Tres maneras de practicar sexo a distancia durante la cuarentena
Mantener relaciones sexuales en pleno aislamiento supone un gran reto para la intimidad, pero solo un peque?o desaf¨ªo para las nuevas tecnolog¨ªas
Vivir en cuarentena es un reto formidable. Uno aprende cosas tan dispares como abrir las puertas con los codos y montar un colegio en casa sin mermar demasiado la productividad laboral (en el caso de que, afortunadamente, pueda teletrabajar). La experiencia te ense?a la diferencia entre el jab¨®n y el hidroalcohol, y c¨®mo relacionarte a un metro de distancia de los dem¨¢s. El aislamiento se hace llevadero durante las primeras horas, tras un par de noches solo es tolerable, y se convierte en un asunto cr¨ªtico cuando uno se da cuenta de que le falta algo importante, un pilar de la existencia que no puede poner en la lista de la compra y que no aparece en ning¨²n protocolo de aislamiento. ?Qu¨¦ pasa ahora con el sexo?
Lo cierto es que no es un buen momento para las relaciones sexuales, para qu¨¦ negarlo. Pero tambi¨¦n es verdad que no hay por qu¨¦ condenar el sexo a pasar una cuarentena. Es m¨¢s, quienes se han quedado separados de sus parejas pueden afrontar esta crisis como una oportunidad. Al menos es lo que dicen las expertas en sexolog¨ªa, que aconsejan probar y explorar nuevas herramientas para conectar y salir de nuestra zona de confort. ?Por qu¨¦ negarles una oportunidad? Si el teletrabajo funciona, ?por qu¨¦ no iba a hacerlo el telesexo?
Una excusa para redimir el 'sexting', pero con precauciones
Hacer sexting es una costumbre muy criticada, pero en estos momentos no vale la pena andarse con remilgos a la hora de compartir textos, im¨¢genes y v¨ªdeos subidos de tono. Siempre que se haga entre adultos y sea una pr¨¢ctica consentida, el intercambio de archivos calientes no tiene por qu¨¦ ser problem¨¢tico. Eso s¨ª, hay que tomar ciertas medidas de protecci¨®n para asegurarnos de que no nos llevaremos un disgusto en el futuro.
La sex¨®loga Ana Lombard¨ªa recuerda que "para practicar 'sexting' de forma segura es importante que lo hagamos de manera que no se nos reconozca". Nunca se sabe d¨®nde pueden acabar las im¨¢genes, y la crueldad de Internet no tiene l¨ªmites. Pero preservar la identidad es tan sencillo como "no dejar que nuestra cara aparezca en las fotos o v¨ªdeos". Tambi¨¦n "debemos evitar que aparezcan cosas con las que se nos pueda reconocer, como parte de nuestra casa o de nuestro cuerpo que sean especialmente significativas", como un tatuaje.
La idea no puede ser m¨¢s tentadora, pues cuando la pornograf¨ªa retrata el deseo de una persona cercana, que expone su cuerpo solo para tus ojos, su efecto es especialmente excitante. Pero no todo el mundo est¨¢ dispuesto a desvestirse de todo pudor y entrar en este juego. No hay problema, esa no es la ¨²nica forma de participar. "Tambi¨¦n podemos hacer 'sexting' sin usar im¨¢genes de ning¨²n tipo, ¨²nicamente con texto". En este caso, se trata de aprovechar el momento para fomentar la creatividad er¨®tica y crear historias, escenas y contextos que prendan la mecha por nosotros. A trav¨¦s de estos mensajes, la pareja puede aprender mucho de nuestros deseos y fantas¨ªas, lo que puede poner en marcha una conversaci¨®n que habr¨ªa sido m¨¢s dif¨ªcil en otro momento y que quiz¨¢ culmine en un encuentro futuro que ninguno olvidar¨¢.
Pero tampoco es como para sentirnos como unos pioneros. En realidad, el sexting solo es una versi¨®n m¨¢s expl¨ªcita de los contactos telef¨®nicos que tanto juego dieron a finales del siglo pasado. De hecho, ?por qu¨¦ no volver a coger el tel¨¦fono? Eso s¨ª que ser¨ªa subversivo... Y lo cierto es que pocas cosas son tan sugerentes como una voz bien entonada, ni m¨¢s excitantes que el susurro adecuado en el momento justo, cuando proviene de la boca perfecta. Una de las grandes ventajas de este canal es que procesamos el sonido con la imaginaci¨®n, que crea para nosotros una imagen tan viva como la mejor fotograf¨ªa er¨®tica. S¨ª, "la voz puede ser un est¨ªmulo muy sugerente y excitante", remata Lombard¨ªa.
