Diplomacia econ¨®mica para un mundo convulso
Los cambios geopol¨ªticos causados por el enfrentamiento entre China y EE UU o la guerra en Ucrania provocan que la gesti¨®n de las grandes firmas espa?olas internacionalizadas sea m¨¢s compleja y con mayor dependencia de factores pol¨ªticos, por lo que es clave que el Gobierno y las embajadas se impliquen m¨¢s y mejor en reforzar la marca Espa?a
Un tapete de fieltro verde. Unos dados que giran como monedas dentro de un cubilete. Alguien los lanza. Los jugadores concentran la mirada. ?Qu¨¦ combinaci¨®n saldr¨¢? Es igual que la nueva arquitectura pol¨ªtica y econ¨®mica en la que convivir¨¢n durante las pr¨®ximas d¨¦cadas las grandes empresas espa?olas: (casi) nada se puede dar por seguro. Deglobalizaci¨®n, fragmentaci¨®n, autarqu¨ªa. Los economistas buscan una etiqueta. Poco importa. El mundo se fractura. Y las cifras son enga?osas. En el primer semestre del a?o, las exportaciones espa?olas de mercanc¨ªas alcanzaron su m¨¢ximo hist¨®rico. El Instituto de Comercio Exterior (ICEX) present¨® una cifra: 199.951 millones de euros. Pero este organismo recoge sobre todo datos de peque?as y medianas empresas.
Las compa?¨ªas de gran tama?o han de elegir y tienen que acertar. El Banco Mundial ¡ªdescribe Carolina Villegas, profesora de Econom¨ªa de Esade¡ª propone dos escenarios opuestos posibles. En el primero, estar¨ªamos en el m¨¢ximo de la fragmentaci¨®n geopol¨ªtica y se ver¨ªan limitados algunos productos como los semiconductores. En el segundo, esa fragmentaci¨®n aumentar¨¢ y los pa¨ªses querr¨¢n crear ¡°campeones nacionales¡± para evitar su dependencia del exterior. Uno de los dos futuros estar¨¢ equivocado. ?Cu¨¢l? Imaginen el minutero de un reloj parado entre dos horas, ah¨ª estamos, aguardando, la respuesta en el tiempo. ¡°El gran problema es la inseguridad jur¨ªdica. Buenas o malas, a las grandes empresas no les gusta que les cambien las reglas del juego a mitad del partido¡±, observa ?lvaro Ba?¨®n, profesor en la Facultad de Econ¨®micas de la Universidad de Navarra. ¡°Aunque son capaces de adaptarse a infinidad de espacios¡±. Porque la pol¨ªtica rota en un planeta complejo. El alejamiento de pa¨ªses ¡°no amigos¡± supondr¨ªa un aumento en el coste de muchos bienes intermedios con consecuencias inesperadas. Un ejemplo. Los paneles solares chinos son m¨¢s baratos que los europeos. Sin embargo, est¨¢n gravados con fuertes aranceles. ?Queremos enfrentar la emergencia clim¨¢tica entorpeciendo las tecnolog¨ªas indispensables en la transici¨®n verde?
