La isla de Albor¨¢n, nueva meta de las mafias para el desembarco de migrantes
Una delegaci¨®n parlamentaria constata el malestar y la impotencia del ret¨¦n militar en la isla almeriense ante el desembarco incesante de personas desde narcolanchas
El destacamento del Ej¨¦rcito espa?ol ¡ªcon 11 soldados¡ª desplegado en la isla de Albor¨¢n, a unos 55 kil¨®metros al norte de Marruecos y a 85 kil¨®metros de Almer¨ªa, ya tiene una panificadora nueva para elaborar pan fresco, aunque es la ¨²nica alegr¨ªa que se han llevado los militares esta semana. Una delegaci¨®n de 13 parlamentarios de todos los partidos pol¨ªticos, desde el PP hasta los grupos independentistas, los visit¨® el pasado mi¨¦rcoles y recogi¨® su evidente malestar ante el repunte de narcolanchas que usan esta ruta, m¨¢s corta que otras, para introducir a personas migrantes de forma irregular en territorio espa?ol.
En lo que va de a?o, las mafias han desembarcado a 518 migrantes en este peque?o islote de solo siete hect¨¢reas en medio del Mediterr¨¢neo. Desde hace unos meses, Salvamento Mar¨ªtimo ha dejado de realizar traslados a la Pen¨ªnsula y estas personas se quedan varias semanas en el pe?¨®n sin que los soldados espa?oles tengan recursos ni medios para atenderlas hasta que son desplazadas. El Ministerio de Defensa est¨¢ construyendo una nave para mejorar algo su estancia.
Una comitiva con 13 miembros de la Comisi¨®n de Defensa del Congreso, encabezada por su presidente, el popular Alberto Fraga, realiz¨® el mi¨¦rcoles un viaje expr¨¦s de unas horas a la isla de Albor¨¢n para comprobar sobre el terreno la precaria situaci¨®n que vive desde hace unos meses el destacamento militar, emplazado all¨ª desde 1997. Las quejas ya les hab¨ªan llegado a los diputados por distintas v¨ªas, pero ahora tambi¨¦n se las han trasladado desde Defensa. Se resumen en que a los militares ¡°no les corresponde¡± acoger y atender a los inmigrantes, sino proteger la soberan¨ªa de un territorio que forma parte de Espa?a. La propia ministra de Defensa, Margarita Robles, quiso desplazarse al islote el pasado 11 de marzo tras registrar Albor¨¢n una entrada de 198 migrantes solo en el mes de febrero. El panorama no ha mejorado desde entonces.
El Consejo de Ministros, ante la evidencia de que Albor¨¢n se ha convertido en un espacio de inter¨¦s para las mafias que trafican con la inmigraci¨®n, aprob¨® en abril una partida de 1,3 millones de euros para levantar de urgencia una nave en la que acoger temporalmente a los reci¨¦n llegados, tras constatar que los mismos permanec¨ªan en esa peque?a isla sin edificaciones varias semanas. El pabell¨®n a¨²n est¨¢ en una fase muy primaria de construcci¨®n, como observaron en directo los parlamentarios, que tambi¨¦n concluyeron que en este asunto hay algo m¨¢s que tensiones entre los departamentos de Defensa e Interior, seg¨²n reconocieron tres diputados de diferentes partidos a EL PA?S.
En las ¨²ltimas semanas, la Guardia Civil, dependiente de Interior, ha asumido esas labores de traslado de los migrantes a la Pen¨ªnsula, pero esos desplazamientos, que antes asum¨ªa Salvamento Mar¨ªtimo y se hac¨ªan el mismo d¨ªa de la llegada de las lanchas, ahora se pueden demorar varias semanas. En Albor¨¢n apenas hay un faro acondicionado para albergar a los militares all¨ª destinados, un peque?o muelle y poco m¨¢s. Su orograf¨ªa es escarpada y solo dispone de una diminuta cala junto a ese pantal¨¢n.
En Interior precisan que recogen a los inmigrantes siempre que las condiciones meteorol¨®gicas lo permiten, pero entienden que, una vez que los migrantes pisan la isla, ya no pueden ser de su competencia. Remarcan que Salvamento Mar¨ªtimo ha dejado de ocuparse de los traslados y que ellos no pueden asumir ese servicio.
Los diputados de los diferentes partidos pudieron comprobar este mi¨¦rcoles sobre el terreno la gravedad de la situaci¨®n y escucharon de boca de los responsables del Ej¨¦rcito, tanto de los mandos desplazados desde Madrid como del jefe del destacamento, sus demandas. Entre enero y junio han llegado a Albor¨¢n 20 narcolanchas, que han abandonado en el islote a 518 migrantes (incluidos 31 menores y 23 mujeres), casi todos marroqu¨ªes. Los patrones llegan en ocasiones armados.
Los militares asentados en Albor¨¢n han comprobado, adem¨¢s, que muchas veces les conviene esconderse y ¡°no hacerse visibles¡± ante los traficantes para que no arrojen a los migrantes al mar abierto, en zonas de la isla con acantilados y de dif¨ªcil acceso. Los responsables de Defensa han concluido que a los traficantes les compensa ahora esta ruta porque es m¨¢s corta, m¨¢s econ¨®mica y menos peligrosa que la que lleva desde Marruecos a la costa de C¨¢diz o Almer¨ªa. Albor¨¢n est¨¢ a mitad de camino entre el cabo de Tres Forcas (Nador) y Adra (Almer¨ªa).
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