Si el teletrabajo funciona, el telesexo tambi¨¦n
Si el confinamiento te parece un buen momento para probar el sexting, date un tiempo para hacerlo, pero prep¨¢rate para pasar al siguiente nivel: los juguetes er¨®ticos dise?ados para dar y recibir placer a distancia. "Funcionan a trav¨¦s de apps o con un mando a distancia. De esta manera, podemos mantener el erotismo sin tocarnos directamente, y activaremos la excitaci¨®n al ver a la otra persona excitada y disfrutando", aporta la sex¨®loga Mar¨ªa Torre.
Existen diferentes dispositivos que se conectan al ordenador para que los controle la pareja aunque est¨¦ a miles de kil¨®metros de distancia. Klic-Klic, el primer gadget sexual 3.0 dise?ado en Espa?a, lleva a?os a la venta. Desde su aparici¨®n, han visto la luz todo tipo de opciones que se activan a trav¨¦s del m¨®vil. Y para quienes se sienten abrumados por este universo, hay formas de entrar en ¨¦l poco a poco, como las aplicaciones m¨®viles para proponernos juegos sexuales a distancia que propone Torre.
"Si queremos o necesitamos nuevas ideas, una buena es Desire, que ofrece retos para mandarnos, crear los nuestros propios y lanzarnos a probar nuevas formas de jugar", dice. Basta agitar el tel¨¦fono para que la aplicaci¨®n facilite opciones de mensajes que mandar a tu pareja de juegos, dulces o picantes. Cada prueba superada se compensa con puntos que permiten desbloquear otros nuevos, cada vez m¨¢s calientes. La ¨²nica duda es hasta d¨®nde puedes hacer que suba la temperatura.
Leer y ver pelis, pero subidas de tono
La cuarentena tambi¨¦n ofrece oportunidad para culturizarnos, gracias a que muchas plataformas ofrecen gratis libros, revistas, pel¨ªculas, series, visitas virtuales a museos... ?Tambi¨¦n es un buen momento para ver o leer contenido er¨®tico en pareja? Seg¨²n la sex¨®loga Raquel Gargallo, la respuesta es un rotundo s¨ª. "Un ejercicio que hago en terapia de pareja es que si uno de ellos es lector y lee alguna escena er¨®tica en alg¨²n libro que le guste, se la escriba, se la describa, se la lea o se la esconda a su pareja para tentarla, y que despierte la imaginaci¨®n y la visualizaci¨®n er¨®tica".
El objetivo no es usar esta cultura sexual como unos preliminares, sino como parte de una nueva comunicaci¨®n er¨®tica que puede hacerse de forma conjunta en la misma casa o desde distintas ciudades. "Sentir el cuerpo del otro sin la penetraci¨®n, a trav¨¦s de una comunicaci¨®n distinta, de caricias sin piel con piel, con las palabras al o¨ªdo en susurro, pero sin tocarnos¡". A veces el hecho de eliminar el coito de la ecuaci¨®n es precisamente una forma de reactivar el deseo.
Autoerotismo, un 'salvavidas' que nunca falla
Ya en clave onanista, est¨¢ claro que un recurso fundamental para no olvidar la sexualidad en estos d¨ªas de cuarentena es autoerotismo. Tomarnos tiempo para mimarnos, cuidarnos y salir tambi¨¦n de las rutinas de nuestra masturbaci¨®n, bien sea a solas o con la pareja. "Es una gran oportunidad para usar el autoerotismo como herramienta para conocernos mejor. Normalmente, tenemos que buscar huecos para estar a solas, lo hacemos r¨¢pido y con el objetivo de desfogarnos, ahora podemos alargar ese tiempo y entretenernos en poner en pr¨¢ctica otros juegos con nosotras mismas", recomienda Mar¨ªa Torre.
Ana Lombard¨ªa recuerda que a¨²n hay personas que viven con pudor su sexualidad, y afirma que este tiempo de cuarentena puede ser positivo para "quitarse miedos al respecto y a liberarse a¨²n m¨¢s en su sexualidad". ?Qui¨¦n no se atreve a probar?
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