Vivimos ¡ªal igual que en la canci¨®n de Joaqu¨ªn Sabina¡ª en esas ambiguas horas de la ma?ana que mezclan al borracho y al madrugador. Europa, Estados Unidos, Am¨¦rica Latina. Esta ha sido, por orden, la geometr¨ªa de las exportaciones espa?olas. El Viejo Continente (63%) acapara la ruta. Pero es un mercado muy maduro, envejecido y con un crecimiento bajo. Trump, por su parte, endureci¨® la entrada de firmas extranjeras y Biden no ha revertido la estrategia. Mientras, Latinoam¨¦rica sigue movi¨¦ndose a golpe de sustos (crisis en Argentina o el asesinato en Ecuador del candidato presidencial, Fernando Villavicencio) para su propio territorio y las filiales espa?olas all¨ª instaladas. ¡°Los cambios geopol¨ªticos causados por el enfrentamiento entre China y Estados Unidos o la guerra en Ucrania provocan que la gesti¨®n de las grandes firmas espa?olas internacionalizadas sea m¨¢s compleja y con mayor empleo dependiente de factores pol¨ªticos¡±, analiza Jos¨¦ Garc¨ªa Montalvo, catedr¨¢tico de Econom¨ªa Aplicada en la Universidad Pompeu Fabra (UPF). El reflejo de la inquietud. El 74% de los directivos que han participado en el estudio La empresa espa?ola ante un nuevo escenario internacional, de KPMG, afirma que el ¡°actual contexto mundial impacta negativamente en sus compa?¨ªas¡±. El pa¨ªs, y sus c¨¢lculos, debe cambiar la aritm¨¦tica de la presencia. Solo el 3% de las exportaciones llegan a las naciones emergentes y Asia. El centro econ¨®mico del mundo se ha trasladado al sur del continente asi¨¢tico, y Espa?a apenas tiene visibilidad en la regi¨®n.
Historia de ¨¦xito
Nuevos paralelos y meridianos para un territorio que durante 2020 (¨²ltimos datos disponibles del Instituto Nacional de Estad¨ªstica, INE) ten¨ªa 5.972 filiales en el exterior, un 15% menos que durante 2019, el primer a?o de la pandemia. En cualquier caso, es el origen de 187.963 millones de euros en ingresos y 714.652 puestos de trabajo. Nadie duda de la historia de ¨¦xito de la presencia espa?ola ah¨ª fuera. Aunque llegan d¨ªas ambiguos. ¡°La empresa debe orientarse hacia modelos de negocio de tipo multinacional a trav¨¦s de operaciones descentralizadas y, a la vez, con aumento del control de los procedimientos y de la estrategia para integrar las unidades regionales¡±, narra Pedro Rodr¨ªguez Veiga, director ejecutivo de Negocio Internacional de Minsait (Indra). A la ecuaci¨®n hay que sumarle las variables del talento local y una relaci¨®n m¨¢s que pr¨®xima con el cliente. Hasta aqu¨ª, el pensamiento de un gigante. La filial de tecnolog¨ªas de la informaci¨®n tiene una plantilla de unas 45.000 personas que se extiende por Am¨¦rica Latina, Italia, Portugal o Filipinas.
Cuando proliferan estos d¨ªas confusos, las organizaciones tratan de averiguar m¨¢s deprisa los retos, las preocupaciones de las compa?¨ªas. El informe MESIAS. Desaf¨ªos de las empresas espa?olas en el exterior (ICEX y Club de Exportadores e Inversores) ha preguntado a 414 expertos en internacionalizaci¨®n. Sobresalen tres respuestas, tres empalizadas. Conocimiento de los mercados (12,26%), competitividad (9,59%) y la marca Espa?a (8,87%). La suma conduce al 30,71% de los factores.
Detr¨¢s del tri¨¢ngulo hay una figura que, como advert¨ªa Montalvo, nunca hab¨ªa pose¨ªdo tanta importancia: la diplomacia. O la pol¨ªtica. ¡°Las delegaciones comerciales y las embajadas espa?olas en otros pa¨ªses tienen muy bien mapeadas las naciones donde est¨¢n implantadas. Conocen las compa?¨ªas. El problema es que faltan personal y recursos para descolgar el tel¨¦fono y decirle a una empresa en Zamora que existe otra en Argentina que podr¨ªa encajar con su negocio¡±, reflexiona Raquel Jorge, investigadora del Real Instituto Elcano. Esto se ajusta al conocimiento del mercado. Sin embargo, ¡°resulta necesaria m¨¢s coordinaci¨®n¡±, apostilla la experta. Las embajadas chinas poseen su propio mapeo, pero est¨¢n exigiendo a los 27 pa¨ªses de la Uni¨®n Europea una lista que identifique los productos sensibles (tienen prohibido adquirirlos) de los que s¨ª pueden comprar. Hasta ahora, cada naci¨®n, cada empresa, ha decidido casi por su cuenta.
