amamantados. Seg¨²n Jennifer Hahn-Holbrook, psic¨®loga e investigadora principal del mencionado estudio, esto ocurre porque ¡°la biolog¨ªa circadiana controla funciones b¨¢sicas como digerir los alimentos, crecer, dormir y jugar¡±, por lo que el cuerpo del beb¨¦ debe aprender en los primeros meses c¨®mo adaptarse a los ritmos (cu¨¢ndo dormir vs. cu¨¢ndo estar despierto y comer). ¡°Los beb¨¦s que est¨¢n enfermos en las unidades de cuidados intensivos, y que no est¨¢n expuestos a patrones regulares de luz y oscuridad, por ejemplo, no crecen, ni duermen ni comen igual, y est¨¢n enfermos m¨¢s tiempo. Presumiblemente, porque sus cuerpos no pueden organizar su comportamiento y biolog¨ªa de manera eficiente durante el d¨ªa¡±, apunta.

Lactancia en diferido que no coincide que los ritmos circadianos

Ning¨²n estudio ha investigado todav¨ªa c¨®mo los patrones de sue?o de la madre pueden afectar a la leche materna. Sin embargo, seg¨²n Jennifer Hahn-Holbrook, ¡°dado lo que sabemos sobre c¨®mo las hormonas reguladoras circadianas como el cortisol entran en la leche, es muy posible que las madres que han desregulado la biolog¨ªa circadiana (por insomnio, turno de noche, etc.) tengan leche con patrones circadianos at¨ªpicos¡±. Esto, para la experta, puede no ser algo negativo, ¡°ya que podr¨ªa ser importante que los patrones circadianos de la madre y el beb¨¦ est¨¦n sincronizados, incluso si los patrones de las madres son inusuales. Esta es un ¨¢rea realmente importante para futuras investigaciones¡±.

Si bien lo deseable es que la madre amamante al beb¨¦, ?qu¨¦ ocurre cuando la lactancia materna es en diferido? ¡°Esta es la pregunta del mill¨®n y por qu¨¦ escribimos el art¨ªculo, porque la respuesta es: no lo sabemos¡±, responde Hahn-Holbrook. La psic¨®loga incide en que no han encontrado ning¨²n estudio que analice c¨®mo afecta al comportamiento y a la salud de los beb¨¦s que la leche materna no coincida con los ritmos circadianos. ¡°Esperamos que hacer llegar esta pregunta inspire a los investigadores a evaluar si la leche ajustada al ritmo circadiano tiene beneficios para los beb¨¦s¡±, a?ade. Una buena idea para la experta es la de etiquetar la leche materna en funci¨®n del momento del d¨ªa en el que ha sido extra¨ªda, de forma que la leche materna pueda ajustarse a los ritmos del beb¨¦. Sobre este asunto Marta Moraleda-Cibri¨¢n remite a un art¨ªculo publicado este a?o en el que se confirma que los niveles de melatonina en leche materna se mantienen estables tras descongelarla durante un per¨ªodo comprendido entre las 4 y las 24 horas. Es por ello por lo que recomienda la extracci¨®n de leche materna en los casos que sea necesario y, al igual que Hahn-Holbrook, la clasificaci¨®n de la misma en funci¨®n de la hora de extracci¨®n, ya que esto ¡°podr¨ªa ser un buen promotor del sue?o en el beb¨¦¡±.

Para Leonardo Landa-Rivera, la idea de que el ritmo circadiano de la madre pueda influir en la composici¨®n c¨ªclica de la leche es muy plausible pero advierte que si esto supone cambios importantes en el comportamiento de los beb¨¦s con relaci¨®n al llamado ¡°c¨®lico del lactante¡± o las fases de sue?o, est¨¢ por ver. ¡°Por ahora sabemos que ambos comportamientos tienen que ver con los espacios de seguridad identificados por el beb¨¦ durante esos per¨ªodos de desajuste emocional, tal como ocurre en sociedades primitivas en los que el beb¨¦ permanece al lado de la madre¡±, explica el cofundador de APILAM, e insiste en que ¡°la asignatura pendiente de las sociedades industrializadas es la priorizaci¨®n de la ni?ez, implantando pol¨ªticas de protecci¨®n familiar que permita a las madres dedicar a sus hijos el tiempo que sea necesario¡±.