Joe Orton y Tennessee Williams, dos iconoclastas en catal¨¢n
El sello Prometeu se especializa en la obra de poetas y dramaturgos transgresores del siglo XX, mayormente in¨¦dita, que ofrece en ediciones biling¨¹es
Como el tit¨¢n mitol¨®gico que al robar el fuego de los dioses para d¨¢rselo a los hombres mostr¨® audacia y rompi¨® reglas, Prometeu Edicions busca hacer lo propio ofreciendo, en versi¨®n biling¨¹e, autores del siglo XX in¨¦ditos en catal¨¢n, mayormente poetas y dramaturgos, ¡°que apuesten por la libertad personal y la de entender y vivir el mundo, reventando c¨¢nones sociales y art¨ªsticos¡±, define su editor, Xavier Arola. Y no hay dinamita mejor para ello que la producci¨®n teatral de un iconoclasta como el ingl¨¦s Joe Orton, del que completa ahora toda su obra dram¨¢tica (siete t¨ªtulos) con un segundo volumen que incluye su texto magno, Pel forat del pany. El curso pr¨®ximo llegar¨¢n las piezas m¨¢s experimentales, de nuevo en dos vol¨²menes, de otro inconformista, el estadounidense Tennessee Williams.
Nueve martillazos en la cabeza, mientras dorm¨ªa, de su celoso amante y mentor, Kenneth Halliwell, acabaron un verano con un Orton (1933-1967) en la c¨²spide de su trepidante carrera: ese mismo a?o ha recibido el encargo de escribir un guion cinematogr¨¢fico para The Beatles y ha terminado What the Butler Saw, su obra magna, que el dramaturgo barcelon¨¦s Marc Rosich ha traducido como Pel forat del pany: ¡°Es el gran comedi¨®grafo del teatro social de los 60, con una voz propia salida de alguien que es un homosexual armarizado todav¨ªa y con plena consciencia de hijo de clase obrera; total, una olla a presi¨®n que se traduce en su obra¡±, apunta el traductor.
¡°Coge la farsa y la comedia y las lleva al l¨ªmite del g¨¦nero para hacer teatro pol¨ªtico; es heredero directo de Wilde; en realidad, es el Oscar Wilde del Estado del bienestar¡±, compara, ingenioso, Rosich, aliviado de que la edici¨®n sea biling¨¹e porque le da libertad para traducir el polis¨¦mico juego de titulares de prensa, argot pop, esl¨®ganes publicitarios, jingles (mensajes comerciales cantados) y otros materiales ling¨¹¨ªsticos de los a?os 60 con los que Orton crea ¡°un humor epigram¨¢tico, cargado de m¨¢ximas¡±. Es la voz a obras de capas superpuestas de elementos del travestismo y la identidad sexual o sociopol¨ªtica. ¡°Es un trazo grueso propio de la comedia que acaba en un gran absurdo¡±, dice el dramaturgo formado en el Obrador de la Sala Beckett sobre una obra que ¡°no es f¨¢cil ni de traducir ni de montar: parece una comedia de enredo de puertas... y ni por asomo¡±.
Venganza de un mundo
La obra de Orton tambi¨¦n es ¡°una venganza de un mundo: ¡®Deformar¨¦ la realidad, me reir¨¦ de vosotros y vosotros mismos tambi¨¦n os vais a re¨ªr de ello¡¯ y eso se ve claro en obras como Bot¨ª, donde se mofa de dos pilares b¨¢sicos del capitalismo como son la polic¨ªa y el sistema sanitario a partir de una enfermera; o en Pel forat del pany, donde cae la psiquiatr¨ªa¡ Siempre se venga del sistema que le oprime, sea el Estado o la familia¡±, apunta por su parte Isaias Fanlo, autor de la introducci¨®n al primer volumen de la obra teatral de Orton, publicada cinco meses antes del inicio de la pandemia y que conten¨ªa las obras El bergant al repl¨¤, Entretinguem el Sr. Sloane y Bot¨ª. La nueva entrega, am¨¦n de Pel forat del pany, ofrece El Camp Erpingham, El criat fidel y Jocs f¨²nebres, inicialmente pensadas como guiones televisivos, pero estrenadas en teatro. Para este experto y profesor de Literatura en Cambridge, que ve tambi¨¦n muy clara la interrelaci¨®n de influjos entre el dramaturgo londinense y Nobel Harold Pinter con la obra de Orton, la producci¨®n de ¨¦ste es ¡°una mezcla de vida y escritura, la hace pensando en su imagen para los lectores del futuro y eso se detecta a¨²n m¨¢s en sus famosos diarios: es lo que tambi¨¦n ley¨® su mentor, que se sinti¨® superado por el disc¨ªpulo¡±.
El trayecto de Tennessee Williams (1911-1983) fue a la inversa del de Orton: a pesar de su, ya desde sus inicios, fulgurante carrera en el teatro comercial, el autor de La gata sobre el tejado de zinc caliente o Un tranv¨ªa llamado deseo fue elaborando una producci¨®n experimental, ¡°de tipo m¨¢s expresionista, on¨ªrica, muy alejada de sus grandes dramas realistas¡±, apunta Rosich, que tambi¨¦n ser¨¢ el traductor de los dos vol¨²menes dedicados al dramaturgo estadounidense, previstos para 2022. El primero de ellos arrancar¨¢ con Camino real, obra de la que Rosich realiz¨® la adaptaci¨®n que dirigi¨® Calixto Bieito en EE. UU. en 2012. El segundo reunir¨¢ algunas de las piezas ¡°m¨¢s crepusculares, desde su La noche de la iguana, fruto de tres d¨¦cadas de experimentaci¨®n, sin ¨¦xito alguno, cuando el p¨²blico ya le hab¨ªa dado la espalda¡±, centra Rosich, autor prof¨¦tico de A m¨ª no me escribi¨® Tennessee Williams.
Las traducciones de Orton y Williams cuentan con el apoyo financiero del Institut del Teatre, en un esfuerzo m¨¢s de Prometeu de buscar alianzas para, desde su aparici¨®n en 2017 con el juego de la narrativa obscena, entre la pornograf¨ªa y la m¨ªstica, de la portuguesa Hilda Hilst, o el teatro de Dar¨ªo Fo y Natalia Ginzburg, editar ¡°un tipo de libros de fondo, para un p¨²blico conocedor, que toda cultura debe tener¡±, piensa Arola. Lo hacen a un cauto ritmo de dos t¨ªtulos al a?o y con tiradas de no m¨¢s de 600 ejemplares. Pero con la misma convicci¨®n con que Prometeo sab¨ªa que con su gesto transgresor se convert¨ªa en valedor de la cultura humana.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.