Trabajo y ense?anza
La regi¨®n est¨¢ localizada, despu¨¦s han de cuadrar los n¨²meros. Una estrategia siempre acertada es evitar los errores. ¡°No podemos seguir compitiendo en salarios bajos, porque adem¨¢s se han contra¨ªdo¡±, advierte Miguel Cardoso, economista jefe para Espa?a de BBVA Research. Y avanza: ¡°Debemos tratar de mejorar el encaje entre fuentes de trabajo y ense?anza¡±. M¨¢s Formaci¨®n Profesional, menos licenciados en temas sociales. El destino de la ¨¦poca. ¡°Habr¨¢ oportunidades en la nueva clase media de China e India que demandar¨¢ art¨ªculos de lujo, moda, tecnolog¨ªa, vino y productos de mayor valor a?adido. Ser¨¢ m¨¢s dif¨ªcil que en Europa o en Am¨¦rica Latina, pero tenemos que hacerlo¡±, apunta. Queda tambi¨¦n pendiente la fusi¨®n de empresas familiares; o evitar que las compa?¨ªas cuando llegan a seis millones de euros de facturaci¨®n se detengan por ¡°miedo¡± a entrar en la Unidad de Grandes Contribuyentes, y el posible escrutinio de Hacienda o las exigencias que genera un comit¨¦ de empresa cuando se superan los 50 trabajadores.
Las grandes organizaciones requieren tama?o y ambici¨®n. Y algo que roza lo psicol¨®gico. ¡°Esquivar el contagio de la incertidumbre¡±, recomienda Pablo Guijarro, economista de Analistas Financieros Internacionales (AFI). ¡°Porque el gran desaf¨ªo es que se ha enriquecido el panorama de riesgos y hace falta tener una visi¨®n a largo plazo¡±. Incluso saber gestionar el optimismo. ¡°Existe una oportunidad en la mejor relocalizaci¨®n de los recursos de las grandes firmas¡±, subraya el experto. Pues, cuando el planeta tiene dos escenarios posibles, solo queda escoger uno. ¡°Resulta problem¨¢tico decidir si la estructura corriente (o la prevista de internacionalizaci¨®n) concuerda con los nuevos patrones de la cadena de suministro o si se deben acercar o diversificar las inversiones¡±, describe Jos¨¦ Garc¨ªa Montalvo. Y, desde luego, las nuevas exigencias de financiaci¨®n y la subida de los tipos de inter¨¦s condicionan la pol¨ªtica de expansi¨®n internacional.
Tras la macroeconom¨ªa, el sector asegurador siempre ha tenido el reto de adecuarse a las regulaciones de los pa¨ªses donde opera. Cada uno suele tener las suyas propias. Las tensiones geopol¨ªticas y la fragmentaci¨®n traen inestabilidad. Esto conduce a la volatilidad de las divisas. ?Consecuencias? Los precios de las ofertas de las compa?¨ªas se encarecen. ¡°Esa fragmentaci¨®n puede suponer mayores trabas a la salida exterior, pero tambi¨¦n aumenta el valor que la diversificaci¨®n geogr¨¢fica aporta a las compa?¨ªas¡±, explica Yago Fern¨¢ndez-Figares, subdirector general de Negocio Internacional del Grupo Mutua Madrile?a. La aseguradora gestiona en el campo internacional m¨¢s de 1.300 millones de euros en primas. Sobre todo en Chile y Colombia. El pa¨ªs andino ingres¨® el a?o pasado unos 850 millones, con un resultado neto superior a los 60 millones de euros. Y las primas del territorio del Caribe sobrepasaron los 450 millones.
