Los anestesi¨®logos del Infanta Leonor de Madrid piden a Sanidad que abra las nueve UCI que tiene cerradas

No es la primera vez que lo piden. Lo hicieron en la primera ola. Y en la segunda. Y han vuelto a hacerlo este mi¨¦rcoles. El servicio de anestesia del hospital Infanta Leonor, en Vallecas, ha escrito una carta dirigida al consejero de Sanidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, para que d¨¦ la orden de abrir las nueve plazas de UCI que ese centro tiene cerradas desde que se construy¨®, en 2008. Ante ¡°el contexto de tensi¨®n hospitalaria¡± en el que se encuentran, ¡°es necesario activar los planes de elasticidad pertinentes [protocolos que los hospitales redactaron durante la primera ola para habilitar m¨¢s espacios donde atender a los enfermos] para aumentar la capacidad de camas de cr¨ªticos¡±, se lee en el documento. Pero, a?aden, sin ¡°improvisar¡± esos espacios en lugares como el gimnasio, ya habilitado para pacientes semicr¨ªticos. La situaci¨®n actual y ese plan de elasticidad puesto en marcha, aseguran, ¡°no cumple con los est¨¢ndares de calidad en la atenci¨®n a los enfermos cr¨ªticos¡±.

No es el ¨²nico documento que han redactado. Hicieron otro la pasada semana para la direcci¨®n y la gerencia del centro. Dos d¨ªas despu¨¦s, el jueves, tuvieron una reuni¨®n con el director m¨¦dico, que les asegur¨® que ya se hab¨ªa pedido dicha apertura ¡°en mayo y en junio¡±, pero que ¡°si el de arriba no firma, no firma¡±, narra un especialista del hospital. El 18 de enero, en un correo electr¨®nico, el jefe de servicio de Anestesiolog¨ªa ya avisaba a su equipo de que la situaci¨®n de la pandemia en la tercera ola y la imposibilidad de derivaciones a otros hospitales de pacientes cr¨ªticos covid hac¨ªa previsible la apertura del gimnasio como unidad mixta de semicr¨ªticos y cr¨ªticos.

En noviembre del pasado a?o, el hospital realiz¨® la canalizaci¨®n de gases necesaria en ese espacio para poder instalar tomas de ox¨ªgeno y tratar all¨ª a pacientes graves. Pero eso, explican los facultativos, ¡°no es suficiente¡±. ¡°Es para todos una decepci¨®n que, tras lo vivido en la primera ola, dicho espacio siga cerrado. Teniendo en cuenta que contamos de forma ordinaria en nuestro hospital con ocho camas de UCI, la apertura de nueve camas supondr¨ªa un aumento del m¨¢s del 100%. La apertura de esta UCI supondr¨ªa, adem¨¢s, una mejora sustancial en la calidad de los cuidados, ya que se trata de una unidad con boxes independientes como dictan los c¨¢nones de atenci¨®n de cr¨ªticos (como la actual UCI y Reanimaci¨®n). En este tipo de unidades es mucho m¨¢s factible, entretrolar los brotes de bacterias multirresistentes, individualizar y optimizar la atenci¨®n de los pacientes, as¨ª como garantizar su seguridad y no menos importante, la seguridad del personal¡±, escriben en esa carta.

En la unidad de cuidados intensivos, a cargo del servicio de esa especialidad y con esas ocho plazas, hab¨ªa ayer seis pacientes de coronavirus, uno de otra patolog¨ªa y una cama libre. La unidad de reanimaci¨®n, habitualmente llevada por anestesi¨®logos y usada para los pacientes que salen de quir¨®fano, con seis camas, ten¨ªa cinco enfermos de covid y uno m¨¢s de otra patolog¨ªa, y ya la llevan intensivistas.

La URPA (la unidad de recuperaci¨®n tras la anestesia), sin boxes aislados, ¡°actualmente tiene capacidad para seis pacientes por limitaci¨®n de enfermer¨ªa [no tienen suficiente plantilla], aunque f¨ªsicamente podr¨ªan entrar ocho camas¡±, explica un facultativo de ese centro; ingresadas ah¨ª hay cinco personas y se est¨¢ usando, con profesionales de Anestesia, tanto para postquir¨²rgicos como para pacientes m¨¦dicos, es decir, que no han salido de ninguna operaci¨®n. Y la CMA (cirug¨ªa mayor ambulatoria) ¨Dsin habitaciones, es un espacio di¨¢fano¨D se usa actualmente para postoperatorios no graves, ya sean ambulatorios (que no necesitan ingreso) o con hospitalizaci¨®n, tambi¨¦n gestionada por los anestesi¨®logos.

Todo este engranaje tiene poco sentido para 24 de los 34 facultativos de Anestesia que han firmado la carta dirigida al consejero cuando en ese centro hay una UCI sin abrir, como tambi¨¦n ocurre en el Infanta Sof¨ªa, con 16 camas de cr¨ªticos cerradas. En ese sentido, tambi¨¦n ¡°insisten¡± en la ¡°derivaci¨®n de pacientes cr¨ªticos o con necesidad de soporte intensivo a otros hospitales de la Comunidad de Madrid, en especial al Enfermera Isabel Zendal¡±. Este centro, arguyen, ¡°se ha creado precisamente con el fin de mitigar la presi¨®n asistencial de otros centros en la situaci¨®n actual de pandemia o en las previsibles situaciones de crisis que se planteen en un futuro¡±.

Recuerdan que, con el pasado reciente en su hospital, uno de los m¨¢s afectados durante la pandemia, se ¡°demuestra que la sobrecarga desproporcionada sufrida en la primera ola comprometi¨® la actividad ordinaria programada y asistencial urgente, con una importante disminuci¨®n de la actividad asistencial no covid¡±. Lo que ¡°supuso un evidente perjuicio en la morbimortalidad de los pacientes¡± de su ¨¢rea. La forma de evitarlo, dicen, es ¡°si se coordinan adecuada y eficazmente las derivaciones de los pacientes cr¨ªticos¡±.

Ellos, afirman, tienen ¡°alta disposici¨®n, buena voluntad y ¨¢nimo de cooperaci¨®n en aras de ofrecer la mejor atenci¨®n posible¡±. Y concluyen: ¡°[Durante la pandemia] se ha trabajado con dignidad y con la mayor excelencia posible en situaciones y condiciones laborales que, debido a lo antag¨®nico de nuestra praxis profesional habitual, han tenido en los profesionales de este servicio de Anestesiolog¨ªa un gran impacto ps¨ªquico y an¨ªmico¡±.

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