C¨®mo elevar la escala de la infraestructura sostenible

Probablemente, el cambio clim¨¢tico sea el reto mundial m¨¢s urgente de la actualidad, y no lo estamos afrontado lo suficientemente r¨¢pido. El acuerdo clim¨¢tico de Par¨ªs de 2015 apunta a mantener el aumento de la temperatura global bien por debajo de los dos grados sobre los niveles preindustriales. Sin embargo, incluso considerando los compromisos actuales de los gobiernos nacionales para reducir las emisiones de gases de invernadero, el calentamiento global est¨¢ en v¨ªas de superar los tres grados para fines de este siglo. Para evitarlo, debemos actuar m¨¢s r¨¢pido, a una escala mayor y de manera m¨¢s disruptiva, particularmente en el desarrollo y la financiaci¨®n de proyectos de infraestructura sostenibles.

Las obras de transporte, energ¨ªa, telecomunicaciones, aguas y edificaciones representan casi el 70% de las emisiones globales. M¨¢s todav¨ªa, a medida que los pa¨ªses de ingresos bajos y medios impulsen el crecimiento demogr¨¢fico y la urbanizaci¨®n, representar¨¢n la mayor parte de la duplicaci¨®n que se espera de los recursos de infraestructura para el a?o 2050, principalmente mediante proyectos desde cero. Si hemos de evitar un catastr¨®fico cambio clim¨¢tico, debemos desarrollar iniciativas nuevas y sostenibles a escala, al tiempo que desmantelamos o reacondicionamos las antiguas.

Sin embargo, hasta ahora este objetivo ha sido obviado. La cantidad de proyectos de infraestructura sostenibles y financiables por v¨ªa bancaria ha sido inadecuada e insuficiente, en particular en los pa¨ªses de ingresos bajos y medios. Y el financiamiento adem¨¢s ha sido lento en concretarse, especialmente desde el sector privado.

La OCDE ha estimado que se necesita una inversi¨®n para infraestructura de cerca de 6.300 millones de d¨®lares al a?o entre 2016 y 2030, y cerca de un 10% adicional para alcanzar una temperatura por debajo de los dos grados. Pero la inversi¨®n mundial en infraestructura en 2018 fue de entre 3.400 y 4.400 millones, dependiendo de los indicadores de medici¨®n utilizados. Eso representa una carencia anual de entre 2.500 y 3.500 millones, de los cuales cerca de dos tercios est¨¢n en pa¨ªses de ingresos bajos y medios.

Si bien las econom¨ªas avanzadas por lo general cuentan con marcos normativos bien establecidos y un financiamiento f¨¢cilmente disponible para proyectos sostenibles, la mayor parte de las econom¨ªas en desarrollo afrontan importantes desaf¨ªos. Puesto a que se trata de proyectos complejos y de largo plazo, con periodos de repago que a menudo superan los diez a?os, los inversionistas privados tienden a evitarlos, inhibidos por los riesgos regulatorios y los cambios de pol¨ªticas. Hasta ahora, la infraestructura sostenible se ha financiado mayormente a trav¨¦s de bancos de desarrollo multilaterales y nacionales (BDM y BDN). En consecuencia, la entrada de capitales privados ser¨¢ clave para cerrar la brecha de inversi¨®n.

Las obras de transporte, energ¨ªa, telecomunicaciones, aguas y edificaciones representan casi el 70% de las emisiones globales

Para ayudar, proponemos un nuevo marco hol¨ªstico desarrollado por el Grupo de Trabajo One Planet Lab sobre Infraestructura Sostenible, del cual uno de nosotros (D¨¦s¨¦glise) es miembro. Este marco, llamado Visi¨®n para una Transici¨®n Responsable con el Medio Ambiente ¨C Infraestructura, apunta a ayudar a desbloquear la l¨ªnea de obras responsables como una clase de activos, abriendo con ello las puertas a inversiones de gran escala por parte de inversionistas institucionales en todo el mundo.

VERT-Infra cubre inicialmente cuatro subsectores de infraestructura sostenible: energ¨ªa, almacenamiento, transporte y construcci¨®n de edificaciones, con especial ¨¦nfasis en proyectos en ¨¢reas urbanas. Pero el marco se puede ampliar para abarcar la vasta mayor¨ªa de los 6.900 millones en inversiones que se necesitan cada a?o.

