Los historiadores desmienten a Pablo Casado: ¡°La Guerra Civil la provoc¨® un golpe de Estado¡±

La sesi¨®n de este mi¨¦rcoles en el Congreso ha dejado nuevos ejemplos de la concordia imposible entre las diferentes fuerzas pol¨ªticas, con palabras gruesas, insultos, falsedades y manipulaciones hist¨®ricas.

El l¨ªder del PP, Pablo Casado, fue el m¨¢s madrugador en los trending topic cuando ley¨®, de un papel que llevaba escrito, la siguiente frase: ¡°La Guerra Civil fue el enfrentamiento entre los que quer¨ªan la democracia sin ley y los que quer¨ªan la ley sin democracia. Y nuestra Constituci¨®n es el pacto por el cual no puede haber democracia sin ley ni ley sin democracia¡±. La afirmaci¨®n, que revolvi¨® a los historiadores, apart¨® el foco de los indultos a los condenados del proc¨¦s, tema estrella de la ma?ana pese a que Pedro S¨¢nchez hab¨ªa incluido en el orden del d¨ªa los ¨²ltimos acuerdos de los consejos europeos.

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Declaraciones de CASADO sobre la GUERRA CIVIL

El catedr¨¢tico de Historia Contempor¨¢nea Juli¨¢n Casanova lamenta que se hayan pronunciado tales palabras en un parlamento. ¡°Hay gente que no quiere respetar el conocimiento. Casado se dirige a un p¨²blico amplio, dispuesto a escuchar que la Rep¨²blica no fue un r¨¦gimen leg¨ªtimo, lo que nos convierte a los historiadores en sospechosos por decir que s¨ª. Pero no hay debate historiogr¨¢fico sobre esto. La Guerra Civil la provoc¨® un golpe de Estado. La Rep¨²blica no era un imperio sin ley. Hizo reformas profundas en el ej¨¦rcito, para separar la Iglesia del Estado, en la educaci¨®n, en la aprobaci¨®n del voto femenino... Si no reconoce eso, est¨¢ planteando una mentira sobre el pasado. Si adem¨¢s cree que la Rep¨²blica destruy¨® el orden p¨²blico est¨¢ legitimando de alguna manera el golpe de 1936, que es la gran mentira del franquismo, decir que aquello era ineludible para limpiar Espa?a. Es una gran operaci¨®n de propaganda que est¨¢ aqu¨ª hace much¨ªsimo tiempo y que no ampara ninguna investigaci¨®n rigurosa¡±.

En la misma l¨ªnea se pronuncia ?ngel Vi?as, catedr¨¢tico jubilado de la Universidad Complutense de Madrid: ¡°Es una estupidez. Una de esas frases que suenan bien para quien no sabe nada, pero que no corresponde a los hechos demostrados inequ¨ªvocamente¡±.

Enrique Moradiellos, catedr¨¢tico de Historia Contempor¨¢nea de la Universidad de Extremadura y Premio Nacional por Historia m¨ªnima de la Guerra Civil (Turner), explica: ¡°Toda guerra civil empieza con un golpe de Estado. La definici¨®n de guerra civil la fij¨® el Tribunal Supremo de EEUU en 1861. Es un acto de fuerza para ocupar el poder y expulsar a los que est¨¢n. En Espa?a, la Rep¨²blica ten¨ªa muchos problemas, pero lo que vino despu¨¦s fue infinitamente peor¡±.

