C¨®mo elegir (y preparar) la mejor tortilla de patatas precocinada
La OCU analiza las diferencias de 15 productos y c¨®mo afecta la forma de terminar de hacerlas en casa
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Cuando no hay tiempo ni ganas de cocinar la tortilla de patatas prometida para la cena o la excursi¨®n, uno da gracias de que existan los alimentos procesados. Recurrir a ellos habitualmente es desaconsejable, pero para ocasiones excepcionales hay que reconocer que nos sacan de m¨¢s de un apuro. La tortilla de patatas precocinada no est¨¢ entre los m¨¢s habituales pero, ?por qu¨¦ no darle una oportunidad? Pese a que est¨¢ claro que nunca ser¨¢n iguales que las que se cocinan en casa, esperar lo contrario ser¨ªa profundamente injusto. Y todo es cuesti¨®n de probar. Quien jam¨¢s haya dejado entrar este producto en su casa y est¨¦ dispuesto a cambiar de opini¨®n, encontrar¨¢ ¨²til una comparativa que la Organizaci¨®n de Consumidores y Usuarios (OCU) ha publicado en el n¨²mero de abril de su revista Compra Maestra.
El an¨¢lisis no ha mostrado diferencias relacionadas con el tipo de envase, que fueron de pl¨¢stico retractilado o de plato con atm¨®sfera protectora, a excepci¨®n de un producto congelado que estaba cubierto con film dentro de una caja (no descartes esta opci¨®n si el plan es comerla en casa, es m¨¢s cara pero tambi¨¦n la m¨¢s sabrosa, en opini¨®n de los expertos consultados). El trabajo de la OCU tampoco revela problemas nutricionales en ninguno de los productos aunque, como era de esperar, el sabor y la jugosidad han marcado niveles por debajo de los de las caseras en una cata de cocineros expertos (y menos mal que no las han comparado con las que les hac¨ªan de peque?os...) Eso s¨ª, hay que tener presente que las 15 tortillas analizadas llevan cebolla. O sea, que los partidarios de no a?adir este ingrediente deben optar por tragar con ¨¦l o resignarse a hacer un trabajo de disecci¨®n previo al de degluci¨®n.
El aceite, la cebolla y los aditivos marcan la diferencia
Para comparar las tortillas precocinadas con las caseras, la OCU ha tomado como referencia la siguiente receta tradicional: 50% de patata, 25% de huevo, 14% de aceite, 10% de cebolla y 1% de sal. Las tortillas precocinadas guardan la misma proporci¨®n de patata, huevos y sal, pero incorporan? solo el 7% de aceite y muestran un incremento del 50% del contenido de cebolla, con un 15% del total de la receta. Adem¨¢s, introducen de media un 2% de aditivos.
La OCU no detalla qu¨¦ aditivos se emplean, pero explica que, en general, estas sustancias se a?aden para imitar en los productos ultraprocesados las caracter¨ªsticas de los que no lo son. Y que hay dos grandes grupos, los que sirven para dar textura, consistencia y forma a la tortilla, y los que permiten que tenga un periodo de conservaci¨®n prolongado, evitando que crezcan microorganismos pat¨®genos y aparezcan alteraciones como el pardeamiento del producto.
En cuanto al precio, el an¨¢lisis se?ala grandes diferencias. Las tortillas refrigeradas est¨¢n en una media de 4 euros por kilo ¡ªaunque las de las marcas blancas cuestan en torno a 3,20 euros por kilo mientras las de fabricante llegan a los 5 euros¡ª y el consumidor que opte por productos ecol¨®gicos puede tener que desembolsar hasta 10 euros por kilo. La m¨¢s cara, sin embargo, fue la tortilla congelada de La Cocina de Sen¨¦n, con 12,43 euros. Eso s¨ª, tambi¨¦n fue la que m¨¢s destac¨® en la degustaci¨®n de un grupo de cocineros expertos que las juzgaron tanto en busca de defectos como desde un punto de vista gastron¨®mico.
Para el paladar, la congelada es la mejor opci¨®n
Quien no haya comprado una tortilla de patatas envasada en su vida, debe saber que los fabricantes no recomiendan comerla nada m¨¢s abrir el envase, por mucho que el huevo ya venga cuajado. En su lugar, ofrecen la posibilidad de ponerla en el microondas (un aparato con m¨¢s utilidad de la que habitualmente nos pensamos) entre 3 y 5 minutos, seg¨²n la marca, o pasarla por la sart¨¦n de 1,5 a 5 minutos por cada cara. Precisamente porque ya vienen cuajadas, los cocineros optaron por poner el tiempo m¨ªnimo recomendado, y observaron que cuando se terminan en sart¨¦n la patata queda m¨¢s entera, lo que juzgaron como un punto negativo. La cebolla tambi¨¦n qued¨® muy entera en muchas de las muestras.
En el apartado organol¨¦ptico, los profesionales destacaron la tortilla congelada de La Cocina de Sen¨¦n. "Tiene la apariencia de una gran gelatina rellena de patata, cebolla y huevo crudo, y que se aconseja terminar solo en sart¨¦n. Al ponerla al fuego, se va cuajando el huevo a la vez que se deshace la gelatina y se mantiene la forma. El resultado es una tortilla jugosa, con una patata pochada, de textura agradable", detalla el an¨¢lisis. Pero tambi¨¦n a?ade que el producto no es comparable con los dem¨¢s por ser la ¨²nica tortilla congelada.
La OCU admite que mientras llevaba a cabo su an¨¢lisis hab¨ªa varias marcas en proceso de cambio, por lo que no se tuvieron en cuenta productos de Giraldo, La tortilla de la abuela, El Corte Ingl¨¦s, Coviran, Consum y Dia.
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