Una jueza argentina procesa a Mart¨ªn Villa por cuatro homicidios policiales en los a?os setenta

La jueza argentina Mar¨ªa Servini de Cubr¨ªa, que instruye desde 2010 una causa por los cr¨ªmenes del franquismo abierta en Buenos Aires, ha emitido un auto de procesamiento contra Rodolfo Mart¨ªn Villa, ministro de Relaciones Sindicales y de Gobernaci¨®n (Interior) en los primeros Gobiernos tras la muerte de Franco. La magistrada argentina considera a Mart¨ªn Villa ¡°prima facie [a primera vista], autor penalmente responsable del delito de homicidio agravado, reiterado en al menos cuatro oportunidades, del que resultaron v¨ªctimas Pedro Mar¨ªa Mart¨ªnez Ocio, Romualdo Barroso Chaparro, Francisco Aznar Clemente y Germ¨¢n Rodr¨ªguez S¨¢iz¡±. Los tres primeros murieron por disparos de la Polic¨ªa Armada en la brutal carga del 3 de marzo de 1976 en Vitoria durante una protesta laboral en la que murieron otros dos obreros. La cuarta v¨ªctima que la jueza atribuye al exministro de la Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico (UCD) de Adolfo Su¨¢rez cay¨® abatida por disparos de la fuerza p¨²blica en los sanfermines de Pamplona en 1978.

Fuentes del entorno de Mart¨ªn Villa se?alan que recurrir¨¢ ante la C¨¢mara de Apelaci¨®n argentina tanto el auto de procesamiento como la fianza impuesta y recuerdan que en 2017, dicha c¨¢mara ya revoc¨® la orden de detenci¨®n dictada por Servini. Los abogados del exministro aseguran que la juez ha dictado el auto de procesamiento 12 meses despu¨¦s de que este declarase por videoconferencia cuando, ¡°seg¨²n las leyes argentinas deb¨ªa haberlo hecho en un plazo de diez d¨ªas¡± y se?alan que varias de las muertes de las que se le responsabiliza se produjeron en marzo de 1976 ¡°cuando ¨¦l era ministro de Relaciones Sindicales, sin competencia sobre la Polic¨ªa¡±.

En el auto, de 970 p¨¢ginas, la magistrada argentina decreta la ¡°prisi¨®n preventiva¡± del exministro, de 87 a?os, aunque reconoce que esta ¡°no se har¨¢ efectiva¡± porque instancias judiciales superiores del pa¨ªs sudamericano ya revocaron en julio de 2017 la orden de detenci¨®n que Servini hab¨ªa lanzado contra ¨¦l en 2016. Servini ordena tambi¨¦n ¡°el embargo¡± de los bienes del exministro ¡°hasta cubrir la suma de 1.134.000.000 pesos¡±, es decir, 9,8 millones de euros. Tambi¨¦n libra peticiones a diversos juzgados espa?oles para que le remitan ¡°fotocopias certificadas del sumario¡± que se instruyera por el asesinato de Arturo Ruiz Garc¨ªa, de 19 a?os, obrero y estudiante, la ma?ana del 23 de enero de 1977 en Madrid por un grupo de ultraderechistas identificados como Guerrilleros de Cristo Rey, mientras asist¨ªa a una manifestaci¨®n convocada para reclamar la amnist¨ªa de los presos pol¨ªticos de la dictadura franquista; as¨ª como sobre los sucesos de Vitoria el 3 de marzo de 1976, en los que ¡°resultaron asesinados cinco obreros¡°.

La magistrada Servini tambi¨¦n solicita a la justicia espa?ola copias de los sumarios abiertos por ¡°el asesinato de Rafael Gomez J¨¢uregui, veterano luchador antifranquista, por parte de efectivos de la Guardia Civil el 12 de mayo de 1977 en Renter¨ªa durante la represi¨®n llevada a cabo por las fuerzas de seguridad del Estado en la denominada semana Pro Amnist¨ªa¡±; y por el ¡°asesinato de Jos¨¦ Mar¨ªa Zabala el 8 de septiembre de 1976 por el guardia civil Enrique Pascual Diogo en Hondarribia durante la represi¨®n de una manifestaci¨®n¡±; adem¨¢s de por el ¡°asesinato de Mar¨ªa Norma Menchaca por parte de grupos parapoliciales el 9 de julio de 1976 en Santurce durante una manifestaci¨®n para solicitar amnist¨ªa para los presos pol¨ªticos¡±.

La magistrada reclama, adem¨¢s, la ¡°historia cl¨ªnica de Francisco Javier N¨²?ez, que hab¨ªa ingresado en el Hospital de Basurto entre los d¨ªas 15 y 29 de mayo de 1977 y hab¨ªa sido brutalmente golpeado por efectivos antidisturbios de la polic¨ªa armada de una manifestaci¨®n en Bilbao¡± y ¡°las actuaciones penales instruidas por el asesinato de Jos¨¦ Luis Cano P¨¦rez por disparos de efectivos de la polic¨ªa armada en Pamplona el 14 de mayo de 1977¡å.

La jueza atribuye a Mart¨ªn Villa la ¡°autor¨ªa mediata¡± de esas muertes. Se?ala que ¡°toda la estructura represiva montada por el r¨¦gimen franquista sigui¨® funcionando bajo la direcci¨®n ahora de la nueva dirigencia pol¨ªtica a cargo del proceso de transici¨®n¡± y que ¡°durante los primeros a?os se mantuvieron las normas, estructuras, agentes y las pr¨¢cticas represivas propias de aquel, y se les asegur¨® a las fuerzas del orden p¨²blico la impunidad de su actuaci¨®n por todos los medios a su alcance¡±. Tambi¨¦n recuerda que Mart¨ªn Villa ¡°ocup¨® una posici¨®n preponderante en esa estructura jerarquizada de poder a trav¨¦s de la cual se propagaron las ¨®rdenes hacia quienes resultaron los ejecutores directos de los delitos¡±. Sobre los sucesos de Pamplona de 1978, la magistrada se?ala que ¡°fue, como m¨¢xima autoridad del Orden P¨²blico ¨Cministro del Interior¨C, que Villa imparti¨® las directivas generales y a veces particulares en esa materia, respecto de cu¨¢les eran las manifestaciones o reuniones que no deb¨ªan tolerarse o que deb¨ªan disolverse¡±.

Mart¨ªn Villa, imputado desde 2014 por delitos de lesa humanidad, declar¨® en septiembre de 2020 por videoconferencia ante la jueza argentina: ¡°He venido a defenderme, porque me rebelo a vivir en presunci¨®n de culpabilidad en vez de presunci¨®n de inocencia, pero sobre todo defender que es imposible que en la Transici¨®n hubiese un genocidio¡±. El exministro reconoci¨® que en los sucesos de Vitoria de 1976 ¡°ciertamente hubo errores, graves errores, y comportamientos policiales contrarios al respeto a los derechos de las personas y, por tanto, ser¨ªa leg¨ªtimo que se reclamara una reparaci¨®n justa. Pero una cosa es comprender el dolor de las v¨ªctimas y la necesaria reparaci¨®n y otra es aceptar un relato de lo ocurrido que lleva a la querella a afirmar incluso que en la Transici¨®n espa?ola hubo delitos de genocidio y cr¨ªmenes de lesa humanidad¡±, a?adi¨®. Los expresidentes Felipe Gonz¨¢lez, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar y Mariano Rajoy expresaron a la magistrada Servini su ¡°asombro e increduliad¡± por la imputaci¨®n de Mart¨ªn Villa, al que apoyaron p¨²blicamente.