Espaldarazo a la reinserci¨®n de etarras
La falta de autocr¨ªtica en el entorno abertzale choca con la flexibilizaci¨®n de las pol¨ªticas penitenciarias
Tras 42 a?os de vigencia del Estatuto de autonom¨ªa de Gernika y diez del final del terrorismo de ETA, Euskadi asume la competencia de prisiones. Su traspaso es una muestra de normalidad pol¨ªtica, pues estuvo vetado porque la gesti¨®n de las prisiones form¨® parte de la pol¨ªtica antiterrorista del Estado. Tambi¨¦n ha tenido el don de la oportunidad al coincidir con la fervorosa acogida en el Festival de Cine de San Sebasti¨¢n de la pel¨ªcula Maixabel, que contribuye a la legitimaci¨®n social de la justicia restaurativa ¡ªel modelo de justicia penal alternativo que pone el ¨¦nfasis en la reparaci¨®n del da?o padecido por la v¨ªctima¡ª.
La deslegitimaci¨®n de la violencia, la segunda oportunidad a los terroristas arrepentidos y sus efectos en la convivencia son valores en alza que ya se apuntaban en el final de la novela Patria (2016), de Fernando Aramburu, y la serie que sigui¨® a este libro. En estos valores profundiza la pel¨ªcula de Ic¨ªar Bolla¨ªn, en la que se rememoran los encuentros del etarra arrepentido Ibon Etxezarreta, encarnado en la pantalla por Luis Tosar, y de Maixabel Lasa (interpretada por Blanca Portillo), la viuda de Juan Mari J¨¢uregui, socialista y ex gobernador civil de Gipuzkoa, asesinado por el comando de Etxezarreta.
Los productos cinematogr¨¢ficos y literarios cre¨ªbles pueden m¨¢s que los discursos pol¨ªticos. De modo que hasta cr¨ªticos con la reinserci¨®n de los etarras se han visto obligados a reconocer las obras, como hizo Mariano Rajoy con Patria. Por su parte, el l¨ªder abertzale Arnaldo Otegi ha anunciado que ver¨¢ ¡°sin duda¡± Maixabel tras elogiar la actitud ¡°constructiva y respetuosa¡± de la v¨ªctima de ETA en que se basa la cinta.
La justicia restaurativa, reconocida en Maixabel, experimentar¨¢ un impulso con la asunci¨®n de las prisiones por el Gobierno vasco del PNV y el PSE, este viernes, en complicidad con el Ejecutivo central de PSOE y Podemos. M¨¢s de un tercio de los presos etarras, 66 de los 184, est¨¢n en c¨¢rceles vascas y unos 20 participan en encuentros restaurativos. Desaparecido el terrorismo, el Gobierno vasco eliminar¨¢ el trato de excepci¨®n a los presos etarras, que tendr¨¢n iguales derechos que el resto, en l¨ªnea con la pol¨ªtica de flexibilidad penitenciaria del Gobierno PSOE-Podemos. Esto se traducir¨¢ en progresiones de grado y permisos penitenciarios, adem¨¢s de los acercamientos a c¨¢rceles vascas. Progresiones de grado y permisos los administrar¨¢ el Gobierno vasco y la ¨²ltima palabra la tendr¨¢ la Audiencia Nacional.
La sinton¨ªa entre ambos ejecutivos en priorizar la reinserci¨®n de los presos y humanizar la pol¨ªtica penitenciaria permite prever un traspaso sin conflicto. Una prueba de la confianza mutua es la continuidad de los directores de las c¨¢rceles traspasadas: Zaballa (?lava), Basauri (Bizkaia) y Martutene (Gipuzkoa).
La ausencia, el fin de semana, de los nueve presos etarras de la c¨¢rcel de Pamplona en la proyecci¨®n de Maixabel y su coloquio posterior, al que asistieron Ic¨ªar Bollain y la propia Maixabel Lasa, era previsible. La pel¨ªcula lo explica en una secuencia: una mediadora se re¨²ne con un colectivo de presos sobre su reinserci¨®n y el encuentro fracasa, aunque dos eran favorables al proceso. La mediadora reconoce que los procesos restaurativos deber ser individuales para germinar porque sus participantes est¨¢n muy condicionados por su entorno.
No obstante, es cierto que la mayor¨ªa de los etarras excarcelados tras cumplir su condena, aunque rechazan regresar al terrorismo, no se arrepienten de su historia en ETA y pretenden justificarla. La responsabilidad de esta situaci¨®n, en clave pol¨ªtica, la tienen la izquierda abertzale y tambi¨¦n el PP. Cuando hace diez a?os, ETA declar¨® el final del terrorismo, unos 40 presos etarras, algunos muy representativos, se hab¨ªan arrepentido, acogi¨¦ndose al proceso de reinserci¨®n y de encuentros restaurativos con sus v¨ªctimas que dos a?os antes hab¨ªa iniciado el Gobierno de Zapatero. El PP, al llegar al Gobierno un mes despu¨¦s del final del terrorismo, elimin¨® el proceso de reinserci¨®n y los encuentros restaurativos. A su vez, la izquierda independentista prometi¨® a los presos una salida pr¨®xima de las c¨¢rceles sin reinserci¨®n. El resultado ha sido que la mayor¨ªa ha cumplido ¨ªntegramente su condena sin autocr¨ªtica por su pasado etarra.
Jes¨²s Loza, antiguo Comisionado para la Convivencia ¡ªun cargo designado en 2012 por el lehendakari Patxi L¨®pez para fomentar el entendimiento social tras el cese de ETA¡ª, suele asegurar que si al finalizar el terrorismo, cuando el colectivo de presos etarras estaba desorientado, el Gobierno de Rajoy hubiera continuado la reinserci¨®n con acercamientos de presos y progresiones de grado, habr¨ªan aumentado sustancialmente los reinsertables. El PP, con Pablo Casado, sigue la pol¨ªtica de vuelo corto en la oposici¨®n: utilizar las iniciativas favorables a la reinserci¨®n ¡ªacercamientos, progresiones de grado, encuentros restaurativos, traspaso de prisiones¡ª para desgastar al Gobierno PSOE-Podemos cuando la legislaci¨®n penitenciaria las recomienda y favorecen la convivencia. Derrotado el terrorismo por la democracia, la generosidad del Estado es la mejor pedagog¨ªa.
As¨ª, la reclamaci¨®n social de autocr¨ªtica al abertzalismo por su pasada complicidad con ETA, que refleja Maixabel, genera debate en su seno. Por eso, Otegi reconoce a la v¨ªctima, Maixabel Lasa. Pero Otegi elude lo fundamental: reconocer la valent¨ªa de Ibon Etxezarreta, el exetarra autocr¨ªtico con su historial en la banda. Es la asignatura pendiente del abertzalismo ante una creciente demanda social de autocr¨ªtica.
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