Frontex y Espa?a se enfrentan por las operaciones contra la inmigraci¨®n irregular
La pugna por el despliegue en ?frica y el creciente poder del cuerpo europeo llevaron a la agencia de control de fronteras a amenazar con su retirada
Las relaciones entre Espa?a y la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas (Frontex) son m¨¢s tensas que nunca. La pugna por el despliegue de medios materiales y el control de los operativos ha llevado a Frontex a amagar con suspender su actividad en el Estrecho y las islas Canarias ¨Dadem¨¢s del dispositivo que se despliega en cada operaci¨®n Paso del Estrecho¨D , seg¨²n tres fuentes conocedoras del episodio. La decisi¨®n corri¨® el pasado mi¨¦rcoles por los despachos, lleg¨® a comunicarse hasta a los agentes de la agencia desplegados en el archipi¨¦lago y amenaz¨® con convertirse en una crisis pol¨ªtica. El pasado viernes, Frontex sali¨® al paso con un comunicado desde su sede en Varsovia para atajar rumores y anunciar que renovaba su presencia en Espa?a un a?o m¨¢s.
Las tensiones vienen de lejos y son el reflejo de la disputa entre los cuerpos y fuerzas de seguridad nacionales y una agencia europea de fronteras con un mandato extendido. En los planes operativos para este 2021, que se cierran a principios de a?o, Frontex reclamaba a Espa?a mayor control sobre la inteligencia y el acceso a los datos de car¨¢cter personal en las fronteras espa?olas, competencias en materia de investigaciones transfronterizas (como las mafias de narcotr¨¢fico internacional) o el despliegue sobre el terreno del nuevo cuerpo de agentes europeos, un personal armado de cuya profesionalidad recelan las polic¨ªas espa?olas. La propuesta no gust¨® a los negociadores. Un mando de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado considera que aceptar las propuestas de Varsovia supone una ¡°entrega de soberan¨ªa¡± y cree que el conflicto ¡°estallar¨¢ cuando haya una desgracia¡±.
Influencia en ?frica
La negociaci¨®n de estos puntos ha estado marcada por otra de las principales batallas para Espa?a: el papel de la agencia en las islas Canarias, un enclave desde el que Frontex quiere ganar influencia en ?frica. Actualmente, la agencia trabaja con un equipo de 26 agentes, espa?oles y extranjeros, que apoyan a la Polic¨ªa Nacional en la identificaci¨®n y las entrevistas a los migrantes con el objetivo de desbaratar las redes que les facilitan el viaje. Pero este despliegue tiene una cobertura limitada y el espectacular repunte de llegadas al archipi¨¦lago, que ha recibido casi 25.000 personas en los ¨²ltimos 13 meses, impuls¨® nuevas negociaciones entre Varsovia y Madrid para lanzar una operaci¨®n conjunta con la Guardia Civil en Senegal.
El objetivo inicial era reformular la operaci¨®n Hera II, un operativo que Frontex y la Guardia Civil ya hab¨ªan desplegado de 2006 a 2019 en varios pa¨ªses de origen para cerrar la v¨ªa migratoria que se abri¨® durante la llamada crisis de los cayucos. Pero las diferencias entre unos y otros mantienen la iniciativa bloqueada.
Por un lado, Frontex ¨Dque aprob¨® un nuevo reglamento en 2019 que le da m¨¢s autonom¨ªa¨D alega la necesidad de firmar su propio acuerdo bilateral con Dakar para patrullar sus costas, se?alan fuentes espa?olas conocedoras de la negociaci¨®n. Por otro, la Guardia Civil demanda que no haya condiciones para que la agencia colabore con m¨¢s medios en origen y lo haga siempre bajo su coordinaci¨®n.
La Guardia Civil, que ya tiene acuerdos y agentes desplegados en Mauritania, Gambia y Senegal hace m¨¢s de una d¨¦cada, siempre concentr¨® el mando de las operaciones, las investigaciones y las relaciones con las autoridades locales y no tiene intenci¨®n de renunciar a ello. ¡°Hemos trabajado en todos estos ¨¢mbitos independientemente del decreciente apoyo de Frontex a lo largo de los ¨²ltimos a?os porque consideraba esta ruta cerrada¡±, afirma una fuente espa?ola. En definitiva, la agencia con m¨¢s presupuesto de la UE quiere m¨¢s poder del que los agentes espa?oles est¨¢n dispuestos a darle.
