Ilu Ros, ilustradora: ¡°En Islandia, pudimos recorrer carreteras semivac¨ªas y acercarnos a lugares tan silenciosos como un glaciar inmenso¡±
La autora, Murciana del A?o en 2021 por su libro ¡®Federico¡¯, relata su viaje por el pa¨ªs insular europeo, donde encontr¨® la calma y la belleza paisaj¨ªstica que buscaba
Ilu Ros (Mula, Murcia, 38 a?os) es ilustradora y profeta en su tierra, pues fue nombrada Murciana del A?o en 2021 por su libro Federico (Lumen), una biograf¨ªa ilustrada de Garc¨ªa Lorca. Ahora vive en Madrid, tras pasar ocho a?os en Londres.
Aqu¨ª nos cuenta un viaje con su pareja a Islandia, donde encontr¨® la calma y la belleza paisaj¨ªstica que buscaba. Ros, al son del grupo de m¨²sica Sigur R¨®s de post-rock, con elementos de shoegazing ¡ªrock alternativo¡ª y minimalismo, descubri¨® a su paso por el sur del pa¨ªs island¨¦s carreteras solitarias, cascadas y f¨²tbol en un bar.
PREGUNTA. Para conocer la isla, ?qu¨¦ momento del a?o eligieron?
RESPUESTA. El principio del verano, en el mes de junio. Eso nos permiti¨® recorrer, en un 4x4, algunas carreteras secundarias que van hacia el centro de la isla. En invierno est¨¢n clausuradas.
P. Fue un road trip en toda regla¡
R. S¨ª, porque el coche es el ¨²nico modo de viajar por la carretera principal que da la vuelta a toda la isla. Nosotros hicimos la parte sur, desde Reikiavik, que est¨¢ en el oeste, hacia el este, ida y vuelta bordeando la costa.
P. ?Ten¨ªan claro lo que quer¨ªan ver?
R. Llev¨¢bamos tiempo ilusionados con el viaje y hab¨ªamos pensado los lugares para dormir y algunas paradas esenciales como la ruta llamada el C¨ªrculo Dorado, que incluye el g¨¦iser m¨¢s grande del pa¨ªs, llamado Gran Geysir, que lanza agua hirviendo a 80 metros de altura. Uno de los detonantes del viaje fue un documental fascinante que vi: el de la gira que hizo el grupo island¨¦s Sigur R¨®s por su pa¨ªs con su ¨¢lbum Heima. All¨ª aparece toda la variedad de paisajes de Islandia: desde prados muy verdes con ovejas, hasta zonas sin vegetaci¨®n que recuerdan a un paisaje lunar. Me sent¨ªa a menudo emborrachada de belleza.
P. ?Tuvo alguna epifan¨ªa durante el viaje?
R. Recorrer carreteras semivac¨ªas y acercarse a lugares tan silenciosos como un glaciar inmenso de tonos azules y verdosos, donde no se oye nada alrededor, me sirvi¨® para pensar en mi lugar de origen. Me acordaba, por contraposici¨®n, de los campos de almendros de Murcia, y eso dio origen a mi libro Cosas nuestras, publicado en 2020.
P. Adem¨¢s de glaciares, ?qu¨¦ otros fen¨®menos naturales vieron?
R. Visitamos la cascada Gullfoss. Vas escuchando el agua a medida que te acercas y, de repente, te topas con ella, con toda la fuerza del salto de agua que cae. Yo me emociono f¨¢cilmente por la belleza de la naturaleza: somos insignificantes ante ella.
P. ?Aprovech¨® para dibujar?
R. Como ilustradora, siempre llevo una libreta de viaje para apuntar datos y nombres y para hacer algunos bocetos. Uso un bol¨ªgrafo, no llevo otros materiales.
P. ?Se relacionaron con los lugare?os?
R. Pasamos una tarde divertida en el bar de un pueblo llamado V¨ªk ¨ª M?rdal viendo un partido de f¨²tbol del Mundial de 2018. Jugaba Islandia contra Argentina. Mi pareja y yo no somos futboleros, pero quer¨ªamos verlo por curiosidad. En el bar todos estaban muy sonrientes y beb¨ªan cerveza, pero al mismo tiempo eran recatados; las sillas estaban muy bien colocaditas, como si fuese un cine. Tras un penalti que par¨® el portero island¨¦s, el due?o del bar invit¨® a un chupito de aguardiente a todo el mundo.
P. Imagino que visitar¨ªan Reikiavik.
R. Pasamos all¨ª unos d¨ªas al final del viaje. Es peque?a y manejable. Nos pareci¨® muy bonita. Lo que m¨¢s me llam¨® la atenci¨®n es una playa inmensa de tierra volc¨¢nica negra llamada S¨®lheimasandur. All¨ª cay¨® un avi¨®n del ej¨¦rcito estadounidense en 1973 y a¨²n est¨¢n sus restos. Es una imagen muy cinematogr¨¢fica.
P. ?Tiene alg¨²n consejo para los que viajen a la isla?
R. El mismo que nos dieron a nosotros un par de amigos: que lleven algo de comer en la maleta. Como en los pueblos escasean los restaurantes y adem¨¢s son caros, para no acabar comprando comida en una gasolinera, es bueno tener cosas b¨¢sicas a mano como latas de at¨²n, pasta o cereales. Fue muy ¨²til porque ¨ªbamos a menudo a casas de particulares que alquilaban una habitaci¨®n y all¨ª pod¨ªamos cocinarnos algo.
P. ?Qu¨¦ dejan para la siguiente visita?
R. El norte de la isla y las auroras boreales. Como fuimos en verano, apenas se hac¨ªa de noche. Solamente oscurec¨ªa un par de horas y era m¨¢s bien luz de amanecer.
En corto
¿Museos o paseos? Ambas cosas. En ciudades, siempre algún museo.
¿Recuerda dónde voló por primera vez? Fue a París, en el viaje de estudios del instituto.
¿Cuál es su ciudad favorita de Europa? Roma. Vayas donde vayas sale al paso la belleza.
Mencione algo que no falta en su maleta. Un libro. Y a veces más, por si tuviera tiempo de leer mucho.
¿Cuál ha sido su destino más reciente? Calcuta, para la feria del libro.
Un plato memorable que probó durante un viaje. Me encanta el pote asturiano porque soy muy de comida caliente.
Suscr¨ªbete aqu¨ª a la newsletter de El Viajero y encuentra inspiraci¨®n para tus pr¨®ximos viajes en nuestras cuentas de Facebook, Twitter e Instagram.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.