Pegasus: relato de un rastreo masivo
Cronolog¨ªa de los ataques del programa esp¨ªa a los m¨®viles de 63 personas vinculadas al movimiento independentista
Pegasus, el programa esp¨ªa m¨¢s potente del mundo, se ha colado en silencio en los terminales de decenas de pol¨ªticos y activistas en Espa?a (en algunos casos, cuando estaban en el extranjero). A unos los sorprendi¨® despu¨¦s de la sentencia del proc¨¦s en octubre de 2019 y de la ola de disturbios que se desat¨® en Catalu?a tras esa condena del Tribunal Supremo a los nueve arquitectos del desaf¨ªo independentista. Otros recibieron su visita en los proleg¨®menos de las negociaciones para formar Gobierno. E incluso entr¨® en los despachos de La Moncloa, en plena crisis migratoria con Marruecos en 2020. La lista de v¨ªctimas conocidas se limitaba, hasta el lunes, a personas vinculadas al movimiento independentista. Pero ese d¨ªa, el Gobierno revel¨® que el m¨®vil del presidente, Pedro S¨¢nchez, y el de su ministra de Defensa, Margarita Robles, tambi¨¦n fueron monitorizados en 2021.
Este es el relato ¡ªa¨²n lleno de inc¨®gnitas¡ª del rosario de ataques (tentativas de asalto) e infiltraciones (hackeos) de un virus que, seg¨²n su vendedor, la firma israel¨ª NSO Group, solo pueden adquirir organismos gubernamentales como polic¨ªas, ej¨¦rcitos y servicios de inteligencia para prevenir el crimen organizado y el terrorismo.
La semana que termina ha sido vertiginosa para el caso Pegasus. El independentismo lanz¨® el 18 de abril una gran campa?a de denuncia contra los seguimientos, que, desde el minuto uno, atribuy¨® al CNI. La prueba que esgrim¨ªan era un informe realizado por Citizen Lab, un grupo ligado a la Universidad de Toronto (Canad¨¢) y especializado en ciberseguridad. En ¨¦l figuraban los nombres de 63 pol¨ªticos, abogados y activistas independentistas cuyos m¨®viles hab¨ªan sido dianas de Pegasus en jornadas clave para el movimiento secesionista catal¨¢n (aunque, la inmensa mayor¨ªa, no antes sino tras la fallida declaraci¨®n de independencia de 2017).
La petici¨®n inicial de explicaciones por parte del Govern no tuvo eco. Pero en pocos d¨ªas, en medio del choque interno en el Ejecutivo de PSOE-Unidas Podemos sobre c¨®mo responder al esc¨¢ndalo, el silencio dio paso a una informaci¨®n complementaria: fuentes del CNI aseguraban no tener nada que ver con la lista de Citizen Lab, pero s¨ª admit¨ªan que el organismo hab¨ªa espiado en alg¨²n momento, con autorizaci¨®n judicial, a personas vinculadas al movimiento independentista catal¨¢n. Este jueves se supo que entre esos espiados legalmente, una veintena, estuvo el actual president, Pere Aragon¨¨s. Al mismo tiempo, el Gobierno comunic¨® que los m¨®viles de S¨¢nchez y de Robles tambi¨¦n hab¨ªan sido intervenidos en 2021, un ataque que calific¨® de ¡°externo¡± e ¡°ileg¨ªtimo¡±.
El camino al 1-O
Pegasus hace a?os que rondaba algunos m¨®viles de activistas del independentismo catal¨¢n, seg¨²n Citizen Lab. Este grupo tiene identificados en septiembre de 2015 (pocos d¨ªas despu¨¦s de la multitudinaria manifestaci¨®n de la Diada y antes de las elecciones del d¨ªa 27 donde el independentismo se impuso) intentos de entrar en el m¨®vil del entonces l¨ªder de la entidad secesionista Asamblea Nacional Catalana (ANC), Jordi S¨¤nchez. Ya en 2017 figuran siete registros en el m¨®vil de S¨¤nchez, durante los preparativos del refer¨¦ndum ilegal del 1-O. Se consumaron cuatro entradas al contenido del dispositivo y tres fracasaron.