La equiparaci¨®n de Casado entre el r¨¦gimen leg¨ªtimo y los golpistas en 1936 acapar¨® minutos del debate. ¡°La ¨²nica ley leg¨ªtima¡±, le replic¨® el presidente del Gobierno, ¡°es la ley democr¨¢tica. Y, por tanto, espero que usted se retracte de sus palabras. Quiz¨¢ se alzaron aquellos que lo hicieron contra la ley y la democracia porque la ¨²nica ley leg¨ªtima es la de la democracia y entonces era la de la Segunda Rep¨²blica¡±. La portavoz del PSOE, Adriana Lastra, critic¨® con dureza al l¨ªder del PP: ¡°As¨ª que las cunetas de nuestro pa¨ªs est¨¢n repletas de gente que quer¨ªa una democracia sin ley, ?no? Claro, si est¨¢n ah¨ª ser¨¢ que algo hicieron, ?no? ?Qu¨¦ verg¨¹enza y qu¨¦ indecencia la declaraci¨®n que ha hecho!¡±. Tambi¨¦n censuraron a Casado ??igo Errej¨®n, de M¨¢s Pa¨ªs ¡ª¡°Los golpistas se levantaron contra el pueblo espa?ol y contra la ley vigente en Espa?a y un dem¨®crata lo deber¨ªa tener meridianamente claro¡±¡ª, y Joan Baldov¨ª, de Comprom¨ªs: ¡°Me parece peligroso que por esta competencia con Vox se oigan aqu¨ª unas palabras que nunca se atrever¨ªa a decir la derecha europea. Son absolutamente impresentables, injustas y reprobables¡±.

El debate en el Congreso dej¨® otras pol¨¦micas y momentos de tensi¨®n. Estos son algunos de ellos:

Gabriel Rufi¨¢n y los jueces prevaricadores. El portavoz de ERC asegur¨® que en Espa?a se persigue y encarcela a la gente ¡°por sus ideas¡± y acus¨® a los jueces del Tribunal Supremo de un delito, prevaricar, es decir, dictar una resoluci¨®n injusta a sabiendas, por la condena a los l¨ªderes del proc¨¦s: ¡°Creen que su sentencia est¨¢ muerta en Europa. Se llama prevaricaci¨®n y est¨¢ reconocida en portadas de diarios¡±. Las ideas independentistas no son perseguidas y el propio Rufi¨¢n las defiende leg¨ªtimamente cada semana como portavoz de Esquerra Republicana de Catalunya en el Congreso. La sentencia del Supremo fue dictada por unanimidad (siete magistrados) y el Tribunal Constitucional la ha avalado al rechazar los recursos de los condenados. El indulto que ha permitido la excarcelaci¨®n de los condenados es una medida individual que perdona la pena, pero no el delito. Rufi¨¢n tambi¨¦n se burl¨® del cambio de opini¨®n de Pedro S¨¢nchez. ¡°Se?or presidente, usted ha dicho que nunca habr¨¢ refer¨¦ndum de autodeterminaci¨®n. La verdad es que tambi¨¦n dijo que no habr¨ªa indultos, as¨ª que denos tiempo¡±. El indulto est¨¢ recogido en la Constituci¨®n. Un refer¨¦ndum unilateral ¡ªsolo en Catalu?a¡ª para decidir la independencia de parte del territorio, no.

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Rufi¨¢n ironiza con compromiso de S¨¢nchez contra autodeterminaci¨®n: "Denos tiempo"

M¨ªriam Nogueras y el robo de Espa?a. La portavoz de Junts en el Congreso se dirigi¨® al presidente del Gobierno: ¡°?Ese es su di¨¢logo, se?or S¨¢nchez? ?Ense?ar discursos de reconciliaci¨®n y concordia con una mano y permitir el robo y la represi¨®n con la otra?¡±. Se refer¨ªa al Tribunal de Cuentas, que no depende del Gobierno, y a las causas judiciales contra el independentismo, donde el poder ejecutivo tampoco interviene. Dicho tribunal reclama 5.417.899 euros que la Generalitat habr¨ªa empleado en difundir sus proyectos de ruptura con Espa?a durante el per¨ªodo comprendido entre 2011 y 2017.

Santiago Abascal y la venganza contra el Rey. El l¨ªder de Vox se refiri¨® a los indultos en varias ocasiones como ¡°amnist¨ªa¡±, cuando son figuras distintas: la primera es una medida individual que perdona la pena, pero no el delito; la segunda s¨ª es una medida de naturaleza colectiva. Tambi¨¦n asegur¨® que supon¨ªan traicionar la Constituci¨®n, pese a que la ley fundamental los recoge expresamente y los plante¨® como ¡°una venganza contra el Rey¡±, que los firm¨® cumpliendo su papel de jefe del Estado de una monarqu¨ªa parlamentaria.