La reindustrializaci¨®n de Nissan solo cubrir¨¢ en 2023 poco m¨¢s de la mitad de la plantilla que espera la recolocaci¨®n
El ¡®hub¡¯ de electromovilidad y Silence se han comprometido a contratar a 710 extrabajadores de la firma japonesa, de los 1.300 que llevan casi un a?o consumiendo el paro a la espera de la culminaci¨®n del proceso
El retraso que ha sufrido el proceso para reindustrializar la planta de Nissan en la Zona Franca de Barcelona, que ech¨® el cierre a finales del a?o pasado, tiene en vilo a los trabajadores. Si no hay una nueva dilaci¨®n, el Consorcio de la Zona Franca de Barcelona confirmar¨¢ antes de Navidad que el consorcio formado por QEV y BTech, de la mano del operador log¨ªstico Goodman, podr¨¢ finalmente ocupar la antigua f¨¢brica de Nissan y poner en marcha su proyecto para fabricar veh¨ªculos el¨¦ctricos. Pero la lentitud de las decisiones amenaza con no poder cumplir con las expectativas de todos los trabajadores que, desde enero, esperan la recolocaci¨®n mientras van consumiendo el subsidio de paro. De los 1.600 empleados que fueron despedidos (sin contar los prejubilados), unos 300 ya se han desvinculado del proceso y han pedido el 20% de la indemnizaci¨®n que les faltaba, y que todav¨ªa tienen congelada los 1.300 que esperan ser repescados. Pero los planes de las nuevas empresas no llegar¨¢n para todos en este segundo a?o en el que todav¨ªa tienen el paro: QEV y BTech contemplan contratar a unas 600 personas el pr¨®ximo a?o, mientras que el fabricante de motocicletas Silence ha fichado ya a 40 y espera alcanzar las 110 en 2023. En total, 710 trabajadores.
El cierre de Nissan, con el ensamblaje de la ¨²ltima ranchera en la l¨ªnea de producci¨®n, fue un mazazo para los trabajadores, pero pronto empez¨® el proceso de reindustrializaci¨®n, que se ha demostrado lento y plagado de contratiempos. Mientras, el 80% de la plantilla empez¨® a cobrar el subsidio de paro en enero. Uno de ellos es Mario Garc¨ªa. Entr¨® como operario a los 18 a?os ¡ªahora tiene 49¡ª y ha pasado por los talleres de montaje de motores y ejes, los de transmisiones y los de carrocer¨ªas. Cobra unos 1.000 euros de paro. ¡°Yo contaba con prejubilarme en la Nissan como hab¨ªa hecho mi padre, pensaba que si llegaba un modelo m¨¢s, ya ser¨ªa suficiente para m¨ª¡±, explica por tel¨¦fono. El subsidio representa la mitad de lo que cobraba como trabajador. ¡°Si me administro bien, voy haciendo, porque soy soltero y tengo el piso pagado, pero he tenido que ir recortando, ya no viajo tanto ni compro ropa¡±, dice. ¡°Siempre he confiado en que me recolocar¨ªan. No es que est¨¦ desmoralizado, un poco s¨ª porque va pasando el tiempo, pero empiezo a impacientarme. Espero no tener que gastarme los dos a?os de paro¡±, dice Garc¨ªa, que reconoce estar ¡°decepcionado¡± por el proceso: ¡°Sobre todo por los Gobiernos, porque ya se ve¨ªa que Nissan se ir¨ªa, y las administraciones no hicieron mucho por impedirlo. Y luego, con la negociaci¨®n, todos esper¨¢bamos que fuese mejor, los sindicatos han batallado mucho, pero se han encontrado con muchos palos en las ruedas¡±.
