A m¨ª no me da verg¨¹enza volar
La aviaci¨®n produce el 2,5% de las emisiones totales del C02. Sin embargo, est¨¢ en el ojo del hurac¨¢n como el gran sat¨¢n de la contaminaci¨®n. Entre dejar de volar y forzar a la industria a hacer aparatos y combustibles m¨¢s eficientes me quedo con la opci¨®n m¨¢s realista
¡°Mi viaje es un mensaje¡±, declar¨® Greta Thunberg al llegar a Lisboa tras cruzar el Atl¨¢ntico a bordo de un catamar¨¢n, camino de la cumbre del clima COP 25. Y no puedo estar m¨¢s de acuerdo con ella. Era un mensaje claro. Solo que transmit¨ªa justo lo contrario de lo que quer¨ªa demostrar.
Si para viajar de Los ?ngeles a Madrid sin contaminar necesitas 36 d¨ªas, 21 de ellos a bordo de un catamar¨¢n de medio mill¨®n de euros, el mensaje es que hoy por hoy no hay alternativa al avi¨®n. Le pese a quien le pese.
Adelanto que esto no es un post anti-Greta. Nada m¨¢s lejos de mi intenci¨®n. Admiro a la joven sueca y creo necesaria su figura como icono de la lucha contra el cambio clim¨¢tico. Pero si queremos abordar el problema debe ser desde posiciones realistas y con soluciones factibles, no con soflamas que quedan muy bien en las manifas pero luego son inviables. No todo el mundo tiene un amigo rico con un barco de vela ni 21 d¨ªas para cruzar un oc¨¦ano.
?Un mundo sin aviones? No estoy de acuerdo en absoluto. Adem¨¢s de un colapso social y econ¨®mico de tama?o planetario. Es como si para evitar que los coches contaminen, prohibimos la rueda. Me siento tan comprometido como el que m¨¢s a reducir mis emisiones y evitar m¨¢s da?os al planeta, pero la soluci¨®n no puede ser volver al siglo XIX. La presi¨®n popular, nuestras peque?as acciones individuales suman, sin lugar a dudas, pero solo ser¨¢n efectivas si adem¨¢s van encaminadas a concienciar y forzar a la industria a fabricar aviones m¨¢s eficientes, a combustibles m¨¢s ecol¨®gicos. No a dejar de volar. Yo no tomo un avi¨®n para trayectos que pueda hacer en tren. Pero es que el mundo es m¨¢s grande que eso. Y no pienso renunciar a verlo.
Flygskam, el movimiento sueco que pregona la verg¨¹enza a volar me parece muy digno. Pero no deja de ser un privilegio de gentes pudientes y con suerte que vivimos en un lado del mundo en el que hay trenes buenos, r¨¢pidos y el¨¦ctricos. Dile t¨² a un indio que necesita ir por negocios o temas familiares de Calcuta a Bombay que se monte en un atestado tren durante d¨ªa y medio mientras que en avi¨®n son menos de tres horas. O a un africano, que no tiene ni trenes.
?Con qu¨¦ cara le piden los mandatarios que han asistido a la COP25 a un mortal currante que bastante tiene con llegar a final de mes que no se vaya de vacaciones para no contaminar cuando ellos han venido en avi¨®n ¡ªmuchos en Business¡ª, se han movido en coches de combusti¨®n, han contaminado lo que han querido¡ ?y han tenido la desfachatez de irse sin tomar medidas contundentes para atajar las emisiones de CO2!?
Puedo invertir cuatro horas en hacer una compra responsable buscando alimentos no envasado en pl¨¢stico. Pero, ?no ser¨ªa m¨¢s ¨²til una ley que proh¨ªba esa deleznable pr¨¢ctica de los supermercados que envuelven cada pieza de jam¨®n en pl¨¢stico retr¨¢ctil, la retiran y desechan para cortarme 100 gramos en lonchas, me las envuelven en pl¨¢stico y luego vuelven a poner otro retr¨¢ctil sobre la pieza¡ hasta que llegue otro cliente y repitan la operaci¨®n?
No soy negacionista del cambio clim¨¢tico y los que me segu¨ªs sab¨¦is que lucho contra quienes lo son. Y aunque los talibanes de turno se me tirar¨¢n a deg¨¹ello, creo en las peque?as acciones personales que contribuyan a reducir nuestro impacto (desde el reciclaje a las compras de proximidad o el uso del tren donde sea posible).
Pero hay que hacer grandes cambios estructurales, solo con heroicidades de la gente no vamos muy lejos, es ingenuo pensar que as¨ª salvaremos el planeta. Mientras los poderes p¨²blicos no impongan medidas concretas y efectivas, el resto son gotas en el mar.
La presi¨®n social ya est¨¢ haciendo mella en el sector aeron¨¢utico. La estrategia propuesta por la Comisi¨®n Europea para 2050 a trav¨¦s del proyecto Clean Sky 2 pretende que el 40% del combustible empleado en aviaci¨®n sea bajo en emisiones de di¨®xido de carbono. Seg¨²n Airlines for Europe, el lobby que agrupa a las grandes aerol¨ªneas europeas, desde 1990 cada nueva generaci¨®n de aviones ha reducido un 20% las emisiones de la anterior. Un moderno A350 consume un 38% menos que los m¨ªticos Boeing 747. El nuevo Airbus 220-300 (una remodelaci¨®n de los Bombardier C Series canadienses) consume el 20% menos que aviones similares de pasillo ¨²nico de generaciones anteriores. El grupo IAG (al que pertenece Iberia) anunci¨® en octubre una inversi¨®n de 27.000 millones de d¨®lares para modernizar su flota con aviones menos contaminantes y de otros 400 millones en investigaci¨®n de nuevos combustibles a fin de lograr las emisiones cero en 2050.
?Por aqu¨ª pueden llegar las soluciones. No por la entelequia de dejar de volar.
?Concienciado?, s¨ª ?Avergonzado por volar?, en absoluto. Aunque seguir¨¦ luchando para que haya aviones cada vez m¨¢s eficientes y combustibles m¨¢s limpios.
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