El modo operativo del software es m¨²ltiple. A veces env¨ªa SMS con falsas informaciones o con enlaces a conocidos medios de comunicaci¨®n, para que el usuario pinche. ¡°El TC admite a tr¨¢mite el recurso del Parlament contra la aplicaci¨®n del 155¡å, rezaba un SMS que recibi¨® en febrero de 2018 Marcel Mauri, pero que no abri¨®. Mauri lideraba entonces ?mnium Cultural, despu¨¦s de que la justicia enviara a prisi¨®n preventiva a su presidente, Jordi Cuixart, y al de la ANC, S¨¤nchez. Un mes despu¨¦s, la Guardia Civil aterrizaba en la sede de la entidad en busca de ordenadores, documentos y m¨®viles usados en los preparativos del 1-O. Pegasus intervino tambi¨¦n, seg¨²n Citizen Lab, el m¨®vil de la esposa de Cuixart, la periodista Meritxell Bonet, durante la recta final del juicio en el Supremo, en 2019. El virus pudo escuchar as¨ª las charlas de 10 minutos que el exl¨ªder de ?mnium manten¨ªa a diario con su esposa desde la prisi¨®n madrile?a de Soto del Real.
Eran momentos convulsos para el independentismo postproc¨¦s. Cuando a Laura Borr¨¤s, actual presidenta del Parlament, la tanteaban para la cartera de Cultura ¡ªtras las elecciones de 2017 que arrojaron una mayor¨ªa parlamentaria secesionista¡ª, le lleg¨® el primer ataque en su m¨®vil. ¡°Era un SMS que me invitaba a revisar mi historial de la Seguridad Social¡±, recuerda la l¨ªder de Junts. En mayo de 2019 recibi¨® un segundo mensaje, esta vez por WhatsApp y con un enlace, supuestamente una noticia de la agencia Europa Press, antes de las elecciones europeas en las que Carles Puigdemont sali¨® elegido. El ¨²ltimo cebo de Pegasus del que tiene constancia Borr¨¤s lleg¨® el 29 de julio de 2019, cuando era portavoz de Junts en el Congreso.
El juicio y la sentencia
Los informes de los expertos canadienses muestran un aumento claro en el uso de Pegasus contra independentistas cuando comienza el juicio en el Tribunal Supremo, en febrero de 2019, y tras la sentencia condenatoria, que se produjo en octubre de ese a?o y que fue respondida con fuertes disturbios, algunos muy violentos, en Barcelona. Mauri, por ejemplo, fue infectado en dos ocasiones durante el juicio, cuando se comunicaba a diario por tel¨¦fono con la defensa de Jordi Cuixart.
Esa sensaci¨®n de sincron¨ªa entre los ataques de Pegasus y el periodo comprendido entre el juicio y la sentencia la comparte Carles Riera, uno de los cuatro diputados de la CUP v¨ªctima del virus. En su caso, la investigaci¨®n de Citizen Lab ha concluido que al menos entraron cuatro veces en su iPhone con SMS ¡°muy bien hechos¡±, dice, en enero y febrero de 2019. No recuerda haber pulsado los enlaces. Versaban sobre la Seguridad Social, su entidad bancaria, correos y un medio que suele leer. ¡°De entre todo, lo que m¨¢s me duele es que la intimidad de mi entorno fuera vulnerada¡±, afirma.
La europarlamentaria Diana Riba (ERC) cuenta que su tel¨¦fono fue infectado en octubre de ese a?o, ¡°justo despu¨¦s de la sentencia¡±. Viajaba de su casa de Sant Cugat del Vall¨¨s a la sede del partido cuando la llam¨® un asistente. Este le dijo, extra?ado, que hab¨ªa recibido una llamada en su tel¨¦fono y que, al descolgar, escuch¨® la grabaci¨®n de una antigua conversaci¨®n entre ellos. Riba, esposa del exconsejero condenado Ra¨¹l Romeva, relata que en aquellos d¨ªas hablaba con los abogados sobre el recurso a la sentencia condenatoria del proc¨¦s.
La l¨ªder de la ANC, Elisenda Paluzie, tuvo dos hackeos certificados de Pegasus: el primero tras la sentencia, el 21 de octubre, y el segundo en 2020. Cuenta que desde que en 2018 accedi¨® al cargo, donde reemplaz¨® a S¨¤nchez, ha tenido cuatro m¨®viles, los tres primeros infectados. Un amigo certific¨® el primer hackeo y Citizen Lab los dos siguientes. Uno de los cebos que recibi¨® era un falso art¨ªculo de una revista en ingl¨¦s.
Por esas fechas, Pegasus tambi¨¦n toc¨® la puerta del jefe de filas de Junts en el Parlament, Albert Batet. Una de las dos infecciones certificadas por Citizen Lab ocurri¨® en la celebraci¨®n del pleno que aprob¨® un rechazo a la sentencia, el 24 de octubre. La otra, en julio de 2020, coincidiendo con el debate interno para la creaci¨®n de Junts per Catalu?a.
