Salir a correr, un privilegio solo para algunas mujeres
Una pr¨¢ctica tan habitual en muchos pa¨ªses es excepcional en otros. En India, la seguridad en las ciudades y el tradicional reparto de tareas son grandes obst¨¢culos para la presencia femenina en calles y carreras. Varias iniciativas ciudadanas intentan cambiarlo
M¨¢s de un millar de mujeres indias en pantalones cortos, algunas acompa?adas por hijas, madres, amigas o maridos, otras solas, se reunieron el pasado ocho de marzo a las seis de la ma?ana, antes de los primeros rayos de sol, junto al fuerte del barrio de Bandra, en Bombay. Estaban all¨ª para calentar antes de participar en una carrera popular, en las categor¨ªas de cinco y diez kil¨®metros, organizada con motivo del D¨ªa Internacional de la Mujer. En otras dos ciudades de India, Bangalore y Chennai, se celebraron competiciones simult¨¢neas.
En apenas tres cuartos de hora, aparecen las primeras participantes en la meta: Khavita Bhoir, en primer lugar, en 44:47 minutos; Pratibha Khutade, segunda (0:44:54) y Manisha Sanwa, tercera (00:49:08). Manisha dice, orgullosa y todav¨ªa fatigada tras bajar del p¨®dium, que empez¨® a correr hace solo unos meses tras dar a luz por ces¨¢rea a su hija, en abril de 2019. Tras las vencedoras, sigue un goteo de mujeres de todas las edades. Hay algunas jubiladas y tambi¨¦n ni?as con sus madres, j¨®venes en pantalones cortos y mallas, otras con camiseta larga y alguna con pa?uelo.
Detr¨¢s de la iniciativa se encuentran Sangeeta y Sunil Shetty, un matrimonio indio, apodado por la prensa como la ¡°ultra pareja¡± por sus r¨¦cords acumulados en ultra maratones. ¡°En 2012 nos convertimos en la primera pareja india que corr¨ªa 100 kil¨®metros juntos; en 2013, fuimos la primera en correr durante 24 horas seguidas; en 2016, durante 36 horas, y en 2017 nos convertimos en la primera pareja del mundo que corr¨ªa durante 48 horas¡±, enumera Sangeeta antes del evento. ¡°Fueron tres d¨ªas y dos noches en el estadio de Bangalore¡±, puntualiza, y explica que solo se pod¨ªa parar un instante para cambiarse de ropa o comer algo. En ese tiempo, Sunil complet¨® 266 kil¨®metros y Sangeeta, 214.
Este matrimonio lleva corriendo 17 a?os. Empez¨® Sunil, el marido, de 57 a?os, ¡°simplemente porque quer¨ªa perder peso¡±. Dos d¨ªas despu¨¦s, se sum¨® Sangeeta y desde entonces, entrenan juntos. "Era el deporte m¨¢s sencillo y barato, solo necesit¨¢bamos unas zapatillas", dice Sunil. ¡°A veces ni eso¡±, a?ade Sangeeta. Sunil dice que correr cambi¨® por completo su estilo de vida. Desde hace seis a?os organizan carreras multitudinarias por toda India con una empresa especializada en la organizaci¨®n de estos eventos deportivos.
¡°Entre unos 2.000 participantes, un 80% son mujeres¡±, explica Sunil sobre la asistencia a la carrera del d¨ªa de la mujer de marzo citada. Reconoce que aunque en las competiciones de este deporte organizadas en India, la participaci¨®n femenina es minoritaria, ha aumentado bastante: ¡°Si miras atr¨¢s, hace 10 a?os, las corredoras era un 10% y ahora son un 20% o 25%. No voy a decir que vayamos a alcanzar la igualdad total en los pr¨®ximos a?os, porque es demasiado optimista, pero al menos deber¨ªamos lograr un 30 o 35%, porque vemos que India ya no es una sociedad tan conservadora como sol¨ªa serlo; el hecho de que una mujer corra en pantalones cortos ya es un logro, as¨ª que las cosas est¨¢n cambiando r¨¢pido¡±, concluye Sunil.
Shibani Gulati, de 40 a?os, no subi¨® al podio ese d¨ªa pero, para ella, su victoria es la carrera que empez¨® en 2010. Ese a?o, fue la primera superviviente a un trasplante de ri?¨®n en India. Fue su hermano qui¨¦n le don¨® el ¨®rgano ¡°y durante la recuperaci¨®n pens¨¦ que se trataba de una segunda vida y quer¨ªa ponerme un reto, as¨ª empec¨¦ a correr,¡± recuerda. Desde entonces, no ha parado. Esta es la 34? carrera en la que participa.
¡°No digo que antes no estuviese viva, pero correr me ha hecho m¨¢s disciplinada, he empezado a ver la vida de una manera m¨¢s positiva y, sobre todo, mi salud ha mejorado¡±, asegura Gulati. ¡°Si te levantas a las cuatro de la ma?ana para correr, tienes que acostarte m¨¢s temprano, por lo que debes reestructurar todo¡±, agrega. Dice que, en estos a?os, ¡°el n¨²mero de mujeres indias que corren se ha multiplicado". En su mismo entorno, muchas. "Es muy importante que m¨¢s se sumen. Que den ejemplo, y que los hombres que ya corren involucren a las mujeres de casa." Aunque admite que aunque queda por delante una gran carrera de obst¨¢culos. Uno de los retos m¨¢s importantes en India a¨²n es la inseguridad: ¡°Hay mujeres que no se sienten seguras corriendo en la calle, especialmente cuando hay poca luz. Aunque Bombay ¡ªa?ade¡ª es mucho m¨¢s segura que otras ciudades de India".
