La v¨ªa escocesa

La primera ministra de Escocia, Nicola Surgeon, present¨® el pasado 7 de septiembre en el parlamento de Holyrood su programa de gobierno para el periodo 2021-2026. Como era de esperar, Sturgeon reafirm¨® el compromiso del Gobierno escoc¨¦s con un refer¨¦ndum de independencia, que situ¨® en la primera mitad de la legislatura, es decir, ¡°antes del fin de 2023¡±, siempre que la covid-19 lo permita.

Que el SNP reitere su apuesta por un segundo refer¨¦ndum de independencia no es nada nuevo: lo viene diciendo desde que la mayor¨ªa de brit¨¢nicos vot¨® a favor de la salida del Reino Unido de la Uni¨®n Europea. La novedad es que el programa de gobierno de Sturgeon cuenta con el apoyo del Partido Verde de Escocia, que en agosto firm¨® un acuerdo de colaboraci¨®n con el SNP, en virtud del cual el nuevo ejecutivo escoc¨¦s contar¨¢ con ministros ecologistas, una circunstancia que no se hab¨ªa dado nunca en la historia del Reino Unido. Aparte de incrementar la base parlamentaria del gobierno independentista de Escocia, es indudable que el Partido Verde ha venido a reforzar su flanco ecologista y m¨¢s en general el papel de Escocia como l¨ªder mundial en la lucha contra la emergencia clim¨¢tica.

La promesa de un nuevo refer¨¦ndum en Escocia puede reanimar al alica¨ªdo independentismo catal¨¢n, que al menos en su variante pragm¨¢tica siempre ha considerado a Escocia como un referente (el botifler Junqueras es un adepto confeso de la v¨ªa escocesa). Pero puestos a establecer referentes no estar¨ªa de m¨¢s ampliar el campo de visi¨®n para hallar inspiraci¨®n en otros ¨¢mbitos de la pol¨ªtica escocesa. En este sentido, una ojeada al acuerdo firmado por el SNP y los verdes pone de manifiesto la distancia abismal que hay entre escoceses y catalanes en un asunto tan clave como es el despliegue de las energ¨ªas renovables.

La parte catalana es conocida: despu¨¦s de que ERC y la CUP pactaran la suspensi¨®n de facto del Decreto 16/2019, de medidas urgentes para la emergencia clim¨¢tica y el impulso a las energ¨ªas renovables, la consejera del ramo, Teresa Jord¨¤, se apresur¨® a anunciar en el Parlamento la modificaci¨®n de dicho Decreto para este pr¨®ximo oto?o, con el fin de dotar al ¡°territorio¡± del derecho a vetar las nuevas instalaciones de energ¨ªa fotovoltaica y e¨®lica. Las plataformas y grupos de inter¨¦s contrarios a estas instalaciones proliferan por doquier y mientras tanto Catalu?a sigue en la cola de Europa en renovables, por mucho que el presidente Aragon¨¨s haya incorporado el ¡°verde¡± a su panoplia de adjetivos sobre la Catalu?a que persigue.

El documento firmado por el SNP y los ecologistas escoceses tambi¨¦n contiene el adjetivo ¡°verde¡± (¡°trabajamos juntos para construir una Escocia independiente m¨¢s justa y m¨¢s verde¡±), pero en este caso podr¨ªamos decir que la cosa va en serio. En la p¨¢gina 14 del documento los firmantes manifiestan su prop¨®sito de instalar entre 8 y 12 GW de energ¨ªa e¨®lica terrestre para 2030 (adicionales a los 8,4 existentes), as¨ª como 11 GW de energ¨ªa e¨®lica marina (adicionales a los 0,9 GW actuales). Seg¨²n las estimaciones del Institut Catal¨¤ de l¡¯Energia, la potencia total instalada en Catalu?a ahora mismo es de 1,27 GW, y mientras que los escoceses plantean entre 19 y 23 GW nuevos para dentro de 9 a?os el Gobierno catal¨¢n se propone llegar a 12 GW¡­ en 2050.

El pasado 5 de septiembre tuvo lugar una manifestaci¨®n en Capmany (Alt Empord¨¤) contra el proyecto de instalar 75 aerogeneradores de 200 metros de alto a lo largo de la Sierra de la Albera. El n¨²mero podr¨ªa resultar desproporcionado, pero en realidad el problema no es de cantidad sino de concepto. Meses antes, la llamada Ponencia de Renovables desestim¨® un proyecto en Llan?¨¤ (Alt Empord¨¤) que constaba de dos tristes molinos, con una modesta capacidad de 0,5 MW (0,005 GW). Para decirlo r¨¢pido: lo que quieren muchos municipios son 0 molinos. En un pa¨ªs en el que el 54% de la energ¨ªa el¨¦ctrica que se consume es de origen nuclear, la ojeriza que suscitan los molinos es un aut¨¦ntico misterio.

En resumen: Escocia es y seguir¨¢ siendo l¨ªder mundial en renovables, mientras que Catalu?a est¨¢ y seguir¨¢ estando en la cola. Despu¨¦s de muchos ¡°queremos¡±, promesas imperativas y verbos en futuro, en su primer discurso de investidura el entonces candidato Pere Aragon¨¨s dijo que ¡°tenemos que convertir Catalu?a en un pa¨ªs l¨ªder en econom¨ªa verde en Europa y la Mediterr¨¢nea¡±. ?Hemos de querer? Catalu?a podr¨ªa ser muchas cosas, pero l¨ªder en renovables, va a ser que no.