Lo que tienes que saber si visitas los templos de Angkor
Diez claves para viajeros que lleguen a Siem Reap, la ciudad camboyana desde la que se accede al fabuloso complejo arqueol¨®gico, considerado uno de los destinos m¨¢s alucinantes del mundo
Es dif¨ªcil no sentirse un turista en Siem Reap, una peque?a ciudad camboyana cuyo nombre tal vez no diga nada a los viajeros menos avezados. En realidad es una de las m¨¢s visitadas del mundo, sobre todo por mochileros y coleccionistas de maravillas mundiales, aunque ninguno de ellos acuda expresamente a ella, sino a los cercanos templos de Angkor, considerados uno de los 20 destinos m¨¢s alucinantes del mundo. Y no es para menos. Siem Reap, desde donde se parte para visitar el complejo arqueol¨®gico ¨Ctanto los templos m¨¢s conocidos como otros muchos a los que pocos turistas llegan¨C, es una ciudad inventada y fren¨¦tica, que se renueva constantemente con nuevos hostales y hoteles, restaurantes de todas las categor¨ªas y puestos de comida callejera que conviven con lujosos spas, circuitos para gourmets y una escena cultural muy creativa, que incluye al Phare, el principal circo contempor¨¢neo de Camboya.
El complejo de Angkor tambi¨¦n es relativamente moderno ¨Cy a la vez enormemente antiguo¨C ya que hasta hace pocas d¨¦cadas sus templos, construidos en arenisca entre los siglos IX y XIII para que los disfrutaran los reyes dioses (devaraja) jemeres, dorm¨ªan sepultados bajo la selva camboyana. Hoy son visitados a diarios por cientos de turistas, y como consecuencia de ellos, las principales calles de Siem Reap se han llenado de reclamos para viajeros y mochileros, entre locales de masajes, tiendas de souvenirs tur¨ªsticos y ruidosos bares.
Angkor dar¨ªa para toda una vida descubriendo lugares m¨¢gicos, muchos de ellos pr¨¢cticamente ocultos en la espesura de la jungla. Los imprescindibles, eso s¨ª, son los m¨¢s cercanos: Angkor Wat, Angkor Thom, Bay¨®n o Banteay Srei. Pero hay muchos m¨¢s, como el lejano y misterioso Beng Mealea, a casi 70 kil¨®metros de los templos principales, o como Ta Prohm, que fascinar¨ªa al mism¨ªsimo Indiana Jones, entre otros muchos. Proponemos una breve gu¨ªa pr¨¢ctica ¨Ccon diccionario incluido¨C para saber moverse entre templos, junglas misteriosas y extra?as pir¨¢mides, m¨¢s all¨¢ de Angkor.
1. Angkor Wat, la octava maravilla del mundo
Alma y s¨ªmbolo de Camboya, n¨²cleo de la civilizaci¨®n jemer y una fuente de orgullo nacional, hacen falta al menos dos horas para visitar el templo de Angkor Wat, o incluso medio d¨ªa si nos proponemos descifrar el significado de los bajorrelieves acompa?ados de un gu¨ªa. La sensaci¨®n que uno tiene al ver por primera vez Angkor Wat, la m¨¢xima expresi¨®n del ingenio jemer, solo es comparable a la que producen lugares muy escogidos en el mundo. Construido por Suryavarman II (1112-1150) es uno de los monumentos m¨¢s brillantes concebidos por la mente humana. Tiene 800 metros de bajorrelieves y una torre de 55 metros, que otorga al conjunto una unidad sublime. Angkor es famoso por sus seductoras apsaras (ninfas divinas). Hay casi 2000 talladas en las paredes, cada una con un motivo ¨²nico y con 37 estilos diferentes de peinado. La mezcla de espiritualidad y simetr¨ªa es asombrosa.
2. Angkor Thom y Bayon, rostros enigm¨¢ticos
La gran ciudad amurallada de Angkor Thom es de un tama?o abarcable (10 kil¨®metros cuadrados) y contiene algunos de los templos m¨¢s espectaculares de la regi¨®n, sombreados bajo el bosque que los cubre. Acceder a este majestuoso santuario por caminos alternativos es una buena forma de esquivar a las muchedumbres y disfrutar de algunos de los templos menos conocidos. Para algunos, Angkor Thom (gran ciudad) es m¨¢s bello que Angkor Wat. Fue la ¨²ltima gran capital del imperio jemer y su construcci¨®n elev¨® el list¨®n de complejidad de los monumentos. En el centro de su recinto amurallado se encuentra los enclaves imprescindibles: Bay¨®n, Baphuon, Phimeanakas y la terraza de los Elefantes. Pero en Angkor Thom lo m¨¢s impactante son sus puertas, flanqueadas por la inmensa representaci¨®n del batido del oc¨¦ano de leche, mito del hinduismo: 54 demonios y 54 dioses absortos en una lucha ¨¦pica en plena calzada. La puerta m¨¢s fotografiada es la sur, totalmente restaurada y con muchas de sus cabezas conservadas, aunque la m¨¢s cinematogr¨¢fica es la puerta este de Angkor Thom, donde hay que hacerse la llamada foto Tomb Raider.
