¡°Ten¨ªamos much¨ªsimo miedo del Brexit duro¡±
Gibraltare?os y linenses respiran aliviados tras el principio de acuerdo entre Espa?a y el Reino Unido
¡°Mi hijo dijo anoche que estamos viviendo historia, es algo grande. Queremos estar en Europa y ten¨ªamos much¨ªsimo miedo del Brexit duro porque habr¨ªa afectado a nuestro trabajo. Y a las salidas y entradas de Gibraltar, porque necesitamos una frontera fluida para la econom¨ªa¡±. La profesora Gabriela Garner resume en la calle principal del Pe?¨®n el alivio de sus 34.000 vecinos y la comarca del Campo de Gibraltar, con 300.000 habitantes, despu¨¦s de que Espa?a y Reino Unido alcanzaran este jueves un principio de acuerdo para anular la verja que separa La L¨ªnea de la Concepci¨®n y el Pe?¨®n, y evitar que esta se convierta en frontera exterior de la UE.
La alegr¨ªa por el acuerdo es contenida, no hubo celebraciones ni champ¨¢n para una fecha que los llanitos -como se conoce popularmente a los gibraltare?os- califican de ¡°hist¨®rica¡±. La pandemia arrecia. En este at¨ªpico 1 de enero las calles de Gibraltar est¨¢n casi desiertas. Es un d¨ªa festivo -hoy soleado y ventoso- habitualmente repleto de turistas, pero el coronavirus golpea con fuerza: el 15 de diciembre Gibraltar ten¨ªa 60 casos activos, hoy disparados hasta los 752 y con la nueva cepa brit¨¢nica del virus en boca de todos. Desde el pasado 23 de diciembre y hasta el 11 de enero, hay toque de queda a las 22.00, los comercios y restaurantes permanecen cerrados y solo se permite pedir comida por encargo.
La Verja se levant¨® en 1909, estuvo cerrada entre 1969 y 1982, y m¨¢s de un siglo despu¨¦s se quedar¨¢ previsiblemente sin control de acceso para atravesarla. ¡°El derribo de las barreras¡± anunciado por el Gobierno espa?ol para dentro de seis meses ser¨¢ metaf¨®rico, porque la barrera permanecer¨¢ probablemente levantada, ya que bordea el aeropuerto y evita posibles accidentes. Sin embargo, el principio de acuerdo para eliminar los controles supone un vuelco para dos poblaciones lim¨ªtrofes con un flujo constante: 30 millones de cruces anuales de la Verja, un tercio de los cuales corresponden a los 9.000 trabajadores espa?oles transfronterizos, de los 15.000 comunitarios europeos empleados en el Pe?¨®n, seg¨²n datos del Gobierno gibraltare?o.
En la desoladora plaza principal del Pe?on, este viernes Mario Glynn se mostraba esc¨¦ptico ante el anuncio oficial: ¡°Solo me creo lo anunciado cuando firmen un tratado. Vamos a ver qu¨¦ pasa ahora, en cinco meses se comer¨¢n sus palabras, que somos ya muy viejos¡±. Junto al aeropuerto, Stuart Martin, brit¨¢nico residente en La L¨ªnea y casado con una espa?ola, cruza la Verja desde hace 12 a?os y tambi¨¦n se muestra descre¨ªdo: ¡°Ahora no es complicado cruzar, pero el preacuerdo no cambiar¨¢ nada¡±. La inmensa mayor¨ªa de llanitos rechazan el debate sobre la soberan¨ªa y su nacionalidad, discusi¨®n que qued¨® al margen de las negociaciones entre Reino Unido y Espa?a.