Espa?a trat¨® de plantarse en la negociaci¨®n de los planes operativos con Frontex: si no hay ayuda de la agencia europea para un despliegue conjunto en Senegal, no se aceptar¨ªan las peticiones de mandato extendido de Frontex en territorio nacional, seg¨²n otra fuente al tanto de las discusiones. Pero finalmente, tras la presi¨®n por una posible cancelaci¨®n de las operaciones, se han aceptado las exigencias de Varsovia. ¡°Es una lucha entre la realidad del terreno y la de los altos cargos que firman los reglamentos en la oficina¡±, seg¨²n esta fuente.
Frontex, que tiene presupuestados 5.600 millones de euros para los pr¨®ximos siete a?os ¨Dfrente a los 19,2 millones de 2006¨D, incorporar¨¢ 10.000 agentes propios para la vigilancia de fronteras y costas. En este contexto de crecimiento, la agencia empieza a demandar m¨¢s control e influencia sobre las operaciones y no quiere limitarse a ofrecer barcos y aviones. Los agentes espa?oles, por su parte, quieren el apoyo de la agencia en los pa¨ªses de origen, pero siempre bajo su mando. No quieren ceder espacio ni competencias en un ¨¢mbito en el que llevan a?os invirtiendo recursos propios y experiencia.
Fuentes europeas reconocen que la incorporaci¨®n de guardias de Frontex a las operaciones en Espa?a ¡°ha complicado la negociaci¨®n del programa de trabajo para el nuevo a?o¡±. El programa deb¨ªa renovarse, como en cada ejercicio, para entrar en vigor el 1 de febrero, pero las fricciones retrasaron la negociaci¨®n: Espa?a, seg¨²n fuentes conocedoras de la negociaci¨®n, pidi¨® cambios relevantes en los planes operativos; la agencia hizo una contrapropuesta, y las autoridades espa?olas no la aceptaron. El acuerdo no lleg¨® hasta 29 de enero, al filo de que el plan de trabajo no se aprobase y los dos operativos de Frontex en Espa?a se quedaran sin base legal para su continuidad. En Frontex aseguran que las operaciones nunca estuvieron en peligro y que la voluntad de la agencia siempre ha sido mantener su presencia en Espa?a.
En una entrevista con EL PA?S el pasado 4 de enero el propio vicepresidente de la Comisi¨®n Europea, Margaritis Schinas, se refiri¨® a los desencuentros entre Madrid y Varsovia.
¨C?Por qu¨¦ cree que Espa?a no ve con buenos ojos la presencia de Frontex?
¨C Eso me pregunto yo, por qu¨¦ Frontex no est¨¢ en Canarias cuando hay un serio problema y s¨ª est¨¢ masivamente en el Egeo, con cientos de agentes
Espa?a apoy¨® desde el inicio, en 2005, la creaci¨®n y puesta en marcha de Frontex, pero con el tiempo se ha mostrado reticente a implicar a los agentes de la agencia en sus competencias. ¡°Espa?a se caracteriza por ser un Estado miembro que ha invertido considerables recursos p¨²blicos en operaciones de rescates en el mar adem¨¢s de en el control de sus fronteras exteriores¡±, afirma el eurodiputado socialista Juan Fernando L¨®pez Aguilar. ¡°Eso explica que retenga bastante el protagonismo de su papel en fronteras, a diferencia de otros pa¨ªses que han recurrido m¨¢s a la agencia, como Croacia, Grecia o incluso Italia¡±.
La agencia est¨¢ actualmente bajo una presi¨®n sin precedentes, cuando est¨¢ a punto de convertirse en el primer cuerpo uniformado y armado en la historia de la UE. Las investigaciones cercan a su director, Fabrice Leggeri, sobre el que se han vertido duras cr¨ªticas por su gesti¨®n, la degradaci¨®n de las relaciones en el seno de la agencia y, sobre todo, por supuesta connivencia con la devoluci¨®n en caliente de emigrantes en la frontera greco-turca.
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