Bay¨®n es el coraz¨®n de Angkor Thom, que encarna el ingenio creativo, el ego del rey camboyano m¨¢s c¨¦lebre, Jayavarman VII. Lo llaman el templo de las caras y es ¨²nico por su osad¨ªa arquitect¨®nica. Estas enormes cabezas observan desde todos los ¨¢ngulos al visitante, que durante su paseo contempla en todo momento al menos doce cabezas a la vez, de cara o de perfil, algunas veces a la altura de los ojos y otros mirando desde arriba. Eso s¨ª, a diferencia de Angkor Wat, que impresiona desde todos los ¨¢ngulos, Bayon parece una pila de escombros visto en la distancia. Solo al entrar al templo y subir al tercer nivel se hace visible su magia.
3. Beng Mealea, gigante dormido de la selva
Llegamos a uno de los templos m¨¢s espectaculares, m¨¢s all¨¢ de Angkor, por c¨®mo la naturaleza se ha adue?ado de ¨¦l y lo envuelve. Es el gran gigante de la selva y tiene casi la superficie de Angkor Wat, pero ha sido fagocitado por plantas trepadoras. Un lugar especial, con templos sat¨¦lite de mucho encanto. Beng Mealea se encuentra en mitad de un antiguo camino angkoriano que comunicaba Angkor Tom con Prasat Bakan, ahora conocida popularmente como la ruta 66.
4. Banteay Srei, la galer¨ªa de arte de Angkor
Es famosa por su peque?o templo rosa, pero hay mucho m¨¢s en Bantreay Srei que sus ic¨®nicos monumentos al estilo de Angkor, como el r¨ªo de los mil lingas, en Kbal Spean, y el templo del siglo XXII de Banteay Samr¨¦. Cada vez hay m¨¢s lugares que se pueden visitar y nuevas experiencias para explorarlo, como alojarse en casas de familias locales, rutas por campos de cultivo de frutas y talleres de artesan¨ªa que animen a los visitantes a prolongar su estancia. Banteay Srei es uno de los pocos templos que no fue construido por un rey sino por un brahm¨¢n (sacerdote), pero muchos la consideran la joya de la corona del arte angkoriano. Est¨¢ hecha de piedra ros¨¢cea y contiene algunas de las tallas en piedra m¨¢s sofisticada del mundo. Es uno de los monumentos m¨¢s peque?os de Angkor, pero tambi¨¦n uno de los m¨¢s trascendentes.
5. Entre templo y templo, a cocinar
Los que sientan la llamada de la cocina camboyana pueden aprender algunos trucos apunt¨¢ndose a un taller culinario. Es una buena forma de, al regresar, contarle el viaje a los amigos y familiares: nadie quiere tragarse una plomiza sesi¨®n de fotos, pero ?qui¨¦n dice no a una suculenta cena camboyana¡? Hay muchos opciones para realizar cursos gastron¨®micos en Siem Real, como Cooks in Tuk Tuks, uno de los espacios pioneros en este tipo de talleres en la ciudad y, todav¨ªa, uno de los mejores. Tambi¨¦n podemos acudir a Lily¡¯s Secret Garden Cooking Class, donde se reciben intensas sesiones culinarias en una casa camboyana tradicional, a las afueras de Siem Reap.
6. Roulos, la antigua capital de Angkor
Los monumentos de Roulos acogieron la capital jemer durante el reinado de Indravarman I, Harihara, en el siglo IX. Entre los templos, de gran envergadura, destaca Bakong, el m¨¢s grande de todos, con una pir¨¢mide central flanqueada por ocho torres de ladrillo y piedra, diversos y m¨¢s peque?os santuarios. El complejo, rodeado por tres muros conc¨¦ntricos, se encuentra a 13 kil¨®metros al este de Siem Reap, por lo que se puede llegar f¨¢cilmente en bici desde la ciudad. En esta zona adem¨¢s han surgido varias iniciativas sociales, como un centro de tejido artesanal que produce pa?uelos de seda y algod¨®n usando telares tradicionales, o un taller que hace r¨¦plicas a escala de los principales templos.