Aprovechando el marco de gobernanza sobre el que se bas¨® el mercado de los bonos verdes, la iniciativa de One Planet Lab recomienda integrar una amplia gama de accionistas en una ¨¢gil organizaci¨®n basada en miembros. Entre ellas se deber¨ªan encontrar organizaciones activas en inversiones de infraestructura y ayuda para el desarrollo, as¨ª como gobiernos, BDM, instituciones financieras, propietarios y gerentes de activos, ONG y universidades.

Para dar respuesta a los desaf¨ªos que aparecen a lo largo del ciclo de vida de los proyectos de infraestructura sostenibles, VERT-Infra se centra en cuatro componentes que se complementan y refuerzan entre s¨ª, cubriendo tanto mecanismos de financiamiento como de generaci¨®n de capacidades, lo que es especialmente relevante para el desarrollo de proyectos desde cero en pa¨ªses de ingresos bajos y medios.

Para comenzar, los fondos de preparaci¨®n de proyectos ¡ªcapitalizados por donantes, BDM, fondos de intermediaci¨®n financiera y organizaciones filantr¨®picas¡ª proveer¨ªan la asistencia t¨¦cnica para apoyar la generaci¨®n de proyectos de infraestructura sostenible que puedan ser financiados por bancos. Los centros de financiaci¨®n proporcionar¨ªan fondos de bajos costes a BDN e instituciones locales que carezcan de acceso regular a los mercados de capitales internacionales. A su vez, estas instituciones prestar¨ªan entonces los fondos a proyectos de infraestructura sostenible (t¨ªpicamente nuevos).

Para complementar estas facilidades y cubrir la refinanciaci¨®n de los proyectos existentes, los fondos adquirir¨ªan o participar¨ªan en cr¨¦ditos para activos en funcionamiento que ya hayan sido financiados por bancos de desarrollo regionales, BDN e instituciones locales, lo que liberar¨ªa capitales para inversiones nuevas y adicionales.

Finalmente, VERT-Infra colaborar¨ªa en asociaci¨®n con otras iniciativas que se centren en desarrollar pol¨ªticas y planificaci¨®n. Estos apoyar¨ªan la generaci¨®n de capacidades de m¨¢s largo plazo que ayuden a los pa¨ªses de ingresos bajos y medios a planificar y entregar infraestructura sostenible, adem¨¢s de fortalecer marcos de pol¨ªticas y gobernanza vitales, en l¨ªnea con las pol¨ªticas determinadas a nivel nacional.

Proponemos dos ramas de acci¨®n coordinadas: la primera, generar marcos de pol¨ªticas para canalizar prestamente capitales hacia obras de infraestructura sostenible y, la segunda, reunir a actores interesados clave para movilizar fondos. Entre ellos deber¨ªan encontrarse instituciones financieras para el desarrollo, BDM y BDN, instituciones financieras privadas, inversionistas institucionales e innovadores de las finanzas digitales.

Por supuesto, no todos los proyectos de infraestructura ofrecen oportunidades comerciales. Pero el car¨¢cter inclusivo y de fuente abierta de VERT-Infra, como se refleja en su modelo de gobernanza, deber¨ªa favorecer el surgimiento de mecanismos escalables y estandarizados que permitan a los mercados financieros apoyar con mayor solidez la infraestructura sostenible.

La transici¨®n mundial a una econom¨ªa de bajo consumo de carbono que est¨¦ en l¨ªnea con los objetivos del acuerdo de Par¨ªs se enfrenta a importantes vientos en contra, y se necesitan con urgencia medidas m¨¢s audaces para evitar los inaceptables riesgos que conlleva el calentamiento global. Al abordar los actuales cuellos de botella en el desarrollo y la financiaci¨®n de infraestructura sostenible, el marco VERT-Infra puede ayudar a transformar un sector clave y elevar la escala de la lucha mundial contra el cambio clim¨¢tico.

Christian D¨¦s¨¦glise, patrocinador Global de Finanzas Sostenibles y jefe global de Bancos Centrales en HSBC, es profesor adjunto en la Escuela de Asuntos Internacionales y P¨²blicos de la Universidad de Columbia y miembro de One Planet Lab. Delfina L¨®pez Freijido, jefa del Departamento de Finanzas Sostenibles de la Divisi¨®n Financiera del Banco de la Naci¨®n Argentina, dirigi¨® la Agenda de finanzas sostenibles del G20 durante la presidencia de Argentina en 2018.?

Traducido del ingl¨¦s por David Mel¨¦ndez Tormen. Copyright: Project Syndicate, 2019. www.project-syndicate.org

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