La investidura de S¨¢nchez
El comienzo de 2020 fue de alto voltaje para la pol¨ªtica espa?ola, con la inc¨®gnita de si Pedro S¨¢nchez lograr¨ªa que ERC apoyase su investidura. Los d¨ªas 4, 5 y 13 de enero la v¨ªctima de Pegasus fue ¡ªseg¨²n asegura ¨¦l mismo¡ª el presidente de la Generalitat, Pere Aragon¨¨s, entonces n¨²mero dos de Quim Torra en el Govern y coordinador nacional de ERC. Recibe tres SMS trampa, simulando noticias de dos conocidos medios catalanes. ¡°Se estaba debatiendo la investidura de Pedro S¨¢nchez y hab¨ªa mucha inquietud sobre cu¨¢l ser¨ªa el voto de ERC¡±, recuerda. Citizen Lab no ha podido establecer las fechas de la intrusi¨®n, aunque considera que ocurri¨®.
El jueves, fuentes del entorno del president a?adieron que este fue espiado tambi¨¦n en 2019, durante los disturbios en respuesta a la sentencia. Ese d¨ªa, la directora del CNI, Paz Esteban, explic¨® ¡ªseg¨²n contaron algunos diputados presentes en la comisi¨®n de secretos oficiales del Congreso¡ª que un tel¨¦fono de Aragon¨¨s hab¨ªa sido intervenido por el organismo bajo el amparo de una orden judicial. Otras 17 personas vinculadas al movimiento secesionista tambi¨¦n fueron rastreados por el CNI con autorizaci¨®n judicial, seg¨²n estas fuentes.
Aragon¨¨s desempolv¨® un viejo m¨®vil para someterlo al escrutinio de Citizen Lab tras conocer los ataques de Pegasus destapados en julio de 2020 por EL PA?S y The Guardian contra el entonces presidente del Parlament, Roger Torrent; el exconsejero de Exteriores Ernest Maragall; y la exdiputada de la CUP Anna Gabriel. Torrent tiene dos tel¨¦fonos, uno personal y otro que usaba como m¨¢xima autoridad del Parlament. Este ¨²ltimo sufri¨® el intento de hackeo a trav¨¦s de una videollamada perdida de WhatsApp. Tambi¨¦n recibi¨® un SMS que simulaba una noticia de una querella que la Fiscal¨ªa ultimaba en su contra. Las agresiones ocurrieron en abril y mayo de 2019. Torrent recuerda durante esos meses encuentros con representantes del Consejo de Europa para denunciar ¡°la represi¨®n del Estado al independentismo¡±.
Otra persona que decidi¨® revisar su m¨®vil tras el caso de Torrent fue la exconsejera y ahora diputada Meritxell Serret ¡ªque huy¨® a B¨¦lgica con Carles Puigdemont en 2017 y regres¨® en 2021¡ª. El dispositivo era un iPhone, con un n¨²mero de tel¨¦fono belga, que le entreg¨® la Generalitat para ejercer como delegada del Govern en Bruselas. All¨ª particip¨® en reuniones con eurodiputados y pol¨ªticos de otros pa¨ªses, y mantuvo conversaciones con sus letrados belgas para organizar su vuelta. Supo que la hab¨ªan espiado dos meses despu¨¦s de volver. ¡°Sientes indignaci¨®n. Esto ha sido como una onda expansiva que ha ido mucho m¨¢s all¨¢ del independentismo¡±, dice. Tambi¨¦n hubo interceptaciones en territorio suizo, portugu¨¦s y alem¨¢n.
El m¨®vil del predecesor de Aragon¨¨s, Quim Torra, fue hackeado ocho veces por el centinela israel¨ª, siempre seg¨²n Citizen Lab. La infiltraci¨®n se desarroll¨® entre abril y julio de 2020. El entorno de Torra recuerda que en ese momento estaba sobre la mesa un posible adelanto electoral, por su choque con ERC. Sin embargo, la ¡°inmundicia¡±, como califica el expresident el supuesto espionaje, podr¨ªa ser previa, sostienen esas mismas fuentes cercanas a Torra, que ha cambiado de l¨ªnea telef¨®nica tres veces en su paso por la Generalitat. Al acceder al cargo hab¨ªa dejado su n¨²mero de siempre, y el segundo aparato, que era propiedad de Presidencia, fue formateado. Por tanto, fue imposible para los expertos canadienses establecer si hab¨ªa infecciones o intentos de entrada en esos dos primeros m¨®viles.