7. Koh Ker, la otra capital
Capital jemer durante el siglo X, este extenso yacimiento arqueol¨®gico conserva una de las ciudades m¨¢s remotas de Angkor, a 127 kil¨®metros al noroeste de Siem Reap. Inaccesible y abandonada a los bosques del norte en el pasado, Koh Ker (pronunciado ko-kayer) fue el centro del imperio desde el a?o 928 hasta el 944. Seg¨²n las inscripciones, en la antig¨¹edad la ciudad era conocida como Lingapura (ciudad de los lingam) o Chok Gargyar. El principal monumento es Prasat Thorm, una pir¨¢mide de arenisca y de aspecto maya, con una base de 55 metros de ancho y una altura de 40 metros, cuyos siete niveles ofrecen una panor¨¢mica espectacular del bosque. Solo pueden subir un n¨²mero limitado de visitantes al d¨ªa, y siempre que no tengan v¨¦rtigo, pues la escalera de ascenso no es para apta para todos los p¨²blicos. Koh Ker es una de las zonas menos estudiadas del per¨ªodo angkoriano y todav¨ªa no se han realizado trabajos de restauraci¨®n en ella.
8. Preah Khan, budismo e hinduismo
Este santuario es uno de los m¨¢s grandes del complejo de Angkor; un laberinto de pasillos, sofisticadas tallas y piedras cubiertas de liquen. Es el contrapunto al demandado Ta Prohm ¨Crecibe muchas menos visitas¨C y se trata de un aut¨¦ntico templo de fusi¨®n, con una entrada dedicada al budistmo mahayana de dos puertas iguales y los otros puntos cardinales dedicados a Shiva, Visn¨² y Brahma, con sus puertas cada vez m¨¢s peque?as.
9. Phnom Kulen, la monta?a sagrada
Lugar de peregrinaci¨®n los fines de semana y d¨ªas festivos, Phom Kulen desempe?¨® un papel importante en la historia del imperio jemer, al ser all¨ª donde Jayavarman II se proclam¨® devaraja (Rey Dios) en el a?o 802, dando lugar a la creaci¨®n del reino de Camboya. Entre 1979 y 1998 fue un basti¨®n de los jemeres rojos y durante la visita no se puede salir del camino marcado bajo ning¨²n concepto, ya que podr¨ªa haber minas todav¨ªa enterradas. Entre lo m¨¢s llamativo (y visitado) se encuentra la cascada que aparece en la pel¨ªcula Lara Croft: Tomb Raider. En la parte alta de la catarata hay un templo engullido por la selva conocido como Prasat Krau Romeas, del siglo IX.
Phnom Kulen salt¨® a la fama en 2013 gracias al descubrimiento de una ciudad perdida. Gracias a la tecnolog¨ªa se recuper¨® la estructura de un gran yacimiento arqueol¨®gico, pero no ha sido posible excavar debido al peligro de las minas antipersonas que quedan enterradas en la zona.
10. Ta Prohm, fantas¨ªa a lo Indiana Jones
Este templo parece sacado de una pel¨ªcula. Fue escenario original del rodaje de Tomb Raider, oculto siembre entre un juego de luces y sombras. Lo caracterizan sus torres derruidas y muros atrapados entre los brazos de un enorme sistema de ra¨ªces. Sin duda se trata de las ruinas con m¨¢s personalidad de Angkor: no hay que perd¨¦rselas. Su encanto reside en que, a diferencia de otros monumentos de la zona, ha sido engullido por la selva y se parece mucho a lo que los primeros exploradores europeos debieron encontrar cuando se toparon con Angkor. Esa es la teor¨ªa, aunque en realidad la selva se mantiene a raya y solo se conservan los ¨¢rboles m¨¢s grandes. Aun as¨ª, en Ta Prohm uno se siente en otro mundo, y nos recuerda el poder de la frondosidad selv¨¢tica.
La visita impresiona m¨¢s durante las primeras horas del d¨ªa y conviene dedicar al menos dos horas para explorar convenientemente, entre sus laber¨ªnticos pasillos y enormes ra¨ªces.
Granjas de seda
Camboya es famosa sobre todo por su delicada seda, gran parte de la cual se teje a mano, y aunque parezca que solo hay tiendas de souvenirs industriales, hay diversos centros de tejido artesanal famosos en Siem Reap. En Angkor Silk Farm podremos ver todo el proceso de fabricaci¨®n de la seda, desde el capullo hasta las creativas piezas que se confeccionan en esta granja de Artisans Angkor, con visitas gratuitas a diario y gestionada por Les Chantiers ?coles, movimiento que pretende reavivar la cultura tradicional camboyana tras el periodo de los jemeres rojos. Su objetivo es ense?ar los oficios tradicionales a los m¨¢s j¨®venes, sobre todo de estratos desfavorecidos .
Los mercados de la ciudad tambi¨¦n son perfectos para compras de todo tipo, como el Psar Chaa, o el Angkor Night Market.
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