Jos¨¦ Moro (Cepa 21): ¡°La exempleada detenida por el sabotaje a la bodega nos volvi¨® a pedir trabajo cuando sospech¨¢bamos de ella¡±
El bodeguero explica que el vino estaba asegurado, valora las perdidas en 2,5 millones de euros y lamenta que la compa?¨ªa de seguros se haya desentendido del pago
El bodeguero Jos¨¦ Moro est¨¢ tranquilo. Asegura, al otro lado del tel¨¦fono, que es ponderado en la gesti¨®n de las emociones. Hace unas horas que se ha enterado de la detenci¨®n, por parte de la Guardia Civil, de una extrabajadora suya como presunta autora del sabotaje sufrido el pasado mes de febrero en la bodega Cepa 21, en Castrillo de Duero, Valladolid. Han sido unos meses tristes, confiesa. ¡°Ten¨ªa ganas de que se solucionara este problema. Ha habido muchas personas de todo tipo, as¨ª como instituciones, que me han demostrado su cari?o, pero tambi¨¦n ha habido gente que ha malmetido con cosas que estaban fuera de lugar, que han dicho barbaridades de m¨ª, que no coinciden con lo que realmente ocurri¨®¡±, explica.
Durante la madrugada del 18 de febrero, una persona asalt¨® las instalaciones y vaci¨® tres dep¨®sitos, donde descansaban 60.000 litros de vino de la ¨²ltima cosecha. Moro durmi¨® esa noche en la zona privada de la bodega, tras haber cenado all¨ª mismo con unos amigos. No oy¨® ni un ruido que lo alertara del sabotaje que a las 3.30 de la madrugada se produjo en la zona de los dep¨®sitos. Se enter¨® el domingo por la ma?ana, cuando el equipo de enoturismo de la bodega entr¨® a trabajar, y descubri¨® el destrozo, valorado, seg¨²n el bodeguero, en unas p¨¦rdidas de 2,5 millones de euros.
Ya entonces aventuraba que se trataba de una mujer ¡ªtambi¨¦n se deduc¨ªa del v¨ªdeo que ¨¦l mismo difundi¨®¡ª, que ¡°sabe muy bien c¨®mo funciona todo¡±. Confesaba, adem¨¢s, que pod¨ªa estar relacionado con un tema laboral. No iba desencaminado. Porque la extrabajadora, ahora detenida y puesta en libertad con cargos, detalla Moro, ¡°hab¨ªa dejado la empresa tres d¨ªas antes de que sucediera el boicot a la bodega, aunque se le hab¨ªa comunicado el despido con 15 d¨ªas de antelaci¨®n¡±. Durante esas dos semanas, a?ade el empresario, la empleada, vecina de Villaescusa de Roa (Burgos), que llevaba trabajando en Cepa 21 un a?o aproximadamente y se ocupaba de funciones b¨¢sicas, tanto en la bodega como en vendimia, ¡°tuvo tiempo para hacerse con la clave de la alarma y con una llave para poder entrar en las instalaciones, y planear esa atrocidad, con la que ech¨® a perder un vino de excelente calidad¡±. Tampoco encuentra explicaci¨®n a los motivos que pudieron llevar a la investigada a cometer ¡°esta barbaridad¡±. Porque, seg¨²n relata Moro, ¡°la exempleada detenida por el sabotaje a la bodega nos volvi¨® a pedir trabajo hace unos meses, cuando sospech¨¢bamos de ella¡±.
En ese detalle es algo en lo que incide Moro, ya que este hecho lo enmarca dentro de uno de los momentos dulces de la compa?¨ªa, en pleno proceso de ¡°expansi¨®n y crecimiento de ventas, con unas considerables perdidas, dado que el vino derramado proced¨ªa de los dep¨®sitos donde se encontraba la producci¨®n de gama alta¡±. De Horcajo, la categor¨ªa premium, con un precio de 54 euros en tienda, destacaba que hab¨ªa perdido toda la producci¨®n de la cosecha: 20.000 litros, con los que elaboraba las 28.000 botellas que saca cada a?o al mercado. De Malabrigo, a 25 euros la unidad, se malogr¨® el mismo volumen, pero le quedaron tres dep¨®sitos m¨¢s. Lo que se salv¨®, seg¨²n detall¨® Moro cuando ocurrieron los hechos, fueron las 272.000 botellas de Cepa 21, que vende a unos 13 euros cada una.
El vino lo ten¨ªa asegurado, pero con la compa?¨ªa de seguros tambi¨¦n est¨¢ librando otra batalla. ¡°Al principio todo fueron buenas palabras con Mapfre. Se analiz¨® la trazabilidad, todo se contrast¨® y se vio que el vino era de calidad, pero a media que pasaba el tiempo se han desentendido. No nos han pagado. Hemos echado en falta este apoyo. Nos han dejado tirados¡±, cuenta Moro, que a pesar de este nuevo contratiempo reconoce ser afortunado: ¡°Me crezco ante las adversidades. Es una triste victoria. Muchos van a tener que agachar la cabeza. Ten¨ªa ganas de que solucionara todo por la palabrer¨ªa que he tenido que escuchar en este tiempo, pero voy a luchar m¨¢s que nunca para compensar esas perdidas¡±.
En abril de 2022, Jos¨¦ Moro abandon¨® la presidencia de la bodega Emilio Moro ¡ªque lleva el nombre de su abuelo y fundador¡ª, donde hab¨ªa trabajado durante 30 a?os, centr¨¢ndose en la internacionalizaci¨®n de los vinos y acabando su ciclo con una facturaci¨®n de 32,5 millones de euros. Su salida del negocio se acord¨® en una junta general de accionistas debido a discrepancias en la visi¨®n estrat¨¦gica de la joya de la corona de la familia. Su hermano Javier Moro se ocupa desde entonces de la gesti¨®n de la bodega, fundada en Pesquera de Duero en 1891. Y ¨¦l pas¨® a ocuparse del relanzamiento de Cepa 21, creada en el a?o 2000. En ella se elaboran cuatro vinos: Hito, Cepa 21, Malabrigo y Horcajo. En 2022, seg¨²n las ¨²ltimas cuentas registradas, la bodega factur¨® 5,7 millones de euros y tuvo un beneficio de 219.000 euros.
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