El ¡®crowdfunding¡¯ que apoya a los bancos de alimentos

La algarab¨ªa pol¨ªtica acapara los focos. Una bulla que genera confusi¨®n y acalla los problemas cotidianos. Las colas del hambre, silenciosas, atraviesan la ciudad como un calambrazo. Pero su aumento no parece concernir a los representantes p¨²blicos. Al menos as¨ª lo enuncia Manuel P¨¦rez de Camino, uno de los impulsores de la campa?a Madrid x Madrid, que busca apoyar a los bancos de alimentos de la ciudad a trav¨¦s de peque?as donaciones.

¡°Uno de cada siete madrile?os lo est¨¢ pasando mal y seis de cada siete madrile?os podemos hacer mucho por ellos¡±, reza el lema de la iniciativa, recurriendo a una poderosa regla de tres. Ya existen multitud de organismos prestando apoyo a los m¨¢s golpeados por esta crisis. Sin embargo, ¡°esa cantidad de redes genera cierta dispersi¨®n¡±, anota P¨¦rez de Camino. Madrid x Madrid pretende unificar las ayudas, para distribuirlas despu¨¦s equitativamente entre tres fundaciones que reparten alimentos y varios centros municipales de servicios sociales. El objetivo de la recaudaci¨®n se ha fijado en el mill¨®n de euros. En tan solo cuatros d¨ªas, ya han ingresado 80.000.

En esa eficacia tiene mucho que ver el apoyo de dos clubes de f¨²tbol. Tanto el Atl¨¦tico de Madrid como el Real Madrid se declaran embajadores de la campa?a, cuyo s¨ªmbolo muestra a Cibeles y Neptuno fundidos en un beso. Cuando las distancias pol¨ªticas parecen transformarse en abismos, el deporte escenifica la uni¨®n de los madrile?os. ¡°Primero hay que resolver lo importante. No podemos cegarnos con las discrepancias partidistas si la gente est¨¢ pasando hambre. Ya habr¨¢ tiempo de discutir, ahora toca ayudar¡±, concede este creativo publicitario de 49 a?os.

¡°Uno de cada siete madrile?os lo est¨¢ pasando mal y seis de cada siete madrile?os podemos hacer mucho por ellos¡±

Madrid x Madrid

Como otros miles de vecinos, Florentino P¨¦rez mostr¨® su respaldo a la campa?a, asegurando que "Madrid ha vuelto a dar un ejemplo de unidad, de sacrificio y de superaci¨®n. Nos tenemos que convertir en la capital de la solidaridad". En una comparecencia grabada, y difundida en las redes sociales, el presidente del equipo blanco a?adi¨® otra consigna: ¡°Juntos estamos enfrent¨¢ndonos a una de las situaciones m¨¢s dif¨ªciles de nuestra recite historia. Y juntos vamos a salir adelante¡±. La recaudaci¨®n de fondos estar¨¢ activa hasta finales de mes. Las donaciones se efect¨²an mediante la aplicaci¨®n m¨®vil Bizum o por medio de la plataforma de micromecenazgo iHelp.

Todo comenz¨® un domingo perezoso con la llamada de tel¨¦fono m¨¢s inesperada, rememora P¨¦rez de Camino: ¡°Un colega me present¨® la idea y r¨¢pidamente contest¨¦ que quer¨ªa participar de ella¡±. Aquello sucedi¨® hace tan solo tres semanas, cuando una docena de desconocidos ¡ª¡°amigos de amigos¡±¡ª se reunieron telem¨¢ticamente por primera vez. Fue la consecuencia de muchas emociones encontradas vividas durante el confinamiento. Los grupos familiares de WhatsApp, las im¨¢genes de los informativos de la televisi¨®n y los soliloquios en el Congreso de los Diputados revelaban una tensi¨®n en escalada.

¡°Hab¨ªa que hacer algo¡±, agrega el promotor. Dise?aron una estrategia comunicativa cargada de positividad que busca solucionar un enorme drama. No quer¨ªan fundar la en¨¦sima asociaci¨®n de caridad, sino impulsar las que ya existen. Algo de econom¨ªa del esfuerzo, quiz¨¢: ¡°La clave es la suma de las peque?as cosas: un poco de cada uno puede lograr mucho¡±. A escalada de ciudad, lo que pudiera parecer un lugar com¨²n se vuelve transformador. ¡°Nos toca estar a la altura de una necesidad social sin precedentes. El reto es enorme, lo s¨¦. Pero de ello depender¨¢ que lastremos este episodio en un futuro¡±.

P¨¦rez de Camino indica la importancia de la difusi¨®n, pues un proyecto como este requiere del boca a boca si quiere expandirse. Las donaciones ¡°en la medida de las posibilidades que tenga cada cual¡± resultan tan imprescindibles como su divulgaci¨®n. ¡°La idea no es contagiosa por ser una buena idea, sino porque quien la cuenta cree firmemente en ella. As¨ª no hay nada que la tumbe¡±. El ma?ana m¨¢s pr¨®ximo marca otro reto: que la ayuda contin¨²e cuando el Gran Confinamiento pase, pero sus feroces consecuencias permanezcan entre nosotros.