Las enfermedades olvidadas, al rescate de quienes las ignoraron
Los investigadores que buscan curas para las dolencias tropicales desatendidas utilizan ahora su experiencia para combatir la covid-19
El barrio de Kilimani de Nairobi, capital de Kenia, fue anta?o un espacio residencial para colonos brit¨¢nicos. Hoy est¨¢ poblado de centros comerciales y oficinas como las que se alquilan en las Torres Tetezi, una moderna construcci¨®n forrada de cristal y acero que no pasa desapercibida entre las calles a¨²n sin asfaltar. Lo que nadie imaginar¨ªa es que all¨ª dentro se cuecen algunas de las innovaciones m¨¦dicas m¨¢s prometedoras del pa¨ªs: hablamos de la sede regional para ?frica de la Iniciativa de Medicamentos para Enfermedades Olvidadas (DNDi), una organizaci¨®n mundial sin ¨¢nimo de lucro que apoya la investigaci¨®n de nuevos tratamientos para estos males. Al frente de ella se encuentra la doctora Borna Nyaoke, considerada una de las 40 mujeres menores de 40 a?os m¨¢s importantes de Kenia y responsable de varios de los proyectos que se desarrollan all¨ª. Y tiene m¨¢s trabajo que nunca.
En un momento en que la covid-19 hace estropicios en todo el mundo, la doctora Nyaoke, especialista en Salud P¨²blica formada en Harvard, Liverpool y Nairobi, tiene dos frentes abiertos: por una parte, seguir de cerca los progresos dos de los seis ensayos cl¨ªnicos que est¨¢n ahora mismo en marcha para tres de las enfermedades tropicales desatendidas o ETD: leishmaniasis, micetoma y VIH pedi¨¢trico. Las ETD se llaman as¨ª porque, pese a que afectan a unos 1.700 millones de personas, no generan inter¨¦s suficiente para que se invierta tiempo y dinero en investigar una cura para ellas, ya que afectan fundamentalmente a poblaciones empobrecidas que no pueden pagar un tratamiento. La ¨²lcera de Buruli, el mal de Chagas, la leishmaniasis, la oncocercosis, la enfermedad del sue?o...
Quienes trabajan en pa¨ªses de pocos recursos para frenar enfermedades tropicales desatendidas miran con preocupaci¨®n la propagaci¨®n de la covid-19 por el mundo: si en los pa¨ªses ricos la pandemia ha supuesto la asfixia de los sistemas sanitarios, en los menos pr¨®speros puede haber una debacle.
Para prepararse, desde el DNDi se lanz¨® en abril de 2020 la Coalici¨®n para la Investigaci¨®n Cl¨ªnica de la covid-19 (covid19crc), un consorcio de m¨¢s de cien m¨¦dicos, cient¨ªficos, farmac¨¦uticas, financiadores y legisladores de 30 pa¨ªses diferentes cuyo objetivo es acelerar la investigaci¨®n sobre prevenci¨®n, diagn¨®stico y gesti¨®n de casos donde el virus podr¨ªa causar m¨¢s estragos. "Se est¨¢n llevando a cabo muy pocos ensayos cl¨ªnicos sobre la covid-19 en entornos de escasos recursos; nuestros investigadores africanos solo contribuyen con el 1% de las publicaciones m¨¦dicas cl¨ªnicas mundiales", detalla Nyaoke por correo electr¨®nico. De hecho, la literatura cient¨ªfica generada en unos pocos meses es abundante: en la base de datos de la OMS actualmente hay 1.976 estudios registrados sobre la enfermedad causada por el SARS-CoV-2. "?frica muestra una incre¨ªble cantidad de diversidad gen¨¦tica y, por lo tanto, los resultados de los numerosos estudios para el nuevo coronavirus que se est¨¢n realizando en el mundo pueden no ser relevantes para las personas en el continente africano a menos que los hagamos localmente".
En esta nueva empresa est¨¢ sumida la doctora Nyaoke porque, como se suele decir, la experiencia es un grado. "Nuestra investigaci¨®n en ETD ha implicado trabajar en algunos de los entornos m¨¢s duros y de escasos recursos de la regi¨®n y tambi¨¦n en enfermedades que no tienen ensayos cl¨ªnicos previos realizados, como el micetoma", explica la doctora, y a?ade c¨®mo especialistas como ella han desarrollado la habilidad de llevar a cabo ensayos cl¨ªnicos de calidad en entornos adversos y en movilizar a socios y colaboradores clave para acelerar la investigaci¨®n. "Tambi¨¦n hemos mantenido di¨¢logos con los responsables pol¨ªticos para promover el acceso a los tratamientos una vez que se completen los ensayos cl¨ªnicos", detalla Nyaoke.
