El exviceconsejero andaluz de Salud fichado por Asisa fue clave en la estrategia de privatizaci¨®n de la Junta

El fichaje del antiguo n¨²mero dos de la Consejer¨ªa andaluza de Salud, Miguel ?ngel Guzm¨¢n, por la aseguradora privada Asisa apenas tres meses despu¨¦s de dejar su puesto ha abierto una nueva crisis en la gesti¨®n de la sanidad p¨²blica por parte de la Junta de Andaluc¨ªa, que ya estaba siendo muy criticada por el colapso en la atenci¨®n primaria, unas listas de espera desbordadas, contratos a dedo con la privada para atajarlas y la huelga indefinida de los letrados del Servicio Andaluz de Salud (SAS), cuya actuaci¨®n es esencial para gestionar esas adjudicaciones. El Gobierno andaluz ¨Dque asegura que desconoc¨ªa el salto a la privada del exviceconsejero¨D, ha abierto una investigaci¨®n interna para determinar si su contrataci¨®n vulnera la ley de incompatibilidades de altos cargos. Pretende as¨ª atajar las cr¨ªticas de toda la oposici¨®n que ven en la conducta de Guzm¨¢n un ejemplo de la connivencia del Ejecutivo del popular Juan Manuel Moreno con el sector privado sanitario. El exviceconsejero inform¨® la tarde de este jueves en un escueto comunicado que aplaza su fichaje por la aseguradora hasta que se conozca el informe que est¨¢ elaborando la Junta de Andaluc¨ªa sobre su posible incompatibilidad.

Antes, acerca del fichaje, fuentes del Gobierno andaluz se?alaron que ¡°se trata de una decisi¨®n personal que no implica a la Junta¡±, aunque reconocen que existe malestar por que Guzm¨¢n haya decidido fichar por una aseguradora privada con tanta celeridad y creen que se ha equivocado al dar ese paso y sugieren que Guzm¨¢n deber¨ªa renunciar al cargo.

Durante los a?os que Guzm¨¢n ejerci¨® cargos de alta responsabilidad en la Consejer¨ªa de Salud no han parado de sucederse controversias relacionadas con el deterioro de la gesti¨®n del sistema andaluz de salud y con la firma de contratos y conciertos con la sanidad privada. ¡°No es la primera vez que altos cargos han pasado a ser directivos de la sanidad privada, pero aqu¨ª se trata de una persona que ha tenido responsabilidad en la asignaci¨®n directa de presupuestos a Asisa, lo que explica por qu¨¦ ahora le contrata¡±, opina Sebasti¨¢n Mar¨ªn Recio, portavoz de Marea Blanca en Andaluc¨ªa, que el pr¨®ximo domingo ha convocado manifestaciones en todo Andaluc¨ªa en defensa de la sanidad p¨²blica.

Cuando se conoci¨® la dimisi¨®n de Guzm¨¢n, en diciembre de 2023, la interpretaci¨®n fue un¨¢nime: con su salida el Gobierno lo se?alaba como uno de los m¨¢ximos responsables del caos en la gesti¨®n sanitaria y del deterioro de la sanidad p¨²blica andaluza. ¡°Nuestro mayor recelo no es que ahora se vaya a la privada, sino que ven¨ªa de ese sector, y su gesti¨®n ha demostrado que ten¨ªamos raz¨®n¡±, explica Antonio Mac¨ªas, responsable de Sanidad de UGT-A.

21.668 contratos a dedo y amago de privatizar la atenci¨®n primaria

Guzm¨¢n se incorpor¨® a la administraci¨®n auton¨®mica en 2019 como gerente del SAS y en 2022 pas¨® a ser viceconsejero de Salud, a las ¨®rdenes de Catalina Garc¨ªa. Durante el desempe?o de ambos cargos, la consejer¨ªa ampli¨® la contrataci¨®n expr¨¦s autorizada durante la pandemia casi un a?o m¨¢s de lo que se indicaba en la instrucci¨®n de la Consejer¨ªa de Hacienda de 2021, en la que se advert¨ªa sobre el ¡°car¨¢cter residual y excepcional¡± de estas adjudicaciones. Entre 2020 y 2022 se firmaron 21.668 contratos de emergencia por valor de 1.600 millones de euros. 43,67 millones fueron a parar a 11 centros propiedad del Grupo HLA, en el que Asisa decidi¨® agrupar en 2016 a los hospitales que gestiona, que llevaban la firma de Guzm¨¢n como gerente del SAS. En este tiempo tambi¨¦n se realizaron renovaciones extempor¨¢neas de un concierto con una de sus cl¨ªnicas por valor de 5,2 millones de euros.

Fuentes del entorno del exviceconsejero sostienen que el grupo HLA no es lo mismo que la aseguradora Asisa, que es donde ¨¦l se incorporar¨ªa, para justificar que no existe incompatibilidad. A la espera de que concluya la investigaci¨®n de la Consejer¨ªa de Justicia ¨Dque asegura que estar¨¢ lista antes de que termine la semana¨D, los interlocutores del Gobierno andaluz precisan que el puesto como director m¨¦dico en Andaluc¨ªa de Asisa que va a desempe?ar Guzm¨¢n a partir del pr¨®ximo lunes no implica relaci¨®n alguna con las administraciones p¨²blicas o el SAS. Sus tareas, indican, se circunscriben a la valoraci¨®n de los seguros a particulares y del cuerpo m¨¦dico de Asisa.

En 2022, la consejer¨ªa public¨® una orden de tarificaci¨®n en la que actualizaba los precios de los conciertos con la sanidad privada, abr¨ªa las puertas a la privatizaci¨®n de la atenci¨®n primaria y permit¨ªa que los centros sanitarios p¨²blicos pudieran ser utilizados por profesionales del sector privado. La disposici¨®n soliviant¨® a partidos pol¨ªticos, sindicatos y sociedad civil, hasta el punto de obligar al Gobierno andaluz a rectificar y eliminar esos dos preceptos de la orden para conseguir firmar un acuerdo por la Atenci¨®n Primaria con los principales sindicatos.

En octubre de 2023 y despu¨¦s de un a?o sin publicar las listas de espera, la consejera de Salud, Catalina Garc¨ªa, anunci¨® dos macroconciertos por 734 millones con la sanidad privada a lo largo de cuatro a?os para reducir sus cifras, que hab¨ªan crecido de manera alarmante en ese per¨ªodo. La Junta explic¨® que inauguraba as¨ª un nuevo modelo de contrataci¨®n para agilizar los conciertos con los hospitales privados; sin embargo, la impugnaci¨®n de uno de los pliegos, oblig¨® a paralizar los tr¨¢mites en noviembre. En febrero de este a?o, ya con Guzm¨¢n fuera de la Junta, Garc¨ªa anunciaba un tercer plan de choque de 283 millones, del que el 45% se dedicar¨ªan a contratos a dedo con el sector privado para reducir las listas de espera en un 18%, mientras se resolv¨ªan los problemas para sacar adelante los macroconciertos.

En la Junta de Andaluc¨ªa son conscientes de que la gesti¨®n de la sanidad puede pasarles factura en las urnas, pero conf¨ªan en que los ¨²ltimos planes de choque reduzcan las listas de espera aunque en el PP insisten en que el problema depende del distrito sanitario en el que se viva.