Soy m¨¦dico jubilado y no ir¨¦ al homenaje de la Comunidad de Madrid por estos motivos
Un doctor de atenci¨®n primaria con 46 a?os de servicio escribe una carta a la gerente de Atenci¨®n Primaria, Rosario Azcutia, exponi¨¦ndole sus razones para ausentarse de un acto de reconocimiento
Estimada Rosario, he recibido una carta tuya invit¨¢ndome a un homenaje por mi jubilaci¨®n y la de otros compa?eros, el 22 de mayo. Quiero que sepas que no pienso acudir por varios motivos. En primer lugar, esta carta llega muy tarde. Yo me jubil¨¦ en agosto de 2021 y la pandemia pod¨ªa justificar no realizar un acto p¨²blico como el que quer¨¦is hacer ahora, pero lo que carece de justificaci¨®n es que la Gerencia de Atenci¨®n Primaria que diriges desde diciembre del a?o pasado no tuviese el detalle de ponerse en contacto conmigo a lo largo de 2021, 2022 y 2023 mediante llamada, mensaje o carta, felicit¨¢ndome por mis 46 a?os en activo y agradeciendo mis servicios. Eso no ocupaba tiempo ni lugar, ni depend¨ªa de la pandemia.
S¨ª hubiese agradecido recibir un simple ¡®gracias, adi¨®s y hasta siempre¡¯. Vamos, lo que har¨ªa cualquier ¡°jefe¡± con cualquier trabajador en mis condiciones y m¨¢s si el ¡°jefe¡± o los ¡°jefes¡± son compa?eros m¨¦dicos que me han conocido a lo largo de tant¨ªsimos a?os. Esto, Rosario, no fue culpa de la pandemia. Fue culpa de la deshumanizaci¨®n tan brutal que existe en la Gerencia. En lugar de ser tratados como personas, somos simples peones de una gran empresa de Salud.
Yo he vivido, en otros tiempos, gestos de cari?o de la Gerencia por las jubilaciones de compa?eros o por el fallecimiento de familiares, entre ellos mi padre. Entonces, recib¨ª una corona de flores y visitas al tanatorio de varios directivos. Pero m¨¢s recientemente sufr¨ª el silencio m¨¢s absoluto cuando falleci¨® mi madre.
Afortunadamente, mi centro de salud (Benita de ?vila) al que me incorpor¨¦ cuando se inaugur¨® (1993) me hizo una fiesta de jubilaci¨®n inolvidable. Acudieron much¨ªsimos compa?eros, mi mujer y mis hijos. En definitiva, me rode¨® la gente que me quer¨ªa y quer¨ªa estar a mi lado en ese d¨ªa tan importante para m¨ª.
Otro motivo para no acudir al homenaje es que la empresa nunca se ha preocupado por mi salud. Jam¨¢s se me hizo una anal¨ªtica, ni una exploraci¨®n de mi capacidad cognitiva. Nunca os hab¨¦is preocupado por si ten¨ªa alguna enfermedad contagiosa y m¨¢s en mi caso que por mi especialidad como cirujano infantil desarroll¨¦ un programa de Cirug¨ªa Menor como creo no se ha hecho en ning¨²n equipo de Atenci¨®n Primaria en Madrid, y quiz¨¢s en Espa?a, habiendo realizado unas 6.000 intervenciones quir¨²rgicas.
Adem¨¢s, sabr¨¢s que me he caracterizado durante los ¨²ltimos 25 a?os por la defensa de los derechos de los m¨¦dicos. La administraci¨®n nos ha maltratado, incumpliendo acuerdos firmados en desconvocatoria de huelgas. Est¨¢ desmantelando y abandonando la Atenci¨®n Primaria, permitiendo que haya equipos con solo un 50% de la plantilla, que no haya m¨¦dicos de tarde o en las urgencias extrahospitalarias. ?No os importa el sufrimiento de la gente? ?Pod¨¦is dormir con la conciencia tranquila?
Si acudiese al homenaje no ser¨ªa yo, traicionar¨ªa mis principios y defraudar¨ªa a tantos m¨¦dicos para los que he sido un ejemplo, pero sobre todo defraudar¨ªa a mis hijos.
Siento tener que enviarte esta carta a ti, puesto que te tengo especial cari?o desde que hace muchos a?os trataste a mis padres como su m¨¦dico de familia de manera ejemplar, con cari?o y humanidad, pero ahora est¨¢s en este puesto gerencial y una de las cosas que conlleva son da?os colaterales. Esta carta es un da?o colateral.
Alfonso L¨®pez Garc¨ªa de Viedma es m¨¦dico de atenci¨®n primaria jubilado y exdelegado sindical de Amyts.
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