As¨ª, a medida que el nuevo coronavirus se hac¨ªa fuerte en el mundo, m¨¢s y m¨¢s m¨¦dicos, cient¨ªficos e investigadores como los que dirige la doctora Nyaoke decidieron volcar sus esfuerzos en contribuir a buscar un tratamiento o una vacuna que ayuden a acabar con la enfermedad.?
Una de las ETD a partir de cuya investigaci¨®n se han encontrado ideas para curar la covid es el Mal de Chagas, la enfermedad causada por el par¨¢sito Trypanosoma cruzi, que afecta a siete millones de personas en el mundo y que puede llegar a ser mortal. Da cuenta de algunos progresos en marcha Silvia Gold, presidenta de Mundo Sano. Esta es la ¨²nica organizaci¨®n hispanoamericana incluida en el programa Uniting to Combat NTD y entre sus hitos m¨¢s destacados est¨¢n haber logrado que la enfermedad fuera incluida en la Declaraci¨®n de Londres (la mayor alianza global de lucha contra las ETD) y crear un consorcio p¨²blico-privado para fabricar y distribuir el benznidazol, que es el f¨¢rmaco principal contra la enfermedad.
Gold destaca el uso de la ivermectina, un medicamento antiparasitario utilizado para tratar algunas ETD, como la ceguera de los r¨ªos y la filariasis linf¨¢tica, que ha demostrado ser muy seguro. En su fundaci¨®n se hab¨ªan fijado en ¨¦l como segundo tratamiento para el chagas. "Nos interesa mucho como droga antiparasitaria; tiene mucho m¨¢s para dar y estamos trabajando en formulaciones distintas", explica la doctora. En abril de 2020, unos cient¨ªficos australianos demostraron que el f¨¢rmaco act¨²a contra el SARS-CoV-2 in vitro y a partir de ah¨ª se est¨¢ investigando m¨¢s; de momento hay hasta 32 ideas en marcha. Una de ellas, en Argentina. "Estamos haciendo un ensayo en Buenos Aires donde medimos en 45 pacientes si la administraci¨®n de ivermectina baja la carga viral. Todav¨ªa no tenemos datos, pero si va bien ir¨ªamos a un ensayo grande con indicadores cl¨ªnicos", adelanta.
Otro ejemplo de factura espa?ola es el que coordinan el Instituto de Salud Global (ISGlobal) de Barcelona y la Universidad de Navarra. Se trata del Proyecto Saint, un ensayo con 24 pacientes que culminar¨¢ previsiblemente a finales de agosto, y cuyo fin es el mismo: comprobar si este f¨¢rmaco reduce la carga viral.
Suero de caballo
"Otro proyecto s¨²per atractivo con mucha prensa es un suero equino: los caballos son grandes productores de anticuerpos", describe Gold sobre otra v¨ªa abierta de investigaci¨®n para curar la covid-19.?La investigaci¨®n, cuyo ensayo cl¨ªnico en humanos comenz¨® este mes de julio, consiste en producir un suero a partir de plasma sangu¨ªneo de caballos para frenar la enfermedad en sus primeros estadios, pues se ha demostrado que este bloquea la entrada del virus en las c¨¦lulas y as¨ª no se reproduce, comport¨¢ndose como los ant¨ªdotos contra los venenos de ara?a y escorpiones, entre otros. "Ya tenemos la extracci¨®n de plasma de caballo y la medimos en tres laboratorios distintos de referencia: Barcelona, Buenos Aires y en la provincia argentina de C¨®rdoba. Estos anticuerpos te permiten generar un producto m¨¢s industrializable, m¨¢s escalable, porque la cantidad de suero hecho con el plasma de pacientes convalecientes depende de cu¨¢nta oferta haya, pero este es un producto que puedes escalar e industrializar", diferencia Gold.
Se ha demostrado que el suero a partir de plasma de caballo bloquea la entrada del coronavirus en las c¨¦lulas y este no se reproduce
En este caso, se est¨¢ aprovechando la t¨¦cnica empleada en la b¨²squeda de un remedio para el s¨ªndrome ur¨¦mico hemol¨ªtico, del que hubo un brote en 2011 en Alemania y que desat¨® la llamada crisis del pepino al ser atribuido err¨®neamente a unos pepinos importados desde Espa?a. "La covid nos pill¨® con la plataforma preparada", a?ade la fundadora de Mundo Sano.