Garc¨ªa explica que, de los que est¨¢n esperando, muchos est¨¢n en su situaci¨®n: ¡°Cobrando el paro en esta especie de tiempo sab¨¢tico y si no llega para los gastos, rascando algo de la indemnizaci¨®n. Pero todos conf¨ªan en volver a trabajar¡±. Otros, sin embargo, han tenido que buscar otro empleo porque con el subsidio no llegan a fin de mes. Es el caso de Sergio, de 47 a?os, que prefiere no dar su apellido, y que ahora trabaja en una multinacional de servicios. ¡°Desde el primer d¨ªa empec¨¦ a buscar trabajo, mi filosof¨ªa es no esperar nada ni a nadie¡±, dice. En este tiempo, ha enlazado algunos contratos y solo ha consumido algo m¨¢s de dos meses de paro. Ha decidido no pedir la indemnizaci¨®n completa, pero no conf¨ªa en volver a Nissan: ¡°Sigo en el proceso de reindustrializaci¨®n por si acaso, pero mi objetivo es quedarme donde estoy ahora. Es una empresa muy estable, con buenas condiciones, y es un trabajo para toda la vida. Aunque tambi¨¦n pensaba que Nissan ser¨ªa para toda la vida...¡±.
La nueva empresa es consciente de que el a?o que viene no podr¨¢ cubrir a todos. ¡°Estamos hablando con la Generalitat y con los trabajadores para ver si podemos maximizar la contrataci¨®n a partir de diciembre de 2023, antes de que empiecen a consumirse las prestaciones por desempleo¡±, explica Joan Or¨²s, consejero delegado de QEV Technologies. La empresa prev¨¦ poder ocupar las plantas de El Prat y de Montcada i Reixac en febrero y poder empezar su furgoneta de ¨²ltima milla bajo la marca Zeroid en el ¨²ltimo tramo del pr¨®ximo a?o para intentar alcanzar una producci¨®n de 20.000 unidades en 2024. Su socio, Btech, trabaja a su vez para poner en marcha el ensamblaje de un modelo similar al de la furgoneta NV200 el¨¦ctrica que Nissan produc¨ªa en Barcelona y que ahora se comercializar¨¢ bajo la marca Ebro. Por su parte, Silence estima el inicio de la producci¨®n de su cuadriciclo el¨¦ctrico durante el primer trimestre en las mismas instalaciones de la Zona Franca. Fich¨® primero a nueve personas y ahora ya ha contratado a una cuarentena, con el objetivo de alcanzar las 110 personas a finales del a?o.
El proyecto de QEV y BTech se ha visto fuertemente recortado desde su propuesta inicial, cuando conformaban la idea 20 empresas con una disposici¨®n de inversi¨®n de 800 millones de euros. Finalmente quedaron esos dos socios, que constituir¨¢n una sociedad conjunta. Sus problemas para conseguir avales han recortado finalmente sus pretensiones de conseguir fondos europeos a trav¨¦s del Proyecto Estrat¨¦gico para la Recuperaci¨®n y Transformaci¨®n Econ¨®mica (PERTE) del veh¨ªculo el¨¦ctrico. Al final solo conseguir¨¢ 57 millones de euros aunque ha aplicado tambi¨¦n al programa Moves II para intentar captar m¨¢s ayudas. De momento, otros proyectos de veh¨ªculos que ten¨ªan en cartera tendr¨¢n que esperar. Con su proyecto anual, la previsi¨®n de inversi¨®n ser¨¢ de algo m¨¢s de 300 millones de euros.
Ayudas desaprovechadas
Si la mitad de los trabajadores de Nissan no tienen todav¨ªa garant¨ªas de empleo, peor lo tienen los que trabajaban para los proveedores, que se quedaron totalmente hu¨¦rfanos en la reindustrializaci¨®n. La lentitud de las administraciones ha jugado tambi¨¦n en su contra. La Generalitat pidi¨® a finales de 2021 a la Uni¨®n Europea fondos para dar formaci¨®n personalizada a parte de los 2.500 trabajadores despedidos por Nissan y a otros 8.000 afectados que trabajaban para sus proveedores. Bruselas aprob¨® otorgar 2,8 millones de euros a cargo del Fondo Europeo de Adaptaci¨®n a la Globalizaci¨®n para Trabajadores Despedidos. El desarrollo del programa, en el que participan el Gobierno catal¨¢n y los agentes sociales, est¨¢ todav¨ªa en trabajos y fuentes sindicales explican que de los 1.700 despedidos por ERE en la automoci¨®n en Catalu?a entre julio de 2020 y enero de 2022 para que se pudieran beneficiar de la medida apenas quedar¨ªan 700 posibles beneficiados, porque el resto se habr¨ªa prejubilado, habr¨ªan encontrado trabajo o no estaban interesados.
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