¡°Yo daba por hecho que nos espiaban¡±, insiste la ya exdiputada del Parlament Elsa Artadi. ¡°Por este mismo tel¨¦fono hablo con mi madre y con Puigdemont¡±, a?ade, tras recordar que ella nunca pinch¨® en los cebos que recibi¨®, y que otros altos cargos, por precauci¨®n, optaron por usar el programa de mensajer¨ªa Signal en lugar de WhatsApp. Los h¨¢bitos tambi¨¦n le cambiaron a M¨ªriam Nogueras, diputada de Junts en el Congreso. Dice que se ha acostumbrado a dejar el m¨®vil en su bolso con la plataforma musical Spotify conectada cuando entra en una reuni¨®n de alto voltaje pol¨ªtico. Aunque Citizen Lab no ha acreditado la fecha de la tentativa de intrusi¨®n en su tel¨¦fono, Nogueras cree que el centinela israel¨ª trat¨® de colarse en su terminal durante las semanas previas a relevar a Borr¨¤s en el Congreso, en febrero de 2021.
Las respuestas de los afectados rezuman rabia. ¡°A m¨ª no me han investigado, me han espiado. Y eso es vomitivo¡±, se queja el alcalde de Mollerussa, Marc Solsona, exdiputado de Junts en el Parlement. Sergi Sabri¨¤, uno de los cerebros de ERC, que tambi¨¦n figura en la lista de Citizen Lab, sostiene que fue espiado cuando dirig¨ªa el grupo parlamentario, entre 2018 y 2021. ¡°Me han confirmado 17 intentos de infiltraci¨®n en el tel¨¦fono¡±, apunta. ¡°Me toca la moral que accedieran incluso a las fotos de mi hija¡±.
El centinela que dinamit¨® el secreto de los abogados
El diputado de Junts Joaquim Jubert visitó más de un centenar de veces a su amigo Jordi Sànchez, exlíder de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), en las prisiones de Soto del Real (Madrid) y Lledoners (Barcelona). Sus viajes penitenciarios arrancaron dos meses después de que Sànchez pisara por primera vez el penal madrileño en octubre de 2017 por su papel en el referéndum ilegal del 1-O. “Intercambiábamos confidencias y recomendaciones de libros: Theodor Kallifatides, Leonardo Padura, Gianrico Carofiglio...”, relata Jubert.
El móvil de este parlamentario catalán comenzó a echar humo el pasado 18 de abril. “Empezaron a llamarme mis clientes del despacho de abogados tras enterarse de que fui espiado con Pegasus”, recuerda Jubert, un letrado con 35 años de oficio cuyo teléfono fue infiltrado por el programa israelí en octubre de 2019, según el laboratorio de ciberseguridad canadiense Citizen Lab. Pese a que él no defendió a ninguno de los acusados del procés, Jubert cree que se convirtió en objetivo del programa espía por su amistad con Sànchez. Una singularidad que —critica— vulneró su secreto profesional y la privacidad de las comunicaciones.
La táctica de husmear en las tripas tecnológicas de abogados fue también la treta de Pegasus para rastrear, según la lista de Citizen Lab, a los letrados del expresidente Carles Puigdemont, prófugo en Bruselas. Fuentes próximas al que fuera jefe de la Generalitat entre 2016 y 2017 enmarcan esta estrategia en una vía para cercar al entorno de un político “obsesionado” con la seguridad —y por tanto difícil de pinchar— que usa un móvil sin aplicaciones que renueva cada mes.
Gonzalo Boye, abogado de Puigdemont, recibió 18 SMS trampa con el malware israelí entre enero y mayo de 2020. Y fue infectado en octubre de ese último año cuando ultimaba escritos en representación del exjefe de la Generalitat dirigidos al Constitucional, al Supremo y al Tribunal General de la UE. Boye también tramitaba asuntos de clientes ajenos al procés. “El espionaje vulnera el secreto profesional, la relación entre abogado y cliente... Es tan simple como imaginarse un pleito donde una parte conoce lo que el abogado de la otra habla con su defendido”, se queja.
El letrado Jaume Alonso-Cuevillas, que fue víctima de una infección de Pegasus en una fecha indeterminada, siempre según Citizen Lab, estima que el virus aterrizó en su móvil cuando manejaba información sensible sobre Puigdemont. “Han entrado en mi Dropbox [almacenamiento en la nube], han visto mi estrategia de defensa, las euroórdenes...”, lamenta este catedrático de Derecho Procesal. Alonso-Cuevillas sostiene que apareció en la mirilla de Pegasus cuando asumió la defensa del expresidente catalán, un mes antes del referéndum ilegal del 1-O de 2017. Y asegura que, desde entonces, nota “cosas raras” en su iPhone: “Interferencias, baja duración de batería...”.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.