Muchas familias a ambos lados de la Verja respiraron aliviadas ayer porque si se concreta el tratado dejar¨¢n de estar al albur de los cambios de ambos Gobiernos, condicionados por la reclamaci¨®n de la soberan¨ªa y cuyas decisiones han perjudicado durante las ¨²ltimas d¨¦cadas a los ciudadanos. ¡°Es el d¨ªa m¨¢s importante de la historia de La L¨ªnea desde su fundaci¨®n¡±, dice Lorenzo P¨¦rez-Peri¨¢?ez, presidente de la asociaci¨®n de la peque?a y mediana empresa de La L¨ªnea (Apymell) y con familiares residentes en Gibraltar. ¡°Hay que vivir aqu¨ª para sentirlo. Margallo [Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa Margallo, ministro espa?ol de Exteriores de 2011 a 2016] formaba colas de siete horas en el control como represalia. El acuerdo rebasa las expectativas de dos poblaciones unidas y es sensacional para la econom¨ªa de ambos lados¡±.
El principio de acuerdo establece que Gibraltar se integrar¨¢ en Schengen, el espacio europeo de 26 pa¨ªses sin fronteras internas, y no tendr¨¢ una frontera terrestre para las personas que entren en su territorio, aunque s¨ª una frontera aeroportuaria reforzada con agentes de la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas (Frontex). ¡°Es importante tener una agencia independiente europea para superar la pol¨ªtica de 300 a?os que nos trae hasta aqu¨ª y no tengamos que sufrir que una parte u otra asuma algo inasumible ahora en el tema de la soberan¨ªa¡±, opin¨® Fabian Picardo, ministro principal de Gibraltar, en una entrevista en la Cadena Ser. Adem¨¢s, El Pe?¨®n se podr¨¢ beneficiar de otras pol¨ªticas como un r¨¦gimen aduanero para el tr¨¢fico de mercanc¨ªas, en un marco de competencia leal en materias de fiscalidad, medio ambiente y relaciones laborales.
Si el desempleo en La L¨ªnea se eleva al 35%, en Gibraltar es residual y llega al 0,3%. En el lado espa?ol las empresas pagan el 25% por el impuesto de sociedades, mientras que del lado brit¨¢nico el tributo se reduce al 10%. La relevancia econ¨®mica del Pe?¨®n es alta para las empresas espa?olas. En 2019, Espa?a export¨® bienes a Gibraltar por valor de 1.403 millones, de los cuales 890 millones procedieron de Andaluc¨ªa, seg¨²n datos de la Agencia Tributaria.
John ?sola, vicepresidente de la C¨¢mara de Comercio gibraltare?a y del Grupo Transfronterizo, que re¨²ne a sindicatos y empresas de ambos lados de la Verja, est¨¢ encantado con el acuerdo: ¡°La sensaci¨®n fue parecida a cuando se abri¨® la frontera en 1982. Es una revoluci¨®n y parece que por fin nos han escuchado. En el siglo XXI algunos intentamos quitar barreras y adem¨¢s votamos en un 96% por permanecer en Europa [en el refer¨¦ndum del Brexit]. Es hist¨®rico, y lo importante de este acuerdo es el ambiente de estabilidad a largo plazo que crea y que atraer¨¢ inversiones con confianza, porque siempre hemos sufrido inestabilidad pol¨ªtica¡±. Esa ¡°prosperidad compartida¡± mencionada por el Gobierno este jueves podr¨ªa traducirse en un aumento de las inversiones de empresarios llanitos en La L¨ªnea en busca de suelo, el bien m¨¢s escaso en el Pe?¨®n, con solo 6,8 kil¨®metros cuadrados y precios de terrenos por las nubes.
Este viernes muy pocas familias paseaban entre las joyer¨ªas, licorer¨ªas, bancos y tiendas de ropa y tabaco cerradas. Una estampa in¨¦dita en una localidad que recibe millones de turistas cada Navidad. Solo permanec¨ªa abierta la c¨¦ntrica iglesia Saint Mary the Crowned, con cuatro feligreses rezando, qui¨¦n sabe si porque todo mejore o al menos siga igual, acosados por el Brexit y la pandemia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.