Otra t¨¦cnica bien conocida por Gold y su equipo son los llamados pools de testeo, un modelo de intervenci¨®n para detectar el virus de forma grupal pensado para conseguir realizar la prueba a m¨¢s personas utilizando menos kits, ya que este material habitualmente escasea y, por tanto, bajar el coste. La t¨¦cnica consiste en tomar una muestra con un hisopo que se introduce en un tubo que contiene un l¨ªquido para preservar el virus. Hasta aqu¨ª es igual que en las pruebas individuales. Lo que cambia es que en el laboratorio, los hisopos no se procesan de uno en uno en la m¨¢quina que hace los test de PCR para detectar la presencia de la covid-19; lo que se hace es juntar el l¨ªquido de varios tubos para analizarlos de una vez. Si el resultado es negativo, significa que ninguna de las personas est¨¢ infectada. Si da positivo, se les hace el test individual. "El pool te permite hacer m¨¢s testeos, pero su l¨ªmite es la sensibilidad del m¨¦todo", advierte Gold sobre una t¨¦cnica que ya usaban antes para detectar el dengue. "Nosotros hacemos pools de cuatro, es el l¨ªmite con el que nos sentimos confiados de que no se nos escape un positivo".
#Mundo Sano, @UBA y @adesar, dise?aron e implementan un modelo de abordaje integral para el manejo sanitario del #COVID19. Consiste en la detecci¨®n, aislamiento y monitoreo domiciliario de pacientes y en la vigilancia epidemiol¨®gica de personal de salud. https://t.co/2CFsRIirXe
— Mundo Sano (@MundoSano) June 30, 2020
Hallar una vacuna contra una enfermedad es m¨¢s sencillo si se conocen todas las partes, con nombre y apellidos, del virus o bacteria que la causa. Bajo esta premisa trabaja un grupo de m¨¦dicos y bi¨®logos liderados por los doctores del Portillo y Fern¨¢ndez-Becerra (IGTP-ISGlobal). "Buscamos p¨¦ptidos o fracciones de prote¨ªnas que puedan servir de base para una vacuna para la covid-19 bas¨¢ndonos en la extracci¨®n de ves¨ªculas extracelulares", describe Mar¨ªa Jes¨²s Pinazo, especialista s¨¦nior del Servicio de Salud Internacional del Cl¨ªnic, e investigadora de ISGlobal y miembro del equipo de estudio. En lenguaje profano, lo que hacen es analizar todas las partes del virus que provocan que haya o no s¨ªntomas y que estos sean m¨¢s o menos graves.
"Reconociendo cu¨¢les son estas partes del virus sobre las que deber¨ªamos actuar podremos sentar el principio de una vacuna", dice Pinazo, cuyo equipo hac¨ªa esto mismo antes de la covid-19, pero orient¨¢ndose a otro fin: conocer la eficacia del tratamiento de la enfermedad de Chagas.. Son enfermedades diferentes que requieren respuestas diferentes, pero las t¨¦cnicas e hip¨®tesis son similares, seg¨²n Pinazo. A¨²n se encuentran en una fase preliminar de la investigaci¨®n, pero los primeros resultados apuntan a lo que se est¨¢ viendo ya cl¨ªnicamente: "Hay mucha heterogeneidad entre los p¨¦ptidos que se est¨¢n hallando en el SARS-CoV-2; es un virus polifac¨¦tico: en muchos pacientes no se manifiesta y en otros lo hace de una forma muy severa y afectando no solo al sistema respiratorio. Esto, biol¨®gicamente, se traduce en algo, pero todav¨ªa no sabemos en qu¨¦".
La azitromicina es un antibi¨®tico eficaz, f¨¢cil de administrar y barato que en 2012 cobr¨® protagonismo cuando los doctores Oriol Mitj¨¤ y Quique Bassat de ISGlobal demostraron que una sola dosis bastaba para curar a una persona con pian, otra enfermedad considerada desatendida parecida a la s¨ªfilis pero que no se contagia por v¨ªa sexual y afecta, sobre todo, a ni?os. Este hallazgo abri¨® las puertas a que la OMS considerara su erradicaci¨®n para 2020 despu¨¦s de 60 a?os sin avances significativos.
Ahora, la azitromicina puede ser otra herramienta para enfrentarse al nuevo coronavirus seg¨²n un estudio en la universidad de Oxford, Reino Unido, que busca comprobar si el uso de este antibi¨®tico puede evitar el empeoramiento de pacientes de covid-19. Esto, entre otras cosas, conseguir¨ªa reducir el n¨²mero de ingresos en el hospital y el consiguiente colapso de los mismos. Para la investigaci¨®n, en fase preliminar, se va a reclutar a 800 pacientes y a la mitad de ellos se les administrar¨¢ azitromicina durante 14 d¨ªas. Al cabo de un mes se evaluar¨¢ la gravedad de los s¨ªntomas en los enfermos de uno y otro grupo.
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