Una violaci¨®n cada 15 minutos
En India, en solo un a?o, casi 39.000 mujeres denunciaron violaciones, lo que supone que, al menos, una mujer fue violada cada 15 minutos seg¨²n el ¨²ltimo informe anual sobre cr¨ªmenes (2018-2019) del Ministerio del Interior de India. Adem¨¢s, 64.000 indias denunciaron secuestros y abducciones. Solo un tercio de las denuncias va a juicio y hay miles de casos en espera, seg¨²n el mismo informe. En el segundo pa¨ªs m¨¢s poblado del mundo, con m¨¢s de 1.300 millones de personas, las estad¨ªsticas de inseguridad difieren mucho entre norte y sur, entre regiones y entre zonas urbanas o rurales, con Madhya Pradesh y Chhattisgarh en cabeza, seg¨²n Reuters, dos de los 28 Estados de India, en el interior del pa¨ªs.
"La imagen de las mujeres indias corriendo en pantalones cortos en ciudades como Bombay no representa un cambio real en la forma en que ellas acceden al espacio p¨²blico en India", explica la escritora Kalpana Sharma, autora de Whose news? The media and women's issues (?Qui¨¦nes son noticia? Los medios y los problemas de las mujeres), que afirma que la mayor¨ªa de las indias, ¡°rurales o urbanas", todav¨ªa no se sienten seguras llevando la ropa que desean en espacios p¨²blicos debido a la misoginia y la hostilidad inherentes. ¡°Para muchas mujeres en India, los espacios p¨²blicos son de acceso, no de ocio¡±, a?ade.
Los cuatro de la manada de Delhi, ahorcados en marzo
En los ¨²ltimos a?os, algunos de los casos de violaciones en el pa¨ªs han sido especialmente medi¨¢ticos y han despertado fuertes protestas, como el llamado Nirbhaya, un juicio que despert¨® el inter¨¦s internacional tras la brutal tortura y violaci¨®n en grupo de una joven estudiante en 2012. Los cuatro culpables fueron condenados recientemente a muerte y ejecutados el pasado 20 de marzo. ¡°Yo soy contraria a la pena de muerte, no reduce los delitos y es deshumanizante¡±, a?ade Sharma.
Algunas voces, como la de Sharma, cuestionan que, por un lado, los medios utilicen las violaciones para incitar el odio de ciudadanos y pol¨ªticos: ¡°Incluso un parlamentario sugiri¨® que los violadores deb¨ªan ser linchados¡±. Y por otro, la prensa, trate a las v¨ªctimas con un doble rasero. Dice que las violaciones de mujeres de entornos humildes o de dalits (intocables) no provocan protestas y adem¨¢s, la mayor¨ªa de los delitos contra las mujeres en India se produce por un familiar o conocido, y muchos de ellos no se denuncian.
¡°Si yo corro los s¨¢bados, mi marido corre los domingos"
Otro de los obst¨¢culos para que la comunidad de corredoras de India crezca es que las mayores responsabilidades de la casa recaen sobre ellas: los ni?os, familias grandes, cocinar. Lo cuenta Gulati: "Al final, del d¨ªa, las mujeres est¨¢n realmente exhaustas. Y si, adem¨¢s, tienes que salir a correr de madrugada es extenuante¡±.
India es uno de los pa¨ªses en los que las mujeres dedican m¨¢s tiempo a las labores no remuneradas del hogar frente a los hombres, seg¨²n la OCDE, 351 minutos al d¨ªa, es decir, casi seis horas, frente a los 51,8 minutos que dedican ellos. En Espa?a, el reparto es de 289,1 minutos ellas y 145,9 minutos, ellos, es decir, casi cinco horas las mujeres y dos los hombres, m¨¢s del doble. ¡°As¨ª que uno de los elementos necesarios para que las mujeres corran en India, es que el hombre se convierta en un socio equitativo,¡± reconoce Gulati. ¡°En mi casa, por ejemplo, si yo corro los s¨¢bados, mi marido corre los domingos, y cada uno se ocupa de la casa un d¨ªa¡±.
Las embajadoras de las carreras rosas de India
Entre las corredoras estaba tambi¨¦n Shital, de 43 a?os, a¨²n con la camiseta empapada tras la competici¨®n, quien explicaba que ella convenci¨® a su amiga Bharti para que empezara a correr. Bhati, a su lado, dice que a su ver anim¨® a otras amigas y estas, a su vez, enrolaron a m¨¢s. Shital es una de las denominadas "embajadoras del pinkhaton" (maratones rosas, por el juego de palabras en ingl¨¦s), otra iniciativa surgida en India que consiste en involucrar a m¨¢s mujeres en la comunidad de corredoras del pa¨ªs y que act¨²a como un rumor en red: se lo dicen unas a otras hasta que se multiplican las participantes. Para Shital es m¨¢s f¨¢cil motivar a las mayores que a las j¨®venes: "Cuando eres joven tienes diferentes prioridades¡±.
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