¡°El mayor riesgo de la Inteligencia Artificial es no utilizarla, porque el enemigo s¨ª lo va a hacer¡±

La pasi¨®n que el vicealmirante Javier Roca Rivero (Sevilla, 1966) transmite al hablar de su primer a?o de trabajo al frente del Mando Conjunto del Ciberespacio (MCCE) es contagiosa. A los tradicionales dominios en el mundo de la Defensa ¨DTierra, Mar, Aire y Espacio¨D, hace a?os que se a?adi¨® el Ciber. Este tiene una particularidad: ¡°Es el ¨²nico que es creado por el ser humano¡±, explica Roca a EL PA?S desde su despacho en la base militar de Retamares (Madrid). Y por tanto, es ¡°imperfecto¡± y ¡°tiene muchas vulnerabilidades¡±.

Una de las mayores debilidades a la hora de operar en este dominio es la cultura de la ciberseguridad en la propia sociedad espa?ola. O como a ¨¦l le gusta llamar: ¡°la ciberhigiene¡±, que es escasa. ¡°Al calificarlo con la palabra ¡®seguridad¡¯ se da a entender que la responsabilidad de la misma est¨¢ en el Ej¨¦rcito, en la Guardia Civil o en la Polic¨ªa; y eso es un error grav¨ªsimo¡±, ilustra. ¡°Si t¨² te encuentras mal, ir¨¢s a un m¨¦dico que te diagnostica y te dice lo que hay que hacer. Si le dices que fumas, bebes... el medico te dir¨¢: ¡®Cambia¡¯. Pues esto es igual¡±, compara en relaci¨®n al ¨¢mbito de la ciberdefensa. La responsabilidad (la cibersalud) de cada individuo es fundamental para que un pa¨ªs en su conjunto sea resiliente ante un ciberataque. Y es que en este dominio, a diferencia de los otros, es mucho m¨¢s dif¨ªcil defenderse que atacar.

Es precisamente esa ciberhigiene lo que preocupa al mayor mando de ciberdefensa en las Fuerzas Armadas. El vicealmirante advierte de que, pese a que Espa?a no ha vivido un ¡°Pearl Harbour digital¡± como Estonia ¨Dcuando en 2007 el Estado b¨¢ltico qued¨® totalmente parado y bloqueado durante semanas a causa de un ciberataque de Rusia¨D, el pa¨ªs no tiene tan buena salud de protecci¨®n en el ciberespacio como revelaba la edici¨®n de 2020 del ?ndice de Ciberseguridad Global de la Uni¨®n Internacional de Telecomunicaciones, que posicionaba a Espa?a en el quinto puesto por detr¨¢s de Estados Unidos, Reino Unido, Arabia Saud¨ª y Estonia. A su juicio, la falta de concienciaci¨®n de la ciudadan¨ªa situar¨ªa a Espa?a a mitad de la tabla. ¡°Ni el quinto, ni el ¨²ltimo. Estar¨ªa por la mitad¡±, resume, porque en esas clasificaciones no se tiene en cuenta el nivel de conciencia ni la capacidad de respuesta (la resiliencia). Para ello es necesario invertir en ¡°start-ups nacionales de Defensa¡±, apunta, ya que mantener cierta autonom¨ªa estrat¨¦gica es crucial en esta carrera.

Y como muestra, un bot¨®n: la Inteligencia Artificial (IA). ¡°Lo m¨¢s importante es ser conscientes de lo que es. La gente piensa que es una herramienta, una tecnolog¨ªa. Pero la IA es comparable al descubrimiento del fuego¡±. ¡°?Es peligroso? Pues si pones la mano a lo mejor s¨ª, pero si no hubiera fuego no podr¨ªamos comer. Luego, [gracias a ¨¦l, lleg¨®] la m¨¢quina de vapor y el tren¡±, exclama con la emoci¨®n de que en su ¨¢mbito, el de la ciberdefensa, est¨¢ todo por hacer.

¡°La IA tiene riesgos, pero grand¨ªsimas oportunidades. Y el mayor riesgo es no utilizarla porque el enemigo s¨ª lo va a hacer¡±, advierte. De hecho, en un reciente documento del Instituto Espa?ol de Estudios Estrat¨¦gicos (IEEE), el coronel del Ej¨¦rcito de Tierra Jos¨¦ Pardo de Santayana asegura que ¡°la IA desempe?ar¨¢ un papel cada vez m¨¢s importante en la pugna militar¡±.

Los enemigos

Esos enemigos ¨Do ¡°los malos¡±, como suelen referirse los militares de manera m¨¢s informal¨D son infinitos, aunque Roca los acota en base a unas declaraciones del director general del MI5 (los servicios de inteligencia brit¨¢nicos), Ken McCallum, que afirm¨® que la mayor¨ªa de ciberataques vienen de cuatro lugares muy concretos: Rusia, China, Corea del Norte e Ir¨¢n.

La atribuci¨®n, sin embargo, no siempre es f¨¢cil, y ni mucho menos r¨¢pida. Por eso, se?alar al responsable de un ciberataque es un ¡°acto pol¨ªtico¡±, dice Roca. Cuando una agresi¨®n en este dominio se produce ¡°de forma continuada¡± y causa ¡°los mismos efectos que un ataque [convencional] armado¡±, los aliados de la OTAN podr¨ªan invocar el art¨ªculo 5 del tratado de la Alianza Atl¨¢ntica que activa la defensa mutua. ¡°Al final, lo importante son los efectos [en la poblaci¨®n]¡±, apostilla.

Roca explica que ¡°todos los d¨ªas¡± hay ciberataques en Espa?a. ¡°Los hacen m¨¢quinas. Escanean el ciberespacio donde todos estamos conectados¡±. Explica que, en general, existen dos tipos de agresiones: la primera, y menos preocupante para las Fuerzas Armadas, son los ataques en los que te roban a nivel individual. ¡°Eso es lo m¨¢s probable, pero lo que preocupa menos¡±, insiste. Y luego est¨¢ el ataque para robar informaci¨®n sensible que m¨¢s tarde se monetiza. ¡°Por ejemplo, en las Fuerzas Armadas hay muchas cosas que son confidenciales como el despliegue de las operaciones, cu¨¢nta gente hay, cu¨¢nto armamento, cu¨¢nta munici¨®n... Esa informaci¨®n es vendible. El malo lo pone a la venta y ni siquiera sabe qui¨¦n lo compra¡±.

A lo anterior, prosigue el vicealmirante, se le a?ade la extorsi¨®n. ¡°El enemigo cifra informaci¨®n y no la libera hasta que no se pague. Y nosotros [Espa?a] no vamos a pagar, el Estado no puede pagar¡±. Tras unos segundos de silencio, sentencia: ¡°Estos son los realmente malos¡±.