?Y si pasamos una semana sin carne?

?Qu¨¦ relaci¨®n tenemos con los animales? Algo del orden de lo esquizofr¨¦nico, dir¨ªa yo. Al caniche lo mimamos como a la ni?ita de nuestros ojos mientras que a la vaca, a la oveja y al cerdo los descuartizamos sin mayor miramiento. Nos desayunamos m¨¢s y m¨¢s a menudo con noticias que nos revelan hasta qu¨¦ punto somos el Dr. Jekyll y Mr. Hyde, todo a la vez. Noticias que hablan del uso y abuso de nuestra relaci¨®n con los animales. Esta misma semana la organizaci¨®n pro derechos de los animales PETA difundi¨® un v¨ªdeo donde se muestran pr¨¢cticas de tortura durante el esquilado para extraer lana a las alpacas. ?Es necesario este sufrimiento y esta tragedia sanguinolenta para que yo no pase fr¨ªo en invierno?

M¨¢s informaci¨®n

?C¨®mo ser¨ªa el mundo sin carne?

Un sistema alimentario herido de muerte

De orde?ar vacas a exprimirlas como limones

Y en el mismo sentido, ?es necesario tambi¨¦n el sacrificio de centenares de miles de animales para asegurar nuestro estilo de alimentaci¨®n? En este mismo blog, Cristina Rodrigo, de Proveg, denunci¨® la semana pasada que miles y miles de cabezas de ganado van a ser ¡°retiradas¡±. Es un eufemismo para decir que se les va a matar sin que lleguen siquiera a entrar en la cadena alimentaria para evitar una ca¨ªda de precios del sector, medida encaminada a combatir la crisis econ¨®mica provocada por la pandemia. Como bien dec¨ªa Rodrigo, es nuestro sistema alimentario el que est¨¢ herido de muerte.

En este contexto no me ha pasado inadvertida la #SemanaSinCarne que propone Proveg, un reto para intentar vivir de manera m¨¢s coherente, para intentar reconciliar los opuestos que conviven en nosotros. Todas las personas que se sumen al reto recibir¨¢n una newsletter con recetas e informaci¨®n nutricional, adem¨¢s de consejos e informaci¨®n interesante sobre c¨®mo sustituir la prote¨ªna animal por la vegetal en ese tiempo. Se les hace una propuesta de men¨² semanal y una lista de la compra con todo lo que van a necesitar. Cada d¨ªa se centra en una prote¨ªna vegetal distinta, y se facilita informaci¨®n nutricional, precios, sugerencias de d¨®nde comprarla e ideas para prepararla.

Debo reconocer que intent¨¦ sumarme a la VeggieChallenge que propusieron ya en marzo pasado. En ese caso se trataba de 30 d¨ªas de ayuno de prote¨ªna animal, pero se nos vino encima el confinamiento y todas las complicaciones que conllev¨® y, aunque hab¨ªa empezado el camino hacia el cambio, aparqu¨¦ la idea para m¨¢s adelante. Hoy, recojo de nuevo el guante.

Los h¨¢bitos tienen m¨¢s que ver con la psicolog¨ªa que con la informaci¨®n o la buena voluntad, que sobreabundan

Cuando me propongo un reto intento delimitarlo, ya sea en el tiempo o en el espacio, para que me parezca a m¨ª misma realizable y no inalcanzable. Creo que lo he escrito ya en otras ocasiones. Los h¨¢bitos de consumo tienen m¨¢s que ver con la psicolog¨ªa y con las rutinas que hemos adquirido que con la informaci¨®n o la buena voluntad, que a menudo sobreabundan. As¨ª que es m¨¢s sencillo acatar un aspecto chiquit¨ªn y de ah¨ª ir creciendo poco a poco que no querer cambiar tu vida completamente de la noche al d¨ªa.

Por ejemplo, en marzo decid¨ª dejar la leche de vaca. La que consumimos en casa es bio, lo que garantiza un mejor trato a las vacas lecheras, pero aun as¨ª tom¨¦ la decisi¨®n de dejarla completamente por motivos de salud. Debo confesar que el tema me preocupaba desde hac¨ªa a?os, m¨¢s en concreto desde que vi el documental The milk system, del que habl¨¦ en el art¨ªculo De orde?ar vacas a exprimirlas como limones. Dejar la leche supuso pasar de la mantequilla a la margarina vegetal, y del caf¨¦ con leche al caf¨¦ solo. Y simplemente con esos dos gestos consegu¨ª que una de mis comidas del d¨ªa, el desayuno, fuera integralmente de origen vegetal.

Tengo la costumbre ya adquirida de no consumir prote¨ªna animal en una de las cenas de la semana. Me dieron la idea mis conciudadanos franceses. En enero del a?o pasado, 500 personalidades galas hicieron p¨²blico un manifiesto donde se compromet¨ªan a ayunar de carne y de pescado un d¨ªa a la semana. ?Las razones que les llevaron a tal decisi¨®n? Las mismas que encontramos en todas partes: es una buena decisi¨®n para el planeta, para nuestra salud y, claro est¨¢, es mejor para los animales. Lo cont¨¦ en el art¨ªculo. ?Y t¨² qu¨¦ comes los lunes? Entonces, ?te apuntas t¨² tambi¨¦n a la #SemanaSinCarne?