M¨¢s contentos y tambi¨¦n m¨¢s sanos: las ventajas de ser amable
Ayudar y hacer felices a los dem¨¢s nos procura m¨²ltiples beneficios para la salud f¨ªsica y an¨ªmica. Pero hay que empezar por uno mismo
Hace una d¨¦cada, una brit¨¢nica llamada Bernadette Russell fue testigo de c¨®mo un joven era abatido a tiros por la polic¨ªa en Tottenham. Este hecho dram¨¢tico y los altercados que se sucedieron deprimieron a esta mujer, que se sent¨ªa impotente ante las desgracias del mundo. Su vida cambi¨® cuando, estando en una oficina de correos, observ¨® que a un hombre le faltaban algunos peniques para el sello de la carta que quer¨ªa mandar. Tras ofrecerle las monedas, al ver la sonrisa en su rostro y su gratitud, Russell se dijo que aquel acto de magia le hab¨ªa salido muy barato.
As¨ª naci¨® el plan de hacer durante todo un a?o un acto de amabilidad diario a un extra?o. Y as¨ª describ¨ªa el efecto en su humor: ¡°La mayor parte del tiempo sent¨ªa una especie de resplandor c¨¢lido que envolv¨ªa mi coraz¨®n y tambi¨¦n la barriga¡ Sencillamente, me sent¨ªa muy bien¡±. Fruto de esta experiencia, escribi¨® The Little Book Of Kindness: Every Day Actions To Change Your Life And The World Around You. En su libro empieza remarcando la importancia de ser amable con uno mismo, adem¨¢s de serlo con los dem¨¢s. Para Russell, esa amabilidad primaria es la que te permitir¨¢ llenarte de ese regalo para los dem¨¢s. Eso incluye frecuentar personas divertidas, leer y visionar cosas inspiradoras, mover el cuerpo, alimentarse bien y decir ¡°no¡± a lo que no nos apetece y ¡°s¨ª¡± a lo que deseamos hacer. En sus propias palabras: ¡°Tu infelicidad no mejorar¨¢ el mundo (¡) mientras que, si tratas de ser feliz, te ser¨¢ m¨¢s f¨¢cil repartir amabilidad a los dem¨¢s¡±.
A partir de ah¨ª, su experiencia altruista con personas an¨®nimas le aport¨® un sentido de conexi¨®n con el mundo y la satisfacci¨®n diaria de aportar su granito de arena, a la vez que se olvidaba de sus propios problemas. Esta amabilidad, sostiene Russell, empieza preguntando a las personas del entorno c¨®mo est¨¢n y escuchando con atenci¨®n su respuesta, haciendo las preguntas pertinentes para profundizar en lo que est¨¢n contando. A partir de ah¨ª, propone iniciativas tan sencillas como acercar un caf¨¦ y una pasta a alguien que vive en la calle y que vemos cada d¨ªa; dar conversaci¨®n a la persona que parezca m¨¢s solitaria y melanc¨®lica en una fiesta o reuni¨®n social, o elogiar el trabajo del mensajero que viene a traernos un paquete.
Sin duda, esta clase de gestos ayudan a hacer la vida m¨¢s agradable a los dem¨¢s, pero ?qu¨¦ sucede dentro de uno mismo cuando se practica esta clase de amabilidad?
Seg¨²n el neuropsic¨®logo Richard J. Davidson, que ha colaborado con Daniel Goleman, la pr¨¢ctica de la bondad puede reducir los niveles de inflamaci¨®n del organismo, mientras que un estudio realizado en 2017 con m¨¢s de 40.000 individuos concluy¨® que las personas que practican el voluntariado a lo largo de su existencia tienen mejor salud que el resto y su esperanza de vida se ve aumentada hasta cinco a?os. Otras investigaciones estimaron que el incremento de la sensaci¨®n de felicidad en el individuo aumenta casi un punto, en una escala del 0 al 10, en el momento de ser amable con otra persona. Incluso el hecho de observar un acto de bondad, seg¨²n el antrop¨®logo de la Universidad de Oxford Lee Rowland, mejora nuestro estado de ¨¢nimo, frente a un mundo inundado por el estr¨¦s y las malas noticias.
Esta visi¨®n ha sido confirmada por el doctor David Hamilton, especialista en el efecto placebo con larga experiencia en la industria farmac¨¦utica. Entre las conclusiones de su libro Los cinco beneficios de ser amable, esta actitud ha demostrado ser un ant¨ªdoto natural contra el estr¨¦s y las emociones negativas. Desde un punto de vista bioqu¨ªmico, se observa una elevaci¨®n notable de la dopamina en el cerebro, lo que se conoce coloquialmente como ¡°subid¨®n del ayudante¡±. Por otra parte, la amabilidad protege nuestro sistema cardiovascular, ya que reduce la presi¨®n arterial al producir oxitocina y liberar ¨®xido n¨ªtrico, que dilata los vasos sangu¨ªneos. Por este motivo, se considera un seguro contra la ansiedad, tanto si somos activistas de esta virtud como si la observamos.
Si tan beneficiosa es la amabilidad, ?por qu¨¦ no la practica todo el mundo? Una posible raz¨®n es que, como en todo, cuando sale de mesura acaba siendo perjudicial para quien la practica. Seg¨²n un estudio conjunto de la Columbia Business School y el University College de Londres, las personas particularmente amables presentan un 50% m¨¢s de riesgo de entrar en n¨²meros rojos. Asimismo, muchos profesionales amables de gran talento sacrifican su ¨¦xito para que lo puedan alcanzar otros. En estos casos, sin embargo, hablar¨ªamos de un grado de amabilidad patol¨®gico, lo cual no cumple con la premisa de la se?ora Russell de ser primero amable con uno mismo.
Francesc Miralles es escritor y periodista experto en psicolog¨ªa.
La amabilidad es contagiosa
— En Cadena de favores, película de 2000, un niño propone la idea de hacer favores desinteresados para mejorar el mundo. Cada individuo hará un acto amable con tres personas, que a su vez deben comprometerse a ayudar a otras tres, de modo que la cadena de favores vaya creciendo.
— Un artículo publicado por The New England Journal of Medicine recogió la historia de la donación de un riñón de un hombre de 28 años a un paciente desconocido. El impacto del gesto hizo que la esposa y familiares del trasplantado siguieran su ejemplo, llegando al final de la cadena 10 riñones a cinco hospitales distintos.
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