Una ense?a en declive
El exterior para una gran empresa espa?ola es como el espacio, cada vez hace m¨¢s fr¨ªo. Cuestionados los expertos en el ensayo de KPMG sobre d¨®nde est¨¢ la Administraci¨®n y que deber¨ªa hacer para apoyar a largo plazo un tiempo cargado de nubes, la respuesta es un orvallo. Lluvia fina. El 82% pide apoyos fiscales y financieros a la exportaci¨®n; firmar (55%) los llamados Acuerdos de Promoci¨®n y Protecci¨®n Rec¨ªproca (APPRI); ayudas ante la disrupci¨®n geopol¨ªtica; respaldo frente a sanciones internacionales, colapsos de suministros o fen¨®menos clim¨¢ticos adversos (49%), y la promoci¨®n comercial, ferias y misiones sectoriales (48%).
Ese informe que lleva el acertado nombre de MESIAS ¡ªel ¡°salvador¡±, en tradici¨®n hebraica¡ª admite el socavamiento de la marca Espa?a. ¡°Tenemos un problema de imagen, marketing y ense?a que viene de lejos¡±, subraya Mauro Guill¨¦n, profesor en la Escuela de Negocios de la Universidad de Wharton (Pensilvania). ¡°Va m¨¢s all¨¢ de vender aceite a Italia para que luego lo envasen como propio. Esto ha mejorado con la aparici¨®n de Zara, Mango, Telef¨®nica, Santander, BBVA, etc¨¦tera. Pero todav¨ªa no obtenemos el precio que alemanes, franceses o italianos logran por un art¨ªculo id¨¦ntico¡±, alerta. La marca se mueve por los mismos par¨¢metros que la clasificaci¨®n de riesgo. Hemos (pese a casos como el de Rubiales) mejorado. Inditex o Iberdrola son l¨ªderes de sus negocios en Estados Unidos, Australia, el Reino Unido. ¡°El problema no radica tanto en la marca Espa?a como en la capacidad de cada compa?¨ªa para desarrollar su ense?a, dise?o, tecnolog¨ªa e innovaci¨®n pensando en continuar su expansi¨®n internacional¡±, valora el economista Jos¨¦ Carlos D¨ªez.
Repsol encaja en esa cartograf¨ªa. Viaja en el tren hacia el mundo verde. No est¨¢ sola en los vagones. Unas 24.000 personas, 79 nacionalidades y presencia en 29 pa¨ªses. Su pasar lista resulta similar a la de una embajada de un pa¨ªs de Occidente. Alemania, Francia, Italia, Noruega, Portugal, el Reino Unido, Libia, Chile, Colombia, Marruecos, Singapur e Indonesia, entre otros. Un mapamundi, una forma de avisar que todav¨ªa creen en una aldea de agua y tierra global. Donde habitan las ambiciones. ¡°La internacionalizaci¨®n de la compa?¨ªa pasa por la construcci¨®n de nuevos negocios internacionales¡±, revela un portavoz de la energ¨¦tica. El objetivo ¡ªdestacan¡ªes tener en marcha 20 GW de potencia instalada en todo el mundo durante 2030. Multiplicar por siete su tama?o en otros tantos a?os. Pl¨¢cet que acredita una nueva arquitectura del planeta.
Talento en una ¨¦poca de dudas
En 2021, cuando la pandemia amenazó también a las empresas, las firmas españolas consiguieron paliar la caída de la demanda exterior con las exportaciones. Esta estrategia ahora resulta un misterio. “Es difícil predecir la evolución del comercio mundial y la integración de las compañías de nuestro país en las cadenas de valor globales”, avisa Carolina Villegas, profesora de Economía de Esade. Lo hemos visto, sí, la carretera son constantes cruces de caminos, proliferan los estudios que sirven de mapa frente a lo desconocido. Un trabajo de la consultora EY presupone una fragmentación de la economía. Los directivos han respondido ante una experiencia que casi ninguno había vivido antes. Sobre un folio han escrito esa estrategia. Se lee. Transformación digital, desarrollo de una política de medio ambiente social y gobernanza (ESG) —pese a que a bastantes financieros ya les parece un término algo agotado—, retener el talento y tener una respuesta con vistas a las posibles interrupciones de la cadena de suministro. Nadie les ha preparado para lo imprevisto. El Consejo de Administración tendrá, también, que demostrar su talento.
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