Juan Cruz: ¡°No he escrito para defender a Polanco sino para contarlo¡±

¡°No he escrito para defender a Polanco, sino para contar a Polanco¡±, La frase del periodista y escritor Juan Cruz sobre su libro Ciudadano Polanco, los hechos de una vida (Debate, 2021), presentado ayer en el Colegio de Periodistas de Catalu?a en Barcelona sonaron a las c¨¦lebres palabras de Marco Antonio ante el cuerpo de Julio C¨¦sar en la tragedia de Shakespeare. No se trataba de loar a Jes¨²s Polanco (1929-2007), fundador de EL PA?S, enfatizando las figuras de los Casios y Brutos que buscaron su perdici¨®n, sino de mostrar un retrato ¡°poli¨¦drico¡± de un personaje fundamental en la historia de los medios en Espa?a y en la historia de Espa?a en general. Y de ofrecer un pedazo de esa historia que, subray¨® ayer Cruz, ha sido olvidada o mal contada, entre otras cosas por la damnatio memoriae (por seguir romanos) instada por el PP de Jose Mar¨ªa Aznar sobre Polanco, ¡°un decreto de olvido¡± tras el ¡°decreto de ruina¡± que le llev¨® a los tribunales.

Juan Cruz, tras apuntar ante una audiencia con notables profesionales del oficio que ¡°Barcelona es de los pocos lugares del mundo en que se puede hablar de periodismo con periodistas¡±, explic¨® la g¨¦nesis del libro, una larga entrevista a Polanco, en la que este, adem¨¢s de revelarle cosas personales, y la ¡°herida del caso Sogecable¡±, le explic¨® c¨®mo conceb¨ªa el periodismo y lo que pensaba de los periodistas. A partir de ah¨ª, el autor incorpor¨® otras voces, conversaciones y materiales, incluidos unos escritos autobiogr¨¢ficos del propio Polanco, para conformar el retrato fascinante y complejo de un hombre y una ¨¦poca.

Fue la presentaci¨®n del libro, en la que el autor cont¨® con dos compa?eros de excepci¨®n, los periodistas Llu¨ªs Bassets y M¨¤rius Carol (el tercero previsto, Antonio Franco, excus¨® su presencia), un apasionante ejercicio de memoria hist¨®rica y de historia del periodismo, con reflexiones ¨²tiles para el presente. El acto se ti?¨® de cierta melancol¨ªa no s¨®lo por la evocaci¨®n de la figura desaparecida sino por los recuerdos que desgranaron los tres veteranos periodistas y por la eleg¨ªa que hicieron de un oficio y de un modelo empresarial que parecen hoy amenazados.

Bassets, que record¨® que Polanco fue el que tom¨® la decisi¨®n de sacar el diario en Catalu?a, ante las suspicacias de Jordi Pujol, destac¨® c¨®mo el libro de Cruz, ubicuo periodista de raza, ¡°de bloc y bol¨ªgrafo¡±, trata sobre una ¡°tragedia espa?ola¡±, la del intento de destrucci¨®n del grupo Prisa, provocada por un ¡°cainismo enraizado en la clase pol¨ªtica y un patriotismo de hojalata¡±, y expres¨® su tristeza al contemplar lo que hubiesen sido ¡°este pa¨ªs y este grupo¡± de no ser por ese cain¨ªsmo, que se repite, ¡°y la indiferencia¡±. M¨¤rius Carol evoc¨® varios recuerdos de Polanco, entre ellos un bocadillo de sardinas en un bar de Sant Andreu elevado a la categor¨ªa de madalena proustiana.

Juan Cruz sintetiz¨® lo hablado con su habitual sensibilidad literaria: ¡°Qu¨¦ pas¨® y c¨®mo ahora somos m